Katsuki Bakugo tiene claro sus metas, se esfuerza y no se deja distraer con facilidad. ¿Pero y si esta distracción se llamara Olympia? ¿Que pasaría si se encuentra con una chica que hace que todo su mundo se vuelva loco?
Girar por aquel callejón no...
Los examenes finales estaban a la vuelta de la esquina. La pasantías habían finalizado y Mina preguntaba animada lo que habían hecho. Le parecía increible las cosas que todos habían hecho. No se atrevió a preguntar sobre lo de Olympia pero la chica tenía una pequeña sonrisa.
Ese día tuvieron entrenamiento. Entrenamiento en el que Izuku demostró los bien que iba, pero había copiado a Katsuki, había copiado sus malditos movimientos y eso al rubio lo mosqueó, intentó contenerse a si mismo pero le era imposible, Olympia lo miraba con tristeza, sabía lo mal que lo pasaba al fin y al cabo, sabía que hasta el momento la mayor pesadilla de Katsuki era no lleagar a ser el número uno. Pero claro, eso no sería así para siempre. Katsuki explotó en la última clase, retando a Todoroki y a Midoriya. La albina salió tras el pidiendo disculpas. Nadie entendía muy bien que tenían Katsuki y Olympia. No entendian por que venian se iban juntos y ni se imaginaban que vivian juntos.
Olympia tranquilizó al rubio, lo abrazó e hizo que se sentara en el suelo. Apoyó su cabeza sobre la de este y con sumo cuidado acarició el rostro de Katsuki, las finas manos de la chica lograron apagar su enojo.
Estudió para los exámenes y ayudó a Olympia a hacerlo. Era increible la cantidad de información que lograba tragar. Olympia tenía que tener una gran capacidad de memoria, recordar todos los monstruos, los temores y datos para usar su don lo requerían. Lo que más le costaba era matemáticas y bordaba la lengua, Olympia incluso los ayudó. Bakugo entrenaba y Olympia también, aun que Katsuki no la veía, muchas veces la chica se iba a un parque cercano a lo que el pensaba que era solo sacar de paseo a Hestia en su carrito. Pero la chica sin que nadie se diera cuanta observaba a los niños. Acrophobia, Aracnophopia, Andrphobia... era increible lo que podía encontrar en los parques. . . . .
Katsuki logró el tercer puesto, Olympia el quinto. En el examen practico la cosa se complicó. Tenían que luchar contra los héroes. En pareja, Izuku y Katsuki formaron equipo. Pero Aizawa dijo que Olympia iría sola. Sola contra el héroe numero uno. La albina estaba a flor de piel repasando en cabeza miles de estrategias.
Cesó su pensamiento al ver desmayado a Katsuki, esto enfurecería al rubio más tarde, más bien lo frustraría.
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Su prueba era la última y Katsuki para ese entonces estaba despierto. Olympia tragó saliva mirando al héroe. Tenían unos brazaletes que disminuían sus poderes, cosa que la relajaba. El pitido de inicio dio comienzo. All Migth comenzó a buscarla. Olympia suspiró agarrando el atrapasueños y su cuerpo poco apoco fue volviendose negro hasta que se comenzó a dividir en pequeñas arañas. Toru se tapó los ojos.
— ¡Odio las arañas!
Estas con sus ocho patatas y sus miles de ojos, ya que eran miles iban andando con mucha rapidez. Olympia cada miedo lo hacía más tretico y es que eso era parte de su Kosei. All Migth estaba frente a la puerta.
