Bailando bajo la Lluvia

Capítulo 1

-Quiero vivir por mi,quiero vivir para mi,quiero hacer las cosas porque yo quiero,porque me apasionan,no porque sea lo correcto o lo que alguien más espera.En mis últimos momentos de vida quiero estar satisfecho conmigo mismo,quiero sentir que tuve una buena vida,que viví,amé y que disfruté hacerlo.-miro a la chica de ojos azules llenos de lágrimas.-Lo lamento Jenna,pero hasta aquí quedo lo de nosotros.Lo siento mucho Jenna.

-Tom...por favor.-su voz temblaba mucho y eso le partía el corazón a la castaña.-No te vayas,por favor.No me dejes de esta manera,te lo ruego....Yo te amo.-el chico francés tan solo dio media vuelta y se marchó sin decir otra palabra.

La ojiazul tan solo se desplomó en el suelo,estaba demasiado destrozada para poder tan siquiera estar de pie.No podía creer que Tomás Beaumont había terminado con su relación después de 8 años de noviazgo perfecto,Jenna lo había entregado todo pero si Tomás lo queria de esa manera,pues ella debía aceptarlo y seguir adelante con su vida.

7 años más tarde...

-Jen,tu sabes que todo cuadro que tú ilustras es una hermosa pieza de arte.-se pauso.-Pero en tu próxima pintura quiero que me hagas sentir frío.-le solicito Nicky Taylor.-Quiero sentir la noche helada en los huesos.Tus cuadros deben incitarme a entrar en casa para ponerme a resguardo frente a un fuego crepitante.-la ojiazul recordó lo que su jefe le pidió.

Caminó unos pasos atrás para observar su obra a distancia y reflexionó sobre la manera en la que había concebido.Tuvo la visión de un invierno en San Petersburgo y después le vino al pensamiento un bosque imaginario situado en las afueras de la ciudad.

El escenario cobró vida y movimiento en su mente como si viera pasar una película:árboles desnudos destellando de carámbanos,nieve recién caída amontonándose aquí y allá entre los árboles formando delicadas dunas blancas...

El agudo zumbido del timbre de la puerta la sacó su concentración.Se dirigió al intercomunicador.

-¿Hola?

-Soy Charlie.Ya sé que llegué antes
¿Puedo subir?.

-Sí,claro.-oprimió el botón que abría la puerta de la calle,y corrió al piso de abajo para dejarlo entrar.

Poco después,Charlie Gordon,
arropado con una chaquetón negro con capucha, caminó hacia ella,una sonrisa le cruzaba por el rostro sagaz e inteligente.

-Siento mucho interrumpir tu trabajo, pero estaba en la esquina.Me pareció absurdo ir a casa para volver más tarde.Me sentare en un rincón y miraré el canal de comedia mientras terminas.

-No es necesario.-replicó ella riendo.-De hecho ya acabé el último cuadro.

-¡Fantástico!¡Felicitaciones!.-al dirigirse al pequeño vestíbulo del departamento,la atrajo a ella a sus brazos y cerró la puerta con la bota.La abrazó fuerte y le rozó la mejilla con los labios,Jenna sintió una especie de corriente eléctrica entre ambos que no había experimentos en meses.La emoción la embargó.Al parecer,a él también.-Busquemos una cama.-Ella se hecho para atrás,miró sus diáfanos ojos chocolatosos,que en este momento estaban más expresivas que nunca.

-No seas tonto.-mientras hablaba,esbozó una leve y seductora sonrisa.

-¿Tonto? No hay nada tonto en querer irse a la cama.Más bien creo que es algo serio.

Lanzó al suelo su chaquetón de lana,le pasó un brazo por la cintura y la condujo al dormitorio.Se detuvo en mitad  del cuarto,la tomó de los hombros y la hizo que volviera el rostro hacia él.

-Eres el mejor,Charlie,el mejor.Especial...único,de hecho.-se inclinó hacia ella bajo la tenue luz del día que terminaba,y se preguntó si ella no estaría bromeando.Luego contempló los ojos color azul claro de su mirada intensa de ella,y dijo con suavidad.

-Hagamos de esto algo permanente.-el par de ojos luminosos que él tanto amaba se abrieron desmesuradamente.

-Charlie...No sé qué decir.

-Di que sí.

-Está bien.Sí.

-Hablo de matrimonio.-dijo él ligeramente nervioso.Concenyro toda su atención en ella,con una mirada escrutadora.

-Lo sé.-le dio una leve sonrisa.

-¿Lo harías? ¿Te casaría conmigo?.

-Sí,lo haré.-una tenue y cálida sonrisa cruzó el rostro anguloso de Charlie,se inclinó y le besó la frente,la nariz,los labios.

-Me siento endemoniadamente feliz,Jen,que vayas a ser mía,toda mía.¡Es fantástico!¿Tendremos uno o dos hijos,verdad?.-ella rió feliz por que evidentemente él deleitaba de gozo.-No cambiarás de opinión,¿verdad?.

-Tontito,desde luego que no.-toco con suavidad la mejilla de su novio y sonrió seductoramente.-Entonces,¿manos a la obra? De los bebés,digo.-en eso sonó el intercomunicador.Jenna corrió a responderlo.-¿Hola?

-Un paquete de FedEx para la señorita Ashby.

-Gracias.Entre y suba,por favor.Estoy en el piso doce.

Si les agrado este capítulo no se olviden de...

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Kathy🦒