Capítulo 31: Desarrollo de capacidades

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-¿Que? El fuego transforma todo compuesto del aire y lo transforma en dióxido de carbono, una molécula que no te brinda lo necesario para transformarlos a agua; así que aquí dentro no hay mas que calor -La derribo con una mano en su espalda, sin activar "manifestación" para no lastimarla de gravedad.

Sebastián cayo al suelo mas de una vez, aun cuando hacia uso de Ventus Impulit(1) que volvía mas difícil por la velocidad incrementada, no podía vencerla .
La castaña observo aquel escenario donde su; ahora, aliada despareció por una cortina de llamas y Carter prolongándose; se vio en la necesidad de crear un guardián.

-Protege a Celeste -Ordeno y la criatura se alejo, ingresando en aquella extraña circunferencia. Miro como el de cabello carmesí era golpeado una larga distancia contra el suelo, se incorporo enfadado.

-¡Eso es injusto! -Comento el pelirrojo cada palabra con un jadeo y se notaba ligeras heridas en su cuerpo.

-¿Por que? Utilizamos todos nuestros recursos -Recrimino Raquel.

-Pero nosotros no sabemos hacer eso, en ese caso, hubiésemos ganado -Volvió a quejase el mas alto de todos y trepo hasta el guardián para retirar su cabeza con furia, una pila de rocas cayeron al suelo.

RAQUEL:

Y así es como termina una pelea amistosa para comenzar una discusión con el objetivo opuesto.

-Estas equivocado; por eso fuimos seleccionados de esta manera -Dije

-Carter tiene razón, las vencimos -Negué frenéticamente con la cabeza ante las palabras de Sebastián.

-Me vencieron a mi, Raquel seguía de pie -Contradijo Celeste.

-Debieron continuar la pelea -Manifesté gélida.

-¡Es broma ¿Cierto?! ¡En primer lugar no debiste usar un guardián! -Refunfuñó el pelirrojo.

-Jamas se impusieron normas; ni siquiera ustedes lo hicieron -Objete.

-Pero evidentemente tienes ventaja; ostentas de muchos años entrenando -Exclamo el ojigris.

-Exacto; si nosotros nos encontrábamos a tu nivel ¡Ganaríamos fácilmente! -Manifestó con molestia el único de cabello rojo.

-Por eso la decisión estaba equitativa, pero no finalizaron el enfrentamiento -Comento la azabache.

-¡Aaron! -Manifesté al unisono, junto a Carter y Sebastián. El mencionado esperaba pacientemente a que concluyera la disputa.

-Bueno... Ambos equipos dieron todo lo que pudieron; pese a la clara desigualdad que tenían los chicos, supieron ver las debilidades y crear un buen plan. En cambio Raquel y Celeste se esforzaron con su máxima capacidad, felicidades. Pero diría que... Fue un empate -La ojiazul aplaudió levemente, el masculino de cabello matizado estaba conforme con el resultado, yo esbocé una sonrisa satisfecha; por otro lado, Carter...

-¿Que? Sufrí la paliza de mi vida solo por un estúpido empaté; Ugh, lo detestó -Bufo y camino de regreso al templo.

-Ya se le pasara -Pronuncio un socarrón Sebastián.

-Ya lo creo... -No despegue mi vista de el camino que tomaba el joven, aun cuando desapareciera tras la entrada de la construcción -Sin embargó, ahora vuelvo -Asintieron los presentes y me fui.
Observe que el pelirrojo utilizaba su camisa para limpiar su rostro y la mojaba proviniendo del elemento del agua. No hable hasta ver que se la volvía a poner.

-Buena rabieta, niño -Rodó los ojos y reí.

-Continua y te combustionar completa -Amenazo aun con cólera.

2° Las Bestias Elementales [Sin Editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora