‣ Capitulo 6

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Salgo detrás de Annie y caminamos hasta toparnos con mi madre y Gustav muy acaramelados en el umbral de la puerta. Nos detenemos justo cuando él le entrega un ramo de tulipanes amarillos y le da un beso casto en los labios.

Incómodo.

—Hola cariño, que hermosa estás. —Le dice a mi madre en un tono dulzón que nunca había escuchado viniendo de él y ella sonríe nerviosa.

—Tú tampoco estás nada mal. —Le responde irradiando esa felicidad que hace mucho no pintaba en mi madre, y luego ladea levemente su cuerpo para buscar algo por detrás de la espalda de Gustav. —, ¿Y dónde están tus muchachos?

—Fueron a estacionar la camioneta, ya vendrán.

—Bien, iré a poner esto en agua. —Mi madre ve las flores con entusiasmo mientras se encamina a la cocina.

Gustav cierra la puerta a sus espaldas y nos mira con esa peculiar sonrisa que hace su boca chueca.

—Hola niñas. —Nos saluda a las dos.

—Gustav. —Dice Annie borde y se va a alcanzar a mi madre.

Él suelta un suspiro cansado. —, ya no sé qué hacer para caerle bien.

Me encojo de hombros. —, paciencia, sólo eso.

Asiente despacio. — ¿Cómo has estado pequeña Scar?

—Bien. —Por alguna razón mis dedos van al pulgar y comienzan a torturarlo, tengo suerte de que el no conozca ese tic raro que tengo cuando estoy experimentando uno de mis tantos episodios nerviosos o me siento abrumada. Sinceramente nada está bien, las peleas recientes que tengo con mamá me hacen sentir aturdida todo el tiempo, el que se vaya al bar todos los días últimamente me trae nerviosa y ansiosa, y la cena de esta noche fue la cereza de mi pastel mental. —, todo va bien. —Sonrío con los labios apretados.

—Me da gusto. —Dice metiendo sus manos a los bolsillos de su chamara de piel negra. —, y también me da gusto que sigas usando el collar que te di.

Por instinto me llevó la mano a la cadenita, envolviendo el pequeño colgante entre con mis dedos.

—Es muy lindo. —Le sonrió levemente.

Gustav me regresa el gesto. —, ¿Sabes por qué lo escogí?

Niego con curiosidad.

—Porque ese rojo intenso y oscuro me recordó a ti. —Dice y a mi cabeza llega mi padre, como un recuerdo en forma de brisa que me hace sentir un escalofrío. Mi nombre Scarlett fue escogido porque su color favorito era el escarlata y siempre que lo veía en algún lado mientras trabajaba me lo decía al llegar a casa. Algo que aún extraño con frecuencia y que jamás voy a volver a escuchar. —, claro, también me recordó a ese alocado cabello que tienes.

Siento como esa nostalgia increíble continua apoderándose de mi cuerpo.

—Es muy lin...

La puerta es tocada dos veces de forma brusca interrumpiéndome y haciendo que pegue un pequeño brinco en mi lugar, mi cuerpo por inercia girar sobre mis talones para descubrir quien ha sido el causante de mi pequeño infarto. Me acerco a la manija de metal para darle una vuelta y en cuanto lo hago frente a mí aparece un chico que me saca dos cabezas, robusto, fornido y con buena, no buena es corto, con una excelente condición física.

Se me queda mirando, es una mirada profunda muy familiar. Sus ojos verdosos me hacen sentir intimidada así que los deslizo a otra parte que no sea su rostro y me entretengo en los brazos tatuados sin pizca de color de piel, no hay espacios en blanco más que de las muñecas hacía los dedos.

PELIGROSO DESEO || LIBRO 1 +18 [✓] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora