— ¿Quien es ella? — preguntó con el ceño fruncido.
— es Gwen, una chica de mi clase — sonrió — es muy agradable, creo que se llevarían bien.
— no me agrada — negó con la cabeza y sus rizos pelirrojos se sacudieron — dudo mucho que nos llevemos bien.
— ni siquiera la conoces, MJ. No puedes juzgar a las personas sin conocerlas.
— le gustas — aseguró — se le nota, así que no me agrada.
Peter soltó una carcajada y miró a su novia de manera risueña.
— ¿Estas celosa, Jones?
— ¡Claro que no! solo no me agrada — se cruzó de brazos molesta.
— no estés celosa —sonrió dándole un beso en la mejilla — solo es un amiga.
MJ miró a su novio dudosa, obviamente confiaba en él, pero esa chica no le daba confianza en lo absoluto. Podía ver la malicia que se asomaba en sus ojos cada vez que miraba a Peter, como movía su rubio cabello en señal de coqueteo y como habían veces en las que se le acercaba más de lo debido, así que no, no dejaría que esa tipa se le acercara.
•••
— ¡No creerás lo que me regalo Gwen! — se acercó a su novia emocionado y con una pequeña caja de regalo en sus manos.
— ¿Por qué esa chica te da regalos? — dijo molesta — no me agrada.
— deja de lado tus celos, MJ — rodó los ojos fastidiado. Su novia llevaba semanas con esa actitud —mejor no te hubiera contado nada.
— esta bien, esta bien. Dime ¿Que te regaló?
Peter se arrodilló en el césped frente a su novia, sonrió y metió sus manos a la caja, de esta sacó una pila de cómics.
— ¿Cómics?
— ¡Cómics! — dijo emocionado — Gwen dijo que un amigo de su padre tenía un hijo con una gran colección y como se iba a mudar, necesitaba deshacerse de ellos.
— ¿Y no encontró mejor idea que regalártelos a ti?
— ¿Puedes dejar esa actitud? — dijo ya harto.
— ¡lo haría si no te pasarás casi todo el maldito día con ella! — dijo levantándose del césped.
— eres una exagerada — rodó los ojos y se levantó, al igual que su novia.
— ¡Oh! ¿En serio? — dijo mirándolo con una sonrisa burlona — ¿Quién fue la que te invito ayer al cine? ¿Quién es la que ha tratado de salir toda la semana contigo a comer un helado? ¿Quién te ha ido a visitar a tu casa?
— Tu — dijo extrañado.
— ¡Exacto! ¡Yo soy la maldita estúpida que está detrás de ti siempre! Ahora dime, ¿Quién me rechazó la salida al cine? ¿Quién me dejó plantada en la heladería? ¿Quién es el que nunca está en su maldita casa cuando lo voy a ver? — dijo enumerando las preguntas con sus dedos.
— yo, pero eso no tiene nada que ver.
— ¿No? — lo miró con furia — Cuando me dejaste plantada, cuando rechazaste mi salida, cuando no estabas en tu casa ¿Cual fue tu excusa?
— estaba con Gwen — rodó los ojos.
— ¡Exacto! ¡Estabas con Gwen!
— ¡No puedo creer que seas tan celosa! — dijo exasperado — me gustaría por una vez en la vida tener una novia que no fuera una maldita celosa, alguien normal que no intimide a la gente que se le acerca.
