- ¡Doctora tabla!- gritaron desde lejos.
Sakura se giró enfadada buscando la persona que había dicho eso. La enfermera de recepción con la que hablaba segundos antes quedó muy sorprendida al escuchar aquel sobrenombre en la prestigiosa doctora Uchiha.
- ¡¿Qué haces aquí Ino-cerda?! ¡Estoy trabajando, no me llames así! ¡Y no te metas con mis pechos!
Ino se acercó con una sonrisa divertida.
- Si no me equivoco tu turno hoy termina a las diez de la noche, y son las dos de la mañana. ¿Verdad enfermera?- dijo dirigiéndose a la secretaria, que simplemente asintió.
- No es de tu incumbencia. Mejor ve a dormir que es muy tarde.
- Sí que lo es, me prometiste ir a tomar algo conmigo la semana pasada y finalmente te escabulliste del plan. Así que he traído esto.
Levantó su brazo para mostrarle la bolsa de plástico que traía consigo.
- ¿Qué és?
- Té verde y galletas.
- Es muy tarde para eso, ¿no crees?- preguntó Sakura frunciendo el ceño.
- También es muy tarde para que estés trabajando, y lo estás haciendo.
Sakura suspiró sabiendo que era una batalla difícil de ganar, y accedió a tomarse un descanso junto a ella. Caminaron fuera del edificio y en la oscuridad de la noche, decidieron sentarse bajo un banco de piedra iluminado por una farola encima de él.
- Me he enterado de que estás volviendo a trabajar más de la cuenta, ¿verdad?- dijo Ino de brazos cruzados.- Te saldrán canas antes de tiempo si sigues así...
- ¿Canas?- dijo Sakura sorprendida examinando un mechón de su cabello.- Eso no es verdad. ¿Y quién te ha dicho que trabaje demasiado?
- Naruto, como siempre.
Sakura abrió los ojos sorprendida y bajó la mirada al suelo.
- Ya veo, ese idiota no puede estar callado...
- Pero hacía ya bastante que no volvías a trabajar de este modo, pensaba que habías recapacitado- empezó a decir Ino.- ¿Ha ocurrido algo con Sasuke?
Recordó la última vez que vio a Sasuke. Después de lo que pasó entre Naruto y ella, cuando llegó a casa a casa y se encontró con Sasuke, no puedo evitar, no poder sostenerle la mirada, o marcar cierto espacio entre ellos, actuando de un modo muy extraño con él, y seguramente él lo había notado. Estaba seguro de ello, ya que a la mañana siguiente marchó sin hacer nada de ruido y sin decirle nada más y él solía avisarle siempre de que marchaba. Le preocupaba lo que podía estar pensando sobre su actitud, y si se había enfadado con ella, pero le dolía muchísimo más darse cuenta de qué merecía ser odiada por él el resto de sus vidas.
- No lo sé- respondió seria.- Pero, simplemente trabajo de este modo porque me gusta mi trabajo, no tiene nada que ver con nadie.
Ino la miró incrédula y suspiró. Abrió la bolsa de plástico situada entre las dos y sacó un par de galletas caseras.
- Es un poco triste tomar té y galletas a estas horas- dijo riendo.- No había pensado en ello, quizás sería mejor beber sake juntas en algún lugar.
- ¡No!- respondió muy contundente Sakura. Estaba aún algo traumatizada con la última experiencia bebiendo alcohol.- Quiero decir, estoy muy bien con el té.
- ¿Sakura la alcoholica diciéndome que prefiere té antes que sake? La debiste hacer muy gorda la última vez que bebiste.
- Oye, ¡para de ponerme apodos extraños! ¡Y yo no bebo tanto!
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Los verdaderos sentimientos de Sakura
RomanceSakura florece como la flor que representa su nombre. Desde su más tierna infancia ha sentido un gran amor por Sasuke, él lo es todo para ella. Pero movido por la venganza que llena su corazón, decide partir con Orochimaru y cambia. Sin embargo ese...