Un niño miro,
Grita de alivio en el olvido.
Rompe en llanto su anhelada fobia,
Y atraganta su garganta con puñados de tierra,
Quiere quitarse el veneno del alma.
Con tinta pinta,
Su mayor fantasía,
La vida misma,
Es pulcra, es ajena.
El dolor y la herida no se siente,
Si a tu lado existe la presencia de un ser amado.
Mi corazón se siente roto,
Tiene hambre de amor gozoso.
Poemas baratos,
De sentimientos mundanos,
A mis diecisiete años,
Todos mis yo anhelan verte.
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Aversión
Short StoryCohibido en una fúnebre y solitaria esquina de mi confort. Es ahí, dónde las llamas de una fogata engendrada por mis ganas y la voluntad de velar por mi propia vida se esfumaban. Son consumidas por una oscuridad inconmensurable. Es ahí, dónde me sie...