Entre libros y sabanas - KEVEDD

Capítulo 2

ADVERTENCIA
El siguiente capítulo puede contener escenas violentas y de familias disfuncionales.

A su mente siempre venía el mismo recuerdo cuando se sentía solitario. Su amor de aquella época y como el padre del mismo le golpeaba hasta romperle la nariz, todo por un beso que no sabían cómo se había dado entre ambos.

-¡Deténgase! -gritaba entre lágrimas. -¡Lo matará! -pero el chico seguía entre los brazos del padre, siendo golpeado con brutalidad y furia que desprendían aquellos ojos negruscos.
-¡Malditos sean! ¡Maldito el momento en que han ensuciado la dignidad de esta casa!
-¡Por favor, piedad, se lo suplico... -gimoteaba de impotencia.
-a ti no te podré golpear bastardo, pero haré que sufras viendo lo que les pasan a aquellos que actúan con aberración de esa calaña!

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Miro su bebida y bebió de un solo sorbo, era de esas fuertes que últimamente le ayudaban con aquellas pesadillas que le atormentaban algunas noches. Había bebido desde los 17, luego de lo que le sucedío a aquel amor, no era para menos que no quisiese volver a enredar con nadie más.

Sin embargo esa noche había algo en aquel chico pelirrojo que había captado su atención. No sabía si era su forma cortes y graciosa de hablar o su manera sutil de coquetear. Tampoco supo porqué lo llevó a una zona un poco más apartada en la disco, oculta entre una pilastra que escondía el cuarto de limpieza, donde le beso como hacia mucho no besaba. ¿Era el alcohol? Era muy probable, pero ya estaban ahí, podía divertirse un poco más.

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-¡El no ha echo nada! ¡Lo he obligado! -grito otra vez para aquel padre.
-¿Entonces este maricon no te defenderá si te golpeó a ti? ¿Verdad? -Sus piernas temblaron, por su contextura tan delgada, empezaba a dudar de salir con vida.
-¡No! -defendió el hijo. A él no le tocas un solo cabello, quieres desahogarte hazlo conmigo. Marion, vete... En serio, vete que yo resolveré esto.

Su padre volvió a darle un puñetazo, Marion estaba en shock. De ahí recuerda la ambulancia y la policía. A la madre del chico y como le había abrazado por no llegar antes. Aunque ella lo sabia, nunca guardo odio en su corazón, a pesar de ser una mujer que era activa en su vida religiosa y de fe. Conocía el carácter de su marido, mas no esperaba que ese día, llegase antes de lo debido.

-Esto no ha sido tu culpa -dijo abrazando a Eddward entre lágrimas. Era el alma más bella que el había conocido después de sus padres -Mi niño, cuanto lo siento...

Y ambos lloraron en aquella pequeña capilla que estaba en el hospital, rogando recibir buenas noticias.

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HELLO! Soi io! Bueno, quien será este chico sin nombre? Descubranlo en otro cap. No olviden dejar sus comentarios hermosos UwU) los jamo, bai