Capítulo 28 - Respuesta por respuesta

226 16 10
                                    

Ok, antes de que me maten

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Ok, antes de que me maten... lean el capítulo, la nota final y ya pueden desquitarse.
Disfruten.


—No quiero molestar, solo venía por unos minutos— digo apuntando con la mirada a las galletas que Noah aún mantenía en sus manos.

Para antes de terminar lo que tenía que decir, ya tenía la mano sobre la perilla de la puerta.

—Aguarda— dice Noah, acto seguido se abalanza hasta donde estoy. Cerca. Muy cerca de mi.

—¿si?— lo alejo poniendo mis manos sobre su pecho.

Mira en direccion a mis manos y pone una mirada algo confusa para mi.

-¿Puedes quedarte?— pregunta lo mas delicado posible.

Su hermano, nos vigila en silencio desde el otro lado de la habitación.

—Noah— lo miro fijamente a los ojos, pero no logro resistir la manera en cómo me mira y desvío la mirada —No creo que sea buena idea.

—Puedes...— miro el hermano, hermanastro de Noah, o debería llamarlo por su nombre... ¿cuál era?

Noah ve en dirección a donde yo miro, baja su cabeza a modo en que su mentón quedará en su pecho, y resopla.

—Vamos abajo— asiento y lo sigo.

Mientras bajamos las escaleras se detiene un momento y voltea a verme.

—Te dejaré ir sin protestar, si me dejas acompañarte hasta tu casa.

—N...

—Eso es un si, ¿no? Vamos— me da la espalda nuevamente y continua bajando.

Salimos de su casa, camino a una distancia prudente de el y voy arrastrando los pies.

Siento su mirada cada tanto tiempo, pero trato de ignorarlo.

—¿Por qué siento que soy el único que habla?

—¿Cómo es que actúas como si no hubiera pasado nada?— ¿eso fue muy directo? Lo arruiné.

—¿Perdón?

—Claro que si— camino más rápido para dejarlo atrás.

—Espera— no sé en que momento corrió a mi lado, pero logró alcanzarme.

—Es mejor que lo dejes aquí— me detengo y miro el suelo —solo déjame... por favor.

Debería detenerme aunque sea un momento a pensar, para no hacer este tipo de cosas.

—Dylan, escucha— suspira —Dios, eres tan testarudo.

—¿Testarudo? ¿En serio?

—Creí que querrías olvidarlo, por eso lo hago. Dylan, no quiero esto.

A V A L A N C H E [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora