Katsuki Bakugo tiene claro sus metas, se esfuerza y no se deja distraer con facilidad. ¿Pero y si esta distracción se llamara Olympia? ¿Que pasaría si se encuentra con una chica que hace que todo su mundo se vuelva loco?
Girar por aquel callejón no...
Olympia volvió a concursar. Su siguiente oponente era de la clase B. No se lo ponía nada fácil acercarse. Olympia pensó en otro plan. Quizás si utilizaba lo mismo que con Izuku y Monoma funcionaría. Los ojos de Olympia se volvieron de color blanco brillante. Esto desconcertó a su contrincante. El polvo que estaba por allí revoloteó un poco y el chico sintió una punzada en el pecho. Se paró en seco y empezó a temblar.
— ¿Que es esto?
— Si sales parará.
— Parece que Olympia espanta a sus adversarios solo con ordenes. —Mic empezó a reír. Pero el chico no sentía ni una pizca de ganas de reír.
— ¡Que asco! ¡Hay muchos bichos! — El niño comenzó a mover los pies como si evitara tocar algo.
— ¿Bichos? —El estadio no veía ningún bicho.
— Si no sales empezaran a trepar por tus piernas. — Con los ojos iluminados Olympia movió la muñeca e hizo un gesto hacia arriba. El chico dio un grito y comenzó a agitarse los pantalones.
— ¡Son muchas! ¡Quitamelos!
— ¡Vete y te los quito! —Olympia se sentó intentando evitar los comentarios de Mic.
— ¿Que está pasando allí abajo! ¿Que bichos? — Mic se levantaba de sus asiento intentando ver.
— ¡Los que no tengan fobia a los bichos no lo van ha ver! — Gritó Olympia enfadada. Katsuki no había conocido esa faceta de la albina.— Transformo las pesadillas. Cualquier fobia, hay algunas difíciles, otras que son débiles. ¿Que se supone que haga si su mayor miedo son los bichos? —Se quejó. El chico terminó cediendo ya que según el estaba enterrado en bichos. Olympia se acercó y le acarició el hombro.— Tranquilo, solo era un mal sueño ¿Si? — El joven asintió todavía temblando. Olympia retomó su viaje a las gradas cabizbaja.— Soy repugnante.
— ¿Que?
— A nadie le gusta ver a lo que más teme. — Contestó. — Utilizo el miedo en su contra..
— ¿Alguna vez ha habido alguien que no tuviera miedo? —Olympia negó.
— Todos tienen miedo. Solo que algunos no se pueden materializar, o son niminidades. Pero igualmente aterran. Por ejemplo... puede que tu mayor miedo sea suspender una materia... pero no puedo ponerte un boletín de notas y que empieces a correr fuera del ring. Se paran por un momentos, intentan asimilarlo y algunos huyen, pero otros lo intentan cambiar. Siguen teniendo miedo pero lo intentan. Yo tengo miedo a todo, pero al menos a monstruos, fantasmas y demás no. Me he prometido que con algunas cosas no jugaría. ¿Podrías comportarte mejor con el niño de pecas? ¿Sabes lo que le mostré?
— ¿El que? —Katsuki miró a Izuku a unas gradas más adelante.
— Su mayor miedo era no llegar a ser un héroe... y se empezó a repetir algunas palabras, inútil, Deku, un lo siento de su madre rendida... me dio mucha pena... No lo trates tan mal. —Katsuki se quedó mirando al suelo.— Puedes ser el mejor sin insultarlo tanto. —Katsuki asintió.
— El siguiente es Todoroki. ¿Cual es su mayor miedo?
— Un problema familiar. Y con eso no me meto. Tengo otro has en la manga. —La albina esbozó una pequeña sonrisa.— Espero que no se asustes mucho. Esto si lo verán todos. Puedo convertirme yo misma en la peor pesadilla de alguien. —movió los dedos e imitó a un fantasma.— Por ejemplo si le tienes miedo a yo que se... un... ¡Un dragón! puedo convertirme en uno, solo lo tengo que imaginar, me imaginaré el más grande, y demostraré que merezco estar en laU.A. Usaré un dragón contra Todoroki. El fuego derrite el hielo.
— Al final vas a ser una Nerd rarita... —Katsuki acarició el pelo de Olympia. No te preocupes por lo de usar los miedos. Imagina que son villanos, tu Kosei los utilizarás contra ellos. —Olympia asintió.
— Estoy bastante nerviosa, Todoroki es bastante fuerte. Bueno, ahora tu dalo todo. ¿Si? Te toca contra Kirishima.
Durante esa pelea la albina se sintió observada por otro albino, uno a mitades. La mirada gélida de este la atravesaba, y la hacía sentir incomoda. Olympia en su vida había llegado a usar su Kosei de esas manera. Recordaba ya un poco más reciente que su padre quería hacer algo de provecho con ella, pero le parecía abominable que su hija pudiera tener esa clase de singularidad. Katsuki derrotó a Kirishima, Olympia tragó saliva y se dirigió a la zona de lucha.
— ¡Start!
Todoroki atacó primero intentando congelarla, Olympia lo esquivó a tiempo.— ¿No vas a usar tu Kosei? No vas a poder ganar.
— Hay cosas con la que una persona no puede jugar y me niego a ser yo la que maneje tu miedo, tampoco me serviría de nada. Pero siempre hay un plan B. —Olympia miró a los ojos a Todoroki, los ojos de la abina se tornaron de un color carmín, de color sangre. Estiró un poco el cuello y su cuerpo comenzó a sacar unos extraños borbotones negros. La chica se sentó y agarró sus rodillas.— Pesadilla, despierta. —Con estas palabras los borbotones que inundaban la cancha sin aparente forman comenzaron a amontonarse, pegándose y enterrando el cuerpo de la joven. Todoroki atacó desconcertado, pero el hielo no hizo mucho efecto. Se rompió al tocar la masa, se derritió con el contacto de esta. Una cabeza comenzó a surgir, puntiaguda y prominente, el cuello alargado y al igual que la cabeza llena de riscos, las patas delanteras acompañados del cuerpo y las traseras por una cola. En cuestión de segundos acompañado del crecimiento de unas alas el cuerpo de el dragón se encendió, abrió las fauces, repletas de lo que parecía magma.
Todoroki estaba al borde del campo, Olympia redujo el tamaño de la bestia ya que saldría del campo. El chico atacó con fuerza, antes de que tapara por completo al dragón este lanzó una llamarada que lo derritió al instante, Todoroki también usaba el fuego pero fuego y fuego no hacían mucho, Olympia bajó la cabeza y con esta empezó a empujar al chico fuera del campo. El mitades desprendía hielo desde sus pies intentado ralentizar mientras apretaba con fuerza e intentaba congelar la cabeza de Olympia, pero los miles de salientes que lo pinchaban no ayudaban.
— ¡Todoroki está fuera, Olympia gana!
La chica se dejó caer y la masa volvió a su cuerpo. Empezó a toser y de su boca salía humo.— Me estoy ahogando... —Al terminar de toser se secó unas lagrimas que le habían salido.— El humo sabe fatal... —Se fue corriendo a beber agua, cosa que le alivió bastante. Al regresar miró a Katsuki y fue a darle una sonrisa, pero se dio cuenta de algo.— Los últimos somos Bakugo y yo...
↬↬↬↬↬۵ ↫↫↫↫↫
TÍTULO= Dragón
Gracias por leer el capítulo!!!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
