Desperto temprano; los cabellos castaños enredados en una coleta y esparcidos por la almohada. Vio su celular y se dio cuenta que aún faltaba para que la alarma sonara; una sensación de felicidad le invadio el vientre.
Estaba nerviosa pero también emocionada. Hoy era el primer día de clases después de las vacaciones de verano. Un nuevo semestre empezaría, y en una nueva universidad.
Se levanto de las cómodas sabanas y empezó su rutina.
Cuando acabo de bañarse y vestirse, fue a la cocina y tomo una manzana que se encontraba en un gran plato con más de ellas. Había comprado un poco de comida ese sábado por la tarde._______ suspiro después de comer la fruta y con la mochila en su hombro, el celular y las llaves, salió de su departamento y bajo hasta su coche.
(...)
¿Por qué? Apaga la alarma de su celular y gruñe bajo.
Alonso siempre ha detestado despertarse temprano.A duras penas se levanta se levanta de la suave y cálida cama que le ruega volver a acostarse en ella y no salir a la tortuosa universidad.
Pero levantarse temprano no le servido de nada ya que cuando estaba listo y tal vez, solo tal vez quiera tirarse a la cama, ya iba tarde.
Genial, primer día después de vacaciones y llegaría tarde.
Agarro su mochila y todo lo esencial, para después salir casi corriendo de su casa y con prisa precavida, manejar hasta la institución.
(...)
Al llegar, muchas personas estaban esparcidas por todos los alrededores. Algunos platicando y otros simplemente en su celular. Eso hizo que ______ estuviera más nerviosa.
Bajo del auto y sacó de su mochila una hoja en la decía que debía ir dirección por su horario. Pero no sabe dónde se encuentra dirección, así que se arma de valor y busca a una persona (de las tantas que hay) que la ayude.
Ve a una chica sentada en una banca y decide preguntarle donde queda la dirección. Se ve amigable, piensa.
— Disculpa — la otra chica la volteo a ver —, ¿Sabes donde queda dirección? Soy nueva aquí.
La amigable chica le regala una sonrisa y se levanta de la banca.
—Si. Puedo acompañarte, si quieres.
______ sonríe.
— Claro. Y gracias.
Ambas empiezan a caminar hacia la gran puerta de la universidad.
— Oh que descortés soy — eso hace que ______ se detenga y la mire —. Me llamo Abigail, pero puedes decirme Abi.
— Bueno, un gusto Abi, soy ______.
— Luisa — repite con una sonrisa —. Pues bienvenida a–
No termino de hablar porque un chico le tapo los ojos. Al parecer sabía quien era o algo así, no se inmutó y solo sonrió.
— ¿Adivina quién soy? — hablo el chico desconocido.
— Bryan, ya se que eres tú.
El chico de cabello alborotado la suelta y Abi ríe.
— Mierda, siempre sabes y nunca logro asustarte — pero calla al ver a ______. — Ella es...
— Mira Bry, ella es ______; es nueva y la iba a llevar a la dirección.
— Un gusto, ______.
Extiende la mano y el chico, Bryan, la toma.
— Igual, pero yo me llamo Bryan.
Se confunde y al parecer Abigail lo nota.
— Perdonalo a veces es medio lento, pero así lo amo y queremos todos.
— Oh — ríe —. Okey, supongo.
— Bueno, adiós Bry. Nos vemos después.
— Adiós amor. Adiós chica.
Agita la mano y se acerca a dejar un beso en la boca de Abi. Para finalmente irse.
(...)
— Aqui es la dirección — Señala una puerta marrón.
—Gracias por traerme, Abi.
—No hay problema, te espero aquí — y se sento en una banca que estaba algo cerca de la puerta.
______ asiente y camina hasta aquella puerta. La abre y entra, dirije la mirada hacia una señora detrás de un gran escritorio y camina a ella.
— Disculpe, me podria dar mi horario de clases. Por favor.
— Claro, ¿su nombre?
— ______ Anderson.
Ve como la señora teclea algo en su computadora y después de unos minutos escucha el familiar sonido de la impresora. La secretaría le extiende una hoja.
— Gracias — murmura, agarrando la hoja.
— De nada.
Sale de dirección y ve a Abi aún sentada en la banca. Se encamina a ella. Al llegar, Abigail parte rumbo y ella la sigue.
— ¿Y para que estudias? — pregunta Abi, caminando a su lado.
— Licenciatura.
— ¡Genial! Yo enfermería. Y queda aún lado de licenciatura.
— Que bien, así me podrias llevar a donde esta — dice riendo.
— Sí, vamos.
Cuando iban a dar vuelta en un pasillo, alguien que iba corriendo, choca con ______ y ambos terminan en el suelo.
¿Acaso todo el mundo me quiere tirar? Piensa _______.
— Perdón — susurran a su lado.
Ella lo ve y, Dios, el mundo es muy pequeño. El castaño de la cafetería. Ese mismo chico se encuentra frente a ella.
— No te preocupes — logra decir.
Abi ayuda a _______ a ponerse de pie. Ve como el castaño también lo hace.
— No, es mi culpa. Lo siento mucho.
— Ya. No hay problema.
Alonso asiente con la cabeza y se despide con una sonrisa tímida. ______ se queda viendo por varios segundos por donde se acaba de ir.
— Hey, tierra llamando a ______, tierra llamando a ______, repito.
— ¿Ah?
— Que vamos a clases. Se hará tarde, mujer.
_______, aún con la cabeza por las nubes, asiente y camina junto a su nueva amiga.
Una amiga y una extraña coincidencia.
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Hilo Rojo; Alonso Villalpando
FanfictionHilo rojo. | Terminada. | "Cuenta la leyenda que todos nacemos con un hilo rojo invisible que esta conectado con la persona que amaremos por toda la eternidad. Ese hilo se puede estirar o enredar, pero jamás romperse" Ella: una chica que ha pasado p...