Quédate conmigo (Juliantina)

¿Eres feliz?

DÍAS DESPUÉS

-bienvenida a casa- comente mientras metía la maleta y al mismo tiempo intentaba ayudar a Val

-ya extrañaba estar aquí- suspire al poder dejarla sentada en el sofá de la sala

-si quieres descansar un poco en lo que preparo algo para comer- ella solo asintió con la cabeza, prendió la tele y yo prepare algo sencillo, estos últimos días habían sido tan pesados que realmente me sentía cansada.

Comimos y después Val se metió a bañar, tardo más de lo normal al tener que cuidar su mano enyesada, después hice lo mismo que ella, al salir me tope con la sorpresa de que se había intentado cambiar sola, en un mal movimiento se había lastimado la herida de su frente, intentaba limpiar las gotas que salían de sangre, pero ya era tarde, yo me había dado cuenta

-te dije que si necesitabas ayuda me esperarás- corrí al baño por el pequeño botiquín

-es que no me quiero sentir inútil- me acerque y me senté frente a ella

-no es que seas inútil, ahorita es mejor que te ayude, si no, pasan estos accidentes- saque un par de gasas y me acerque un poco más a ella -te va a doler- coloque algo de alcohol sobre la gasa y muy cuidadosamente comencé a limpiar

-supongo que es para no perder la costumbre- hizo un gesto de dolor

-¿a que te refieres?- pregunte

-parece ser una costumbre tener que curarnos las heridas- sonreí ligeramente ante eso 

-muy cierto- seguía limpiando -lo siento amor- ante eso me detuve de golpe, desde que la había vuelto a ver no la había llamado de esa manera

-te estás poniendo roja- sonrió -siempre me agrado que me llamaras así- admitió

-pero- me interrumpió el gesto de dolor que volvió a hacer -ya casi termino- Ella tomó aire y cerró los ojos

En realidad no se había hecho mucho daño, solo que con el esfuerzo provocó algo de sangrado, la observé por un momento y caí en cuenta de que tenia mucho tiempo sin tenerla realmente así de cerca, con todo el tiempo del mundo para contemplarla, en este tiempo no había cambiado mucho, un par pecas ligeramente se posicionaban en su nariz, acomode solo un poco su cabello.

-listo- comente tranquilamente sin moverme de mi lugar

-Gracias- me sonrió

-no entiendo como lo haces- comente

-¿que?- me miro sorprendida

-mirarme así-

-¿como?- aunque preguntaba ella sabía lo que hacía pues su sonrisa lo decía todo

-justo como lo estas haciendo ahora- ella sonrió aún más -creo que tú podrías tener mil accidentes y nunca dejarás de ser hermosa- quite un mechón d su rostro

-eso lo dices porque me quieres-

-no te quiero- dije rápidamente -te amo- le di un ligero beso, ella cerró los ojos y suspiro

-también te amo- ahora era ella la que me besaba

-han sido días realmente locos, necesitamos descansar- sonreímos ligeramente y comenzó a acomodarse, mientras yo regresaba al baño a terminar de alistarme para dormir, me lave los dientes, cepille mi cabello y al salir me encontré con Val dormida, no me sorprendía, en el hospital dormíamos muy poco con tantas enfermeras entrando y saliendo del cuarto.

Suspire y apague todo cuidadosamente, solo me alumbraba el brillo de  televisión, me acomode a su lado, en realidad yo no tenía sueño, así que tome un libro que tenía en mi buró, apague el televisor y prendí la lámpara, comencé a leer, después de algunas paginas mi celular comenzó a vibrar, lo tome rápidamente para no despertar a Val y revise la pantalla, me levante con cuidado y me salí al balcón que teníamos en la habitación.

-creo que aveces se te olvida la diferencia de horario- fue lo primero que comente

-¿por qué susurras?- ignoro lo que comente

-Val duerme y me salí al balcón-

-¿acaso no le dices que yo he hablado?- me quede en silencio por un momento y voltee a verla, parecía no haberse despertado con el movimiento

-claro que le dije, pero vamos llegando del hospital y evidentemente está cansada, no quiero despertarla-

-lo entiendo- dijo con ese tono tranquilo que tanto la caracteriza -yo solo hablo para saber cómo sigue-

-¿por qué tanto interés?- eso lo llevaba pensando desde hacía días pero no había tenido la oportunidad de decírselo

-ya te lo he dicho, te quiero y me preocupa que la persona que tú quieres se encuentre mal- creo que a consecuencia de todo lo que nos ha pasado, me cuesta trabajo creerle fácilmente -me da gusto que ya esté en casa- continuo hablando al yo no decir nada -no se porque presiento que no le hablas mucho de mi a ella- me sorprendió su comentario

-lo he hecho- dije rápidamente -pero tú eres una ex novia, es evidente que no es un tema que se toca en cualquier momento-

-tienes razón- la noche estaba muy fresca y algunas estrellas se dejaban ver en el cielo, si miraba a mi alrededor podía ver perfectamente hacia los demás edificios, algunos con luz otros ya sin ella, son detalles que siempre me hacen perderme -¿sigues ahí?- pregunto

-lo siento- comente mientras agitaba mi cabeza un poco -me distraje-

-¿viendo el cielo o el paisaje que tengas?-

-¿como sabes eso?-

-te conozco Jul, acá te podías perder por horas haciendo eso y no te aburrías- me volvió a sorprender -te tengo una pregunta-

-¿cual?- de ella me podía esperar lo que fuera

-¿que es lo que te enamoro de Val?-

-¿de verdad tú quieres saber eso?- pregunte sorprendida

-¡Jul!- exclamo -no respondas con otra pregunta- había olvidado cuando le molestaba eso -fui la persona que te dejó el camino libre, creí que había quedado claro que no soy una ex normal- me hizo sonreír ese comentario

-al principio me llamo la atención lo misteriosa que puede llegar a ser, creo que hasta el día de hoy son pocas personas las que la conocen como yo lo hago, su manera de poner atención, siempre que hablo ella coloca su brazo en la mesa y apoya la barbilla en su mano en señal de que me pone toda la atención del mundo, creo que piensa que no me doy cuenta pero se que en ocaciones me observa al dormir y acaricia sutilmente mi rostro- sonreí ante esto -creo que no podría excluir lo evidente, es demasiado guapa, tanto que cualquier persona la voltea a ver, al final fue un conjunto de todo lo que termino enamorándome de ella- suspire

-que lindo, de verdad la amas demasiado- comento -sabes, eso me hace sentirme más tranquila-

-¿en que aspecto?- pregunte

-que al menos lo que hicimos valió la pena, tú estás feliz y eso es lo importante-

-¿y tu? ¿Eres feliz?- un silencio se apoderó de la llamada

-claro- dijo rápidamente -siempre lo he sido- en ese momento vi que Val se movía entre las cobijas

-lo siento pero debo colgar, hablamos luego- sin decir más colgué y regrese sigilosamente al cuarto, cerré la puerta y me metí a las cobijas de manera cuidadosa abrazando por la espalda a Val sin saber que ella no dormía del todo...

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Hola!!

Como dicen por ahí "no hagas cosas buenas que parezcan malas" 😉
Siento mucho no haber actualizado pero estuve saliendo un poco de la rutina jeje espero comprendan 🙈

Los quiero mucho!! ❤️😘