TERRANOVA -[Gay/Yaoi]

Contrato Matrimonial Pt. 1

—¡Maldita sea SeokJin! —grito molesto SeokMin.

SeokMin, el padre de Jin, se levantó bruscamente del asiento de su escritorio, empujo la computadora al suelo y miro con enojo a SeokJin.
Estaban en el despacho de su padre, ya por el medio día, SeokMin trabajaba en ese lugar.

Después de la no sopreciba desaparición de Jin el día anterior, y después de haberse disculpado con su amigo e hijo, este comenzó su búsqueda tras su muchacho quien ahora estaba parado frente a el, con la ropa desaliñada, cabello sucio y marcas totalmente visibles en su rostro y cuello. A SeokMin se le olvido el coraje que pronto fue suplantado por la ira.

— ¿Como mierda te atreves a presentarte frente a mi así?

—Tu fuiste quien le dijo a las sirvientas de la casa que me prestara inmediatamente a ti cuando apareciera, bueno, estoy aquí como lo pediste padre. ¿Hay problema con eso?

—¿Te crees muy listo Jin? ¿Que mierda son esas pintas? ¿Donde estuviste la tarde de ayer a hoy? —se acerco a Jin y se detuvo tan cerca de él que Jin se incómodo. Su padre era unos centímetros mas alto que él, pero aún así no le tenia miedo—. ¡Respóndeme!

—¡Eso que importa! —gritó Jin ya harto de la situación. No dejaría que su padre lo intimidara, ya no era un niño—. No quería estar en este lugar horrible. Preferiría mil veces vagar en la calle antes que contigo aquí.

—¿Así es como pagas todos los sacrificios que he hecho por ti? ¿Esta es la manera de tratarme a mi, a tu familia?

—Esto no es una maldita familia sino una porqueria.

El sonido seco y sonoro de la bofetada que Jin recibió de su padre sono en la habitación. Jin estaba atónito aún si moverse ni creerlo, su padre le había golpeado. A pesar de las evidentes inconformidades de ambos en casi cualquier aspecto de su vida cotidiana, incluso desde niño hasta ahora, su padre jamás le tocó un solo cabello por más enojado que estuviese.

Por otro lado, SeokMin estaba tan furioso con Jin, tanto así, que en ningún momento se detuvo a pensar en que esto llegaría a suceder. Segundos bastaron para entender lo que había hecho. Nunca de los nunca había golpeado a su hijo, ni en su mente se le hubiera ocurrido hacerlo, sin embargo, algo reacciono dentro de él de forma automática y bajo el efecto de su furia lo hizo.

Las lagrimas de SeokJin comenzaron a brotar, se volvió a mirar a su padre y fue el turno de SeokMin de observarlo atónito por lo que había hecho.
Su rostro tenía marcado la palma de su mano, con ojos llorosos e hinchados y esa fina línea de sangre que bajaba de sus labios hasta el mentón. Todo eso fue la gota que derramo el vaso.

—Vete —fue lo ultimo logro decir SeokMin antes de que Jin saliera corriendo de ahí.

Todavía logro escuchar el llanto que Jin se llevo consigo cundo cerro la puesta azotándola. Se maldijo a si mismo y cerro los ojos recordando la fresca imagen de su rostro.

—Mina... perdóname —susurro. Tomo asiento y cubrió su rostro con las manos—. Acabo de lastimar lo que tanto amábamos.

...

NamJoon suspiró por tercera vez en la hora. Estaba en clase de las doce y para su mala fortuna, se encontraba cansado. Sentía que sus párpados pesaban como dos ladrillos. Miro hacia su reloj digital de la mesa y volvió a suspirar, parecía que las horas se pasaban el doble de tiempo en terminar.

Esta mañana cuando despertó por el estruendoso sonido de la alarma, noto que el cuerpo de Jin no dormía a su lado. Se levanto con prisa y reviso el cuarto de baño donde pensó que podría estar, pero no encontró nada. La ropa y todo lo que Jin traía consigo había desaparecido, y se percató finalmente de que en realidad estaba solo.