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-- ¿Entonces? -La voz de MingHao interrumpe sus pensamientos devolviendolo a la realidad. Le costaba creer lo que había vivido unas noches atrás, su lobo aún resentido por el rechazo, tratando de mantenerse orgulloso a pesar de que el frío siguiera lastimandolo desde el interior-

-- Entonces nada, él sólo estuvo en el momento indicado -se defendió, sin sonar lo suficientemente convincente-.

-- ¿Quieres decir que él estaba a kilómetros de su cabaña, a mitad de una tormenta y te encontró en medio de una crisis... por pura casualidad? -La sonrisa burlona del beta ampliándose con cada segundo que el omega pasaba en el silencio. Conocía a MinGyu de toda la vida, era prácticamente de la misma camada y diafrutaba verlo en negación hacia las atenciones del alfa- Su lobo te quiere, Gyu.

MinGyu termina por dejar a un lado la canasta con frutos secos que tenía entre sus manos con suspiro de frustración, necesitaba dejar de reprimirse y comenzar a gritar.

-- Deja de decir eso -respondió malhumorado- Ni siquiera sabes lo que es una tener una conexión así de intensa con alguien más.

-- Tonterías, es lo único de lo que hablan todos -reviró los ojos dando a entender que era demasiado obvio, ni siquiera prestó atención a las palabras del moreno que para cualquier otro beta pudieron sonar incluso ofensivas- Dale una oportunidad.

-- No sería justo para él.

-- Claro que no, pero tampoco es justo que te eches a morir sin hacer el intento, él está haciendo el suyo. -sonrió con picardía tomando la flor que descansaba entre ellos para deslizarla por la mejilla del moreno- Ni siquiera está esperando que sea primavera para cortejarte.

Por supuesto que no iba a esperar, ni siquiera le había importado cuando el aroma de WonWoo lo marcaba como su omega, menos lo haría después de la situación en la que lo vio. Aún podía sentir el calor del alfa contra su piel, era como tocar el sol con la yema de los dedos, su omega temblando de frío encontró refugio entre sus brazos, aferrandose con desesperación a esa última oportunidad.

Cualquier otro alfa hubiera aprovechado que estaba tan vulnerable para marcarlo, su lobo no hubiera opuesto resistencia y él, por su puesto, ni siquiera estaba consciente como para dar el sí.

El instinto de alfa lo obligaba a atenderlo, a salvarlo del vacío en el que estaba cayendo con una marca que lo anclara a la vida, sin embargo ahí estaba todavía, libre. Solo.

-- Hao... -el omega se echó hacía atrás cayendo de espaldas sobre la nieve, el sol se veía distante como cada invierno, parecía que sus rayos a penas podía alcanzarlos-

-- Dime... ¿cuántos lobos consiguen flores después de las nevadas? Se está esforzando, puntos por eso.

-- ¿Te está pagando por tratar de convencerme?

-- Solo no quiero ver que sigas así...

~~~~~~~~~~~~~

Había pasado más de una semana desde el incidente y las heridas de WonWoo aún no sanaban, ahora, sin el cuidado constante del omega, parecían estar peor.

No podía culparlo por alejarse de él, todos esos años supo que sólo era cuestión de tiempo para que su propio lobo tomara el control y lo obligara a buscar un alfa dispuesto a darle eso que él no podría brindarle.

Simplemente no pensó que fuera tan difícil, estaba tan acostumbrado a tener al omega merodeando a su alrededor todo el tiempo que tener su cabaña vacía era desolador. En otro tiempo, MinGyu estaría a un lado de su cama regañalandolo por ser un imprudente y salir herido de la peor forma posible, pero seguiría ahí, obligándole a beber toda clase de menjurjes asquerosos con la excusa de que era para sanar más rápido, aunque siempre sospechó que era sólo un castigo para que se cuidara más la próxima vez.

Ahora todo había terminado. Quería pensar que tenía suerte de estar herido porque así no podría toparse con él en el pueblo, no sabría cómo reaccionaría su alfa al verlo con alguien más.

Las manadas de lobos tenían la vieja costumbre de pedir el permiso del lider antes de consolidar una relación, era el derecho del alfa tomar al omega que quisiera y nadie podía resistirse a su palabra. Sólo necesitaba usar la voz para que incluso los alfas de rangos más bajos se rindieran a su voluntad. WonWoo, por supuesto, nunca hizo uso de la suya, pero cada primavera llegaban parejas jóvenes que, alentados por su padres y abuelos, se acercaban a él pidiendo su bendición.

Se preguntaba si Shownu sería de esos, si tendría el valor de llevar a MinGyu frente a él pidiendo su autorización. Lo peor Es que no tendría nada en contra, por mucho que ahora le costara admitirlo era uno de sus lobos de confianza, hace un par de años le había entregado el liderazgo del equipo de centinelas y nunca le falló, entrenando a los más jóvenes que poco a poco pasaban a ser parte del frente principal y nunca se resistió a una orden, fiel hasta los huesos como toda su manada.

Por otro lado, ¿qué sería de MinGyu si él intervenía? ¿Sería tan egoísta como para verlo consumirse en sí mismo antes de encontrar su felicidad en alguien más?

Dos toques en la puerta principal sacaron al alfa de sus pensamientos, una anciana de tez morena se asomó por la puerta de su habitación unos minutos después, dando un vistazo al azabache que tenía la mirada perdida en los copos de nieve que revoloteaban fuera de la ventana.

-- Necesitas que eso Cure pronto o tu lobo se volverá loco aquí encerrado -le interrumpió la mujer, dejando su morral de piel sobre la mesa-

-- Ya no duele tanto -mintió- Solo tengo que esperar.

-- ¿esperar? -una risa divertida salió de los labios arrugados de la mujer que ya se había sentado a un costado del alfa para remover las vendas- Esperar es lo que te tiene ahí postrado, WonWoo.

-- Soyou, no necesito un sermón -suplicó. Parecía que últimamente todos se sentían con el derecho de juzgarlo, si no era Cheol diciendo "te lo dije", era HyoJin burlándose de su suerte cuando llegaba visitarlo-

-- Necesitas una paliza por ser un chico estúpido -aclaró la alfa limpiando la herida sin consideración, el olor a carne muerta y sangre llenó sus fosas nasales. Era su cuerpo tratando de eliminar los tejidos que se contaminaron al momento del impacto-

-- Sigo siendo tu alfa -amenazó, demasiado harto para seguirle el juego-

-- Un alfa, un alfa -se burló la mujer sin importarle las amenazas- te hace falta mucho para comprender el verdadero significado de ser un alfa, cachorro. Pero ya te llegará la lección, prometió.

WonWoo, ni siquiera se molestó en responder, Era típico de la vieja Kim hablar en clave, todos los que alguna vez se le acercaron pidiendo consejo terminaban más confundidos que cuando llegaron y la mayoría de las veces no era más que charlatanería. No había de que preocuparse.

*****

No se qué ando haciendo, bye.




Flores en invierno [ Meanie ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora