Hasta Perderlo Todo -julright-

47. Comiéndote a besos

Narra Carlos

-Esto es horrible.- susurró Julia en mi oído.

Solté una carcajada, sin poder evitarlo.

-Tú sí que sabes arruinar momentos bonitos.- dije, acercándome más a ella.

Sonrió, avergonzada.

-Todos nos miran.- replicó, bajando la cabeza, de manera que escondía la cara en mi pecho.

-Claro, somos los novios.- respondí, con obviedad.

-Pyes no me gusta.

-Eso debías haberlo pensado antes.- dije, sonriendo- eres un bebé.

-Tengo uno dentro, eso debe de afectar.- dijo, y reímos al unísono- Te quiero mucho.

-Y menos mal, porque eres mi mujer.

-¿Siempre tienes que bromear con todo?

Le observé un segundo, una sonrisa que estaba seguro que trataba de evitar asomó por su rostro.

Le aparté el pelo hacia atrás, de manera que su hombro izquierdo quedaba al descubierto, y dejé un pequeño beso ahí, reforzando mi agarre en su cintura.

-Todavía no me creo que seas mi mujer.- dije, en el momento en el que nuestros ojos conectaron.

-¿Y cómo llevas lo de ser padre?- preguntó, sonriendo.

-Ahora no estoy pensando en eso.- respondí.

-¿Y en qué piensas?

-Ese vestido te hace un culo...- me acerqué más a ella susurrando en su oído.

-Es que mi culo es increíble, cariño.- respondió, pícara- Tú tampoco estás mal.

-¿No estoy mal?

-Estás tremendo.

Me reí levemente, imponiendo unos centímetros más de separación entre nuestros cuerpos.

-También me hace muy feliz nuestra pequeñaja.- dije.

-¿Pequeñaja?- alzó una ceja- Pero si no lo sabemos.

-Intuición.- contesté, con orgullo.

-Pues yo creo que va a ser un niño.- dijo ella.

-Ya veremos.- le saqué la lengua y ella rió.

-¿Ya podemos parar, no?- preguntó, señalando al resto de personas de la sala, que habían pasado a un segundo plano para mí, como siempre que estaba con ella.

-Podemos hacer lo que quieras.- respondí, y fue suficiente para que me cogiese de la mano y comenzase a andar hacia una mesa.

-Anda, los novios...- dijo María, cuando llegamos hasta allí- Ya pensábamos que os ibais a un baño a follar.

-Qué graciosa eres.- rodé los ojos, ella me dió un golpe en el brazo- ¡Oye!

-Me recuerdan a cuando éramos pequeños.- dijo Marilia, cruzándose de brazos- Qué pesados.

Damion se rió, y en un movimiento de mano, se le cayó el vaso de agua, mojando a la persona que tenía al lado.

-¡Damion!- las carcajadas de mi amigo sólo hicieron que aumentar al ver la cara de África, que parecía visiblemente molesta- Ni puñetera gracia.

Marta estalló en carcajadas también, y Alba se levantó y se fue con ella.

-Ven Afri, vamos a buscar papel o algo.- dijo María, llevándosela del brazo junto a Famous.