TERRANOVA -[Gay/Yaoi]

Mi nombre es TaeHyung Pt.2

NamJoon corrió hacia el pequeño chico se mantenía siendo un bulto en el suelo frío y sucio.
Apenas se acercó, noto como este contraía su cuerpo, haciéndose más pequeño en el piso. Tenía miedo.
A NamJoon se le estrujaba el pecho el verle de esa manera. Indefenso, maltratado, su apariencia era tan miserable que hacía que NamJoon se preguntará como era posible que alguien siguiera vivo en circunstancias como esas.

Se hincó frente al chico y rodeó con sus grandes brazos el cuerpo del menor. Escucho un chillido de dolor como repuesta por el movimiento e inmediatamente NamJoon retrocedió su tacto. Analizó cuál sería la mejor forma de llevarlo consigo, pero al final sabía que hiciese lo que hiciese, este sentiría dolor no importando con cuánta gentileza tratara de tomarlo.

El pequeño seguía gimiendo y llorando de dolor. NamJoon se apretujó el pecho, y tomó al joven cargándole por las piernas y la espalda, pegándolo fuertemente a su pecho para que este no sintiera más dolor del que ya sentía por el brusco movimiento que hizo moreno al cargarlo.

Miro de reojo el rostro del chico, y aunque no podía ver muy bien bajo las poca luz que le proporcionaba la luna llena, pudo notar cuan manchado de sangre y lágrimas se encontraba su pequeño rostro. Apenas y el muchacho podía mantener los ojos semi abiertos, y eso, alarmó al moreno. Tenía que tratar rápido sus heridas.

—Tranquilo. Te ayudaremos pequeño. —hablo con dulzura.

NamJoon se esforzó por ser lo más suave con sus movimientos para no lastimar más al muchacho. Temblaba de frío y miedo. A NamJoon le surgía un sentimiento de querer que se sintiera seguro con el.

Camino a paso veloz por el bosque hasta llegar a donde se encontraba el castaño. La fogata se encontraba encendida de nuevo y HoSeok tenía todo el botiquín de emergencia fuera y listo para ser usado.
Poco tardó en que el castaño se percatara de los dos sujetos que se acercaban hacia él. Tomó la colcha más gruesa que encontró y corrió con NamJoon para cubrir el delicado cuerpo del chico.

—Con cuidado HoSeok. Este chico está peor de lo que pensé.

—Dios santo.

El moreno bajo el cuerpo cubierto con la manta en el suelo. La luz del fuego les proporciono una mejor vista de la situación del chico.
Al parecer no solo estaba lastimado, si no que también presentaba signos de desnutrición y ¿Tortura? Una gran cortada en el muslo derecho llamo la atención del castaño.

—Por Dios. NamJoon tiene una enorme cortada en el muslo. ¡Podría estar infectada!

—HoSeok espera. —tomó al mano de este antes de que lo limpiara con una toalla que había tomado—. Si lo haces así empeorarás su situación. Coloca una olla de agua en el fuego.

El chico obedeció. Pasaron quince minutos antes de que el castaño regresará con la olla en las manos y la colocó junto al moreno mientras que él se posicionó en el lado contrario de NamJoon.
Para entonces, NamJoon ya había limpiado la mayor parte de las heridas del chico.
Miro por el rabillo del ojo y noto como este lo miraba con una mirada vacía. Ojos que mostraban maltratos. Su corrompido cuerpo era prueba de ello. De alguna manera, HoSeok sentía por primera vez como un piquete de irá emergía de su interior. ¿Por que sentía eso al verlo de esa manera? No sabía realmente.
Examinó con detalle el delgado y desnutrido cuerpo. ¿Era posible que los huesos resaltarán de esa manera tan exagerada? Instintivamente HoSeok pasó su mano por encima del la delgada y fría mano del joven. La uñas estaban ya crecidas, al parece tenía días descuidadas. Los huesos de sus manos era tan delgados que, en comparación a las de HoSeok, está se encontraba esquelética.

Un leve movimiento del la mano del contrario lo sorprendió de repente, este había tomado el dedo índice del castaño. Enseguida HoSeok regresó la mirada, solo para dar cuenta de que el chico seguía mirándolo, pero ahora ya no tenía esa mirada vacía como al principio, no, su mirada reflejaba un poco de súplica. Tal vez, lo que realmente pedía era calidez.