FALL DAYS M.Y.G.

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Cerrado

Se leía sobre el pequeño cartel en el centro de la puerta de cristal del Scarywolf, la familia Onawa se había pasado toda la mañana dejando el lugar reluciente, en décadas no se hacia eso pero por ser una ocasión especial lo merecía.

El lugar estaba inundado de un delicioso aroma a estofado de carne de ternera (con eso de las dietas especiales) gracias a la luna todos era carnívoros.

-Huele delicioso- se confeso Tala, la boca se le estaba haciendo agua y su padre no se apresuraba en llegar con los invitados

-¿Crees que les guste?- Yoome era buena cocinera, pero no tenía confianza en sus aptitudes.

-Obvio- la menor de sus hijas le levanto los ánimos -¿Te sientes nerviosa por la alianza?- la pequeña quería saber el sentir de su hermana, no es que le importara mucho solo era mera curiosidad

Negó rotundamente -Tengo mis ideales bien definidos y por lo que entiendo la organización tiene los mismos-

-pero ¿crees que sean agradables los demás híbridos?-

La morena se encogió de hombros -relamente eso no me interesa, yo solo voy a hacer mi trabajo por mi gente-

Maka la miro con recelo, ¿como mierda no le interesaba la opinión de los demas? Odiaba ese aire de superioridad que se cargaba

Es alfa

Su lobo interior se lo recordó, no es porque se rigieran por un estricto código de niveles, simplemente era un dote que la Diosa Luna les había regalado a ellos

Idiota

-me alegro por ti- le sonrió dulcemente, asi que la mayor no se resistió y le robo un abrazo.

-¡YA ESTÁN AQUI!-  Owen que era el encargado de barrer corrio dentro de la cocina para lanzar lejos su delantal y pararse al lado izquierdo de Tala

Tanto los betas como las omegas que estaban presentes sintieron rápidamente esa extraño sensación de admiración, por inercia los centinelas sacaron el pecho y se pararon erguidos, mientras que las omega bajaron un poco la mirada, Tala obligo que su hermana levantase la mirada y la estuviese en alto,  Nani sonrió con suficiencia, no esperaba menos de su especie lo mejor de lo mejor estaba en la organización.

-Bienvenidos- se escucho el corito de los lobos

-muchas gracias por recibirnos- un alto moreno de ojos naranja inclino respetuosamente su rostro ante Nani, el fuerte olor a almizcle y moras le dio a entender que era la matriarca.

La gran mesa redonda estaba ocupada por las cinco parejas representantes de sus continentes, era una gran mezcla de culturas y gente, todo un placer a la vista, Yoome y Maka se apresuraron a servir la comida mientras que Jacob y Owen colocaban lo necesario en la mesa.

-¿Este es su lugar de reuniones?- la tigresa mayor pregunto, dejando escuchar su melodiosa voz.

Kato asintió -Cuando son asuntos superficiales, mayormente los rituales y problemas serios se hablan en la guarida, ubicada en medio del bosque-

Tala estaba impresionada por la belleza de la Tigresa, se veía tan linda, quizá tenía su edad, por un momento imagino las vidas que llevaba cada uno en sus tierras, quizás había princesas y reyes ahí o el presidente mismo y no lo sabia, pero lo que más le gustaba era que todos estaban ahí por tener el mismo objetivo; ganar derechos hacia los híbridos.

-¡La comida esta deliciosa!- la chica rubia iba ya por su segundo plato y todos suponían que comería un tercero

-mi esposa Yoome es la encargada de la comida, es una buena cocinará- Tala capto el rapido brillo de melancolía que inundó la mirada de su padre.