"El paraíso llegó a mi en forma de mujer, tal vez vino a dejarme disfrutar o a declararme el exilio después de probar su fruto prohibido"
Dime Edén ¿serás mi perdición?
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(EDITADO)
Aarón
Voy a toda prisa tras Edén y Abby, me duele el corazón haberlas hecho llorar, no quiero que Edén piense que soy como Renan, no quiero que se aleje de mí, pero cuando salgo lo único que veo es el auto de Ian alejarse.
Candace aparece junto a mí y no puedo evitar sentir cierto desagrado hacia ella.
—Lo siento Aarón, si quieres hablo con ella —parece arrepentida, algo dentro de mí no le cree del todo así que hago lo mejor por ahora.
—Por favor vete Candace, solicitaré a un nuevo contratista —le digo con tono serio.
—¿Qué? No puedes dejar que un simple beso arruine nuestros asuntos laborales Aarón Donovan —clavo mi tensa mirada ante ella mientras sujeto su brazo.
—¿Un simple beso? Ese maldito beso puede arruinar lo que tanto me ha costado construir con esa hermosa mujer, puedo perder la confianza de mi pequeña hija —sentencio furioso.
—¡Lo siento! Me gustas demasiado y no he podido evitarlo —veo que está a punto de llorar así que decido soltarla.
—Señorita Dubois procuraré hablar con la agencia, retírate —zanjo.
La escucho resoplar, toma su bolso y sale furiosa de Versetto ante la mirada atenta de los trabajadores. Llamo insistentemente a Edén, pero no me responde así que decido llamar a Ian quien para que me diga dónde está.
Por favor cariño no te alejes de mí de nuevo, es todo lo que le pido al cielo.
Edén
La imagen de esa maldita mujer besando a Aarón no sale de mi mente, se repite como un disco rayado una y otra vez. Acaricio mi vientre mirando por la ventana de la que solía ser mi habitación en esta casa, como esperando a que él aparezca. Se claramente lo que vi, sé que él no tiene culpa en esto y que la alejó, pero no pude evitar que una ola de sentimientos negativos me golpeara con fuerza, siento como mi bebé se remueve, le tarareo una canción de cuna y empieza a calmarse.
Lo siento bebé, mami ha sido una tonta, es solo que ya no quiere sufrir más, te prometo que hablaré con papi, por ahora solo quiero algo de soledad.
Veo a mamá entrar a la habitación con un té y sonreírme cálidamente.
—Toma mi pequeña, todo estará bien —cojo la taza el aroma del té parece relajarme bebo un poco y lo dejo en una mesita cercana a mí.
—Gracias mamá, ¿dónde está Abby?
—Creo que será mejor que vengas a ver esto —sonríe y me toma de la mano guiándome al pasillo de este piso, me hace señas dándome entender que mire hacia abajo y no puedo evitar reír al ver tan adorable escena.
Caleb y papá están cantando con Abby una canción de una de sus películas favoritas.
—Hoy la lucha empieza, esa es la misión —empieza cantando Caleb rompiendo unos floreros de mamá con una escoba en su imitación de uno de los personajes de la película de Mulán, a lo que ella frunce el ceño y yo ahogo un grito de sorpresa igual que Abby y papá, pero mi hermano sigue como si nada —. Niñas me mandaron para tal acción....
