Capitulo 16 Celos

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- Stella... Regresa a la cama

La joven había salido al balcón de aquel hotel lujoso dónde se encontraban, se sentó a contemplar el inicio del nuevo día, sin importarle las súplicas del Vampiro.

- Los vampiros son tan flojos.

Rayto a regañadientes se levantó de la cama, para ir a dónde Stella...

- No somos flojos, pero el sol no es muy agradable.
- Como si fueras a quemarte como en las películas.
- Absurdo.
- Hablando enserio, quizas está sea nuestra última escapada del mundo, juntos.
- Claro ... que no , cuando un matrimonio ha sido empedimento para los amantes.
- No deberíamos madurar y estar estables.
- Eso déjalo para los simples mortales de allá abajo - Rayto miro la increíble vista que tenía de la ciudad - Nosotros somos criaturas de la noche, solo el placer debe importar.
- Nunca cambiarás Rayto.....
- No y ahora pediré el desayuno....

Rayto se dirigió de nuevo a la habitación, dejando ala joven pensando en aquel balcón donde el viento jugaba con su cabello.

En la mansión Sakamaki, una Yui comenzaba a despertar y sintió que no estaba sola en la cama, ya que pudo sentir a alguien que la abrazaba,  ella sonrió al pensar que se trataba de Kanato, cuando se giró para despertarlo su sorpresa fue grande al ver Ayato con ella.

Fue tan rápido, que no pudo ni siquiera gritar , cuando Kanato abrió la puerta del cuarto de Yui, su rostro reflejaba cólera, al ver a su humana en brazos de su hermano.

La chica grito, poco a poco Ayato volvía en si.

- Plana, que molesta eres ...no me dejas dormir.

Kanato no podía articular palabras, era tanto su enojo y decepción. Cuando Ayato abrió bien los ojos y vio el semblante colérico de su hermano le resto importancia.

- Que escándalo, enserio .... Ya regreso Reiji y Shu, por qué me interesa saber quién va estar a cargo de la cocina, tengo hambre.... - Ayato bosteso, se levantó de la cama - No se que les pasa a los dos, Kanato ella es una humana y es la presa, todos tenemos derecho sobre ella.... Así que quítate....

El pelirojo salió de la habitación dejando un ambiente tenso a su paso.

- Kanato no es lo que parece.
- Cállate... escoria, así es como te aprovechas de mi, finges conmigo y así me pagas , Yui me decepcionas.
- No es lo que parece....

Kanato se acercó a la chica y la jalo del brazo con violencia.

- Tú me  ... me obligas a castigarte.
- Déjame !!!! Suéltame..... - Yui chillo de temor.

Fue entonces que el Pelilila clavo sus colmillos en el brazo de la chica sin ninguna delicadeza, succionando su sangre con demencia, pronto Yui comenzó a sentir como le faltaba el aire, la debilidad se apoderaba de su cuerpo, hacía tanto tiempo que nadie bebia de su sangre de esa forma, al grado de casi dejarla inconsciente.

- Suéltame..... Suéltame ..Kanato - la voz de Yui se iba a apagando.

Kanato soltó a la chica débil, la dejo en su habitación, en su brazo, donde  clavo sus colmillos, había dejado una horrible marca.

- Ahora cada que veas esa marca en tu piel, recordarás a quien le perteneces !!!!!! - le gritó colérico.

Kanato se marchó, dejando a una Yui destrozada y llorando.

Cuando Kanato entro en su habitación, estampó su puño en la pared, una y otra y otra vez, no obstante aún cuando el dolor era punzante en su mano izquierda, lo hizo con la otra mano también, comenzó a llorar con coraje.

Solsticio de inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora