Don't leave me please || Ziam Palik

28

Lunes.

Liam había salido desde temprano con sus tres hijos, hoy sería la penúltima "sorpresa" para Zayn y quería verificar que todo estuviese perfecto como siempre. No se molestó en despertar a su marido, simplemente escribió una notita y la pegó en el refrigerador para que este la viese cuando bajara a desayunar.

El despertador comenzó a sonar a las nueve de la mañana despertando a Zayn.
—Mmgh... Leeyum —se quejó adormilado—. Bebé, apágalo. —Se removió un poco en su lugar por el frustrante sonido hasta que decidió apagarlo el mismo. Apenas se sentó se dio cuenta de la ausencia de su marido, pensó que ya estaría abajo así que solo apagó el despertador, se colocó las pantuflas y bajó directo a la cocina—. ¡Bebé! —lo llamó mientras bajaba por las escaleras. Se sorprendió al ver que Liam tampoco se encontraba allí, pero no le dio mucha importancia, tal vez estaría arriba con los niños, pensó. Se acercó al refrigerador para sacar el galón de leche y se percató de el pequeño papel rosado que había pegado en la puerta de este.

Vístete conpletamente de color
blanco. Te veré a las 5:30 p.m.
en el campo libertad, te amo.

Liam xx.

Sonrió ampliamente al terminar de leerlo y después de guardar el papelito en el bolsillo de su pantalón pijama, se preparó un café, lo bebió de prisa y subió para ducharse. Sabía perfectamente que era lo que rememorarían ese día, había sido uno de los mejores días de su vida.

✹✹✹

4:55 p.m.

Ya solo le faltaba colocarse su colonia preferida y estaría listo para irse.

—De acuerdo, Malik, solo es esta y otra más, no hay nervios, lo harás todo bien —se dijo. Inhaló y exhaló lentamente—. Veamos... —miró su reloj de pulsera— justo a tiempo —sonrió para sí mismo.
Salió de casa y después de cerrarla con llave, subió a su automóvil. Encendió la radio después del motor y emprendió su viaje

✹✹✹

Llegó justo a la hora acordada. Bajó rápidamente del coche y
caminó hasta quedar bajo la sombra de un gran toldo blanco,  bastaron unos minutos para que Liam llegara por la espalda y le cubriera los ojos.
—¿Quién soy? —preguntó juguetón.

—El amor de mi vida —respondió el moreno quitando con cariño las manos del castaño y girándose para quedar frente a frente—. Hola, tú —sonrió mientras lo tomaba por la cintura.

—Hola, tú —devolvió el saludo a la vez que rodeaba el cuello de este con ambos brazos. Se besaron unos segundos y sonrieron al terminar—. ¿Recuerdas est...

Liam no pudo terminar ya que Zayn lo interrumpió:
—El lugar en el que te pedí matrimonio.

—¿Y también...?

—Y que después tú me diste la hermosa noticia de que seríamos padres.

—¡Correcto, Zee! Fue el...

—09 de mayo del 2006 —completó.

Liam sonrió.
—Exactamente. Vaya, veo que lo recuerdas muy bien.

—¿Y cómo no hacerlo?, ese sin duda fue de los mejores días de mi vida. Mi gran amor aceptó casarse conmigo y además me confesó que tendríamos nuestro primer bebé. Simplemente fue perfecto.

—Sin duda lo fue —sonrió para luego comenzar un nuevo y cálido beso.

Se separaron unos segundos después al escuchar el carraspeo de su hija.
—Gracias —dijo Ania cuando sus padres dejaron de besarse—. Bueno, papá Zayn, este nuevo recuerdo recién comienza. ¡Matthew! —llamó a su hermanito, quien llegó en un santiamén.