Capitulo 39

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..... Subaru había terminado su whisky y estaba apunto de irse, cuando la morena llegó.

- Tan pronto te vas...

- Yo... bueno ..debo volver a casa...

- Seguro...tienes una cara, que me dice que lo que menos quieres es volver a casa.

- Tienes razón...

- ¿Tienes algún problema?

Subaru se quedó mirándola fijamente, sus problemas siempre habían sido suyos, nunca los había compartido con nadie, al menos nunca alguien se había  acercado de esa manera que le pudiera importar lo que él pudiera sentir.

Suspiro y como si esa mujer delante de él fuera su amiga de años, le contó lo que pasaba en casa, ella lo escuchó atenta, sin interrumpirlo, cuando terminó él de explicarse, la chica habló.

- Vaya...así que tu padre te comprometió con la novia de tu hermano mayor.

- Si....

- ¿ Tú estás enamorado de esa chica?

Subaru dudo en contestar.....

- Supongo...que si...la verdad ya no se, ahora que ella no está, ya no tengo muy enclaro mis sentimientos.

- Entonces no  estabas enamorado como tal de ella, quizás la quieres mucho, pero no de esa forma o tal vez te has dado por vencido ya que ella escogió a tu hermano.

- Pero duele...

- Va doler, todo lo que lleva al amor, duele de alguna manera.

- No dejo de pensar en que si ella me hubiera escogido a mi...todo sería fácil.

- Pero eso no pasó, así que no pienses en ello, piensa que hay algo mejor para ti, algo que en verdad necesitas...

- Necesito algo como un mar en calma...

- Vez ... un mar en calma sería mucho mejor...

- Por otro lado, el hecho que nuestro padre venga a casa, y cuando vea que ellos no están, eso nos traerá problemas a todos.

- Si los encontrarás , te casarias con ella sabiendo que ella ama tu hermano y que quizás tampoco tu sientes algo definido  por ella....

El cuestionamiento de Tasha, hizo énfasis en el albino.

- No ... lo sé...

- Eres muy terco... quizás sea bueno que ellos no vuelvan.

- Quizás....

- Sabes tengo que irme..

- Oye ... me gustaría... seguir viéndote, como puedo localizarte..

- Haaa .... eso...mejor dejémoslo al destino, de alguna u otra forma, te encuentro en mi camino.

La chica se marchó, dejando a Subaru un poco más tranquilo, su mirada rojiza  la siguió hasta que ella se desvaneció entre la gente del lugar, algo en él  le decía que esa mujer, era como un mar en calma.... inspiraba tranquilidad en  el vampiro y él sonrió para sus adentros, esperando entonces a que el destino los volviera a juntar de nuevo.

.... Ayato ya estaba por marcharse, cuando Aisha le grito.

-¿Ya te vas?....  no veo que lo hagas.

- Estaba apunto de hacerlo...tonta.

- Ya no seas tan dramático..... solo por hoy seré buena...pero te advierto no intentes robar mi sangre...

- Me vas a invitar a pasar... - dijo Ayato con ironía

-  Ya que ... no vez que va a llover... ya idiota, sígueme.

Ayato miro al cielo y efectivamente, se estaba comenzando a  nublar. Sin más el vampiro siguió a Aisha.

Una vez adentro,Ayato miraba el lugar donde vivía la chica, era amplio, aún que muy humano para su gusto, se sentó en uno de los sofás y espero a que su anfitriona  le acompañara.

- Así que vives aquí mmmm es muy simple...

- Pues a mi gusta ....

- ¿Y por qué me dejaste pasar? ....

- Por lástima... por que más... tendría que tener algún motivo...

Ambos se quedaron viendo el uno al otro, retandose con la mirada.

Aisha resoplo, mientras se dirigía al refrigerador, sacó dos cervezas y le lanzó una a Ayato, quien la atrapó al instante.

El pelirojo la abrió y comenzó a beber al igual de la chica.  Aisha se acercó a donde estaba él y se sentó a su lado.

Ayato la miraba, esa chica tan despreocupada y arrogante, él aún recordaba el sabor de su sangre y era embriagante al igual que sus labios. Aisha lo miro de reojo y comenzó a hablar.

- No has sabido nada de tu hermano.

- No ... ni idea, ese sujeto vendrá pronto.

- ¿Ese sujeto...quien ?

- Nuestro padre...

- Ya veo... yo también estoy preocupada, pero por Stella, no he sabido nada de ella, desde que esta con Luka.

- Es normal no...

- Tengo un mal presentimiento...

La mirada de la chica se puso seria, mientras miraba al piso, sintió la presencia de Ayato cerca de ella, cuando levanto sus ojos, se topó con las orbes esmeraldas de él.

Ayato sonrió de lado, mientras con su mano derecha acarició el rostro de ella. El no dijo nada, cuando de pronto sus labios estaban en los de Aisha, ella cerró los ojos para corresponderle.

Los días habían pasado, los sentimientos de Subaru cada vez estaban más en calma, de cuando en vez se encontraba mirando a la nada y en eso pensamientos Tasha se cruzaba, pero volvía a la preocupación cuando Yui volvía a su mente y estaba aparecía con Kanato.

Ayato pronto convirtió sus andanzas en buscar a Aisha, pelear con ella y terminar con la Yokai  entre sus brazos, sobre el sofá de ella, en aquel departamento tan humano. Mientras de cuando en vez sus colmillos se clavan en la piel de ella, al igual que Aisha deja las marcas de sus colmillos en la piel del vampiro.

Raito de cuando en vez se acercaba a la casa donde vivía Stella, esperando una oportunidad  para poder saber de ella, había frustración, sabía que algo no estaba bien.

Lejos muy lejos de los Sakamakis, Kanato sonríe al tener en sus brazos a la rubia mientras duerme, no quiere precuparce por el tiempo  o por las consecuencias por primera vez en la vida se siente feliz.

Solsticio de inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora