Ashlynn (Natasha Romanoff x Chica)

Coma

Recordatorio:

Cuando el texto está en cursiva significa que son sueños. Salvo el caso de que lo que esté en cursiva sean diálogos, en ese caso son conversaciones por el pinganillo.

Besos,

ALEX

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"A nuestro hombre no le importa que le vean ni teme causar destrozos en su huida"

La brisa tibia era mi única compañera desde había ya rato.

Justo cuando el dolor desapareció, el paisaje desolado de Lagos había pasado a ser una tarde de otoño en Nueva York. Fresca y silenciosa, como nunca antes había estado en la ciudad.

"Es un revienta puertas"

No se podía escuchar el ruido de los coches en la calle, ni las voces de los vecinos que vivían sus vidas en los pisos circundantes al bloque de St. George. Para ser sincera, parecía que todo ser vivo en Staten Island había desaparecido.

Había tanto silencio.

"¿Me buscabas?"

Su voz sonaba como un eco en mi memoria. Grabado a fuego lento mientras los fogonazos de imágenes ya pasadas recorrían mi mente, enredándose con los pensamientos fugaces y pasando a un segundo plano.

No estaba segura de cuanto tiempo llevaba tumbada en el suelo de la azotea, aquí todo era muy raro.

Hace lo que parecían segundos estaba ahogándome con mi propia sangre y ahora miraba somnolienta la puesta de sol en el cielo neoyorquino. No entendía nada, pero tampoco es que me esmerase en entender algo de lo que pasaba. Una extraña calma se había apoderado de mi cuerpo, haciendo pesados mis miembros, tomando el control de mis propios párpados, que se cerraban cada poco tiempo, casi como si el sueño me reclamase.

"Ahora es un juego, solo uno lleva la carga"

Cuando volvía a despertar, esperaba ver a Nat, pero lo único que me recibía era de nuevo el cielo entretejido de nubes, tintado de aquellos especiales violetas y malvas que tanto conocía.

¿Estará bien? Juraría que la explosión no la alcanzó pero pude hacerle daño tirándola de aquella forma contra el stand. ¿Estará enfadada? Siendo ella supongo que sí, algo me decía que lo estaba, pero mis pensamientos iban y venía a una velocidad vertiginosa.

"Kat, ¿Dónde estás?"

¿Ella me buscaba?¿Donde estaba? No la veía. Creo que la forma correcta de catalogar mi mente en este momento era Batido. Dando vueltas y más vueltas, desde lo más insignificante a lo más importante. . . ¿O era al revés?

Recordaba el complejo, estos últimos meses, Nain en casa, . . . e igual que venían las imágenes se iban. No sabía cuantas veces había recitado la receta secreta de la tarta de Nain, ni ordenado por orden de preferencia los Mark de Tony, incluso (lo negaré rotundamente si alguna vez alguien me lo pregunta) tenía un top de momentos fondue con Alya.

"Dios mío, Kate"

Fondue. ¿Eso no era queso caliente?¿Cuándo he comido queso caliente con Natasha? Tengo hambre.

Me llevé la mano de forma instintiva al abdomen, queriendo frotar la zona donde sentía un creciente vacío.

De las que lograba recordar, esta era con diferencia la herida que había desaparecido más rápido.