25| Oscuridad

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Aerys acostado en la cama miraba hacia el techo cuando Daenerys su hermana entró a verlo.

-¿Ya vas a dormir?

El rubio miró a su hermana y asintio sin contestar. La madre de dragones sonrio y tomo una de las mantas que estaban dobladas en la mesa de madera, la extendió y se la puso tapandolo, Aerys fruncio el ceño ante la acción de su hermana pero relajó su rostro y sonrio.

-Esto solía hacer mama todas las noche.

Daenerys sonrio y asintio mirandolo.

-Mama odiaba regresar en la madrugada y vernos destapados- río la rubia- Decía que nos congelariamos el trasero y nos regañaba.

Ambos rubios comenzaron a reír, Dany sonrio y le dio un beso en la frente haciendo que Aerys sonriera.

-Te veo mañana.

La rubia se levantó de la cama y le sonrio antes de salir de la habitación, Daenerys le sonrio antes de cerrar la puerta.

-Buenas noches- susurro y cerró.

Aerys borró la sonrisa de su rostro y se sento en la cama, miro la puerta por donde su hermana había salido y le llegó la culpa, iba a irse y su hermana iba a estar preocupada. Ella debía enterarse sobre ellos pero de una forma que nadie más se enterara.

Miro una pequeña hoja de pergamino café y arrugado que estaba tirado en el piso, se levantó a tomarlo y lo desdoblo, miró la pluma que estaba en la mesa de café y escribió:

El hielo debe destruirse, fuego y sangre.

Doblo el papel en cuatro y lo dejo debajo de la cama, su hermana era lista y entendería las palabras, se levantó del piso y tomó su espada antes de salir.

                              ⚜⚜⚜

Aerys dejó caer la mochila que había conseguido en la habitación al piso, Gendry se sobresaltó ante el golpe y lo señalo con la espada.

-Solo soy yo.

-Solo soy yo- hizo Gendry una voz chillona imitando al rubio.

Aerys rodo los ojos y se sento en la roca frente al chico.

-¿Donde están las chicas?

Gendry señaló con la cabeza y el rubio a Arya y Myrcella quienes vestidas totalmente de negro hablaban en voz baja.

-¿Nadie te vio?-pregunto Gendry mirandolo.

El rubio nego y se sento a su lado.

-Debemos salir cuanto antes- hablo el rubio.

-Espero que esto funcione de lo contrario moriremos- hablo Myrcella llegando con los chicos.

Los cuatro comenzaron a alejarse de la casa casa stark, antes de alejarse por completo miraron la propiedad, Arya solto un suspuro y fue la primera en dejar de mirar para alejarse, luego comenzaron a caminar hacia la bahía de la ciudad.

El aire soplaba con frialdad y el sonido del reloj marcando las cuatro de la mañana sonó, bajaron la ciudad desértica y se internaron entre las calles oscuras y peligrosas.

Sus pasos resonaron mientras caminaban directo hacia la bahía, las banderas de cada casa de la ciudad ondeaban gracias al viento, más de una vez los cuatro miraron hacia su espalda comprobando no ser seguidos y llegaron hasta la bahía donde los barcos estaban atracados listos para zarpar.

GOT: La espada de CristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora