Estudiante De Intercambio [Changlix]

Capítulo Treinta y ocho

La mañana siguiente fue tranquila, ligera, todos los remordimientos fueron eliminados de la mente del pequeño omega, ya está totalmente seguro de que se quedara en Seúl con su familia. Pues después de clase se encontraron a Chan cargando con una carpeta con los papeles de Lee que necesita para inscribirlo de manera formal.

El miércoles un día tranquilo parece que los profesores se pusieron de acuerdo y no cargaron a sus alumnos con tareas y trabajos de más.

Cuando las clases terminaron decidieron festejar por la estadía de Félix, fueron al departamento de los menores para ver películas y muchas golosinas.

Fueron tres películas a las que nadie puso atención por platicar, todos llegaron a la conclusión de que se aumentarán a clases el día siguiente para poder dormir hasta tarde.

No tardaron en quedarse dormidos los menores en la alfombra de la sala insistiendo en que les gusta dormir ahí.

Seungmin se fue después de recibir una llamada importante que lo hizo salir prácticamente corriendo.

El pelirrojo subió a su pequeño auto, pero su auto, por el cual trabajo así como por todo lo que tiene. Por mucho tiempo olvidó lo que era que alguien le diera una mano o le diera algo que necesitaba. No es que lo reclame, simplemente lo enorgullece y lo hace aún más que su madre y hermana puedan verlo.

Su madre le llamo, avisando que estaba en Seúl y quería verlo, además le informó que su hermana iba con ella. Las lágrimas nublaban su vista.

Su familia está aquí. Su familia. Después de tanto tiempo las volverá a ver, a las mujeres por la cual daría la vida de ser necesario.

Llego a la estación de tren donde las omegas lo esperaban. Apenas estuvo frente a ellas sus ojos descargaron todas las lágrimas que llevaba aguantando en el camino.

Su madre apresar de la edad ni perdía el destello juvenil muy propio de ella. Y su pequeña hermana, que de pequeña ya no tenía nada, se veía tan madura y bella.

Corrió hacia ellas sin querer estar separado de ellas por más tiempo.

-- No saben cuanto las extrañe.. -- su voz sono rota --. Las necesita tanto.