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Alison se la paso molestando, reía de sus ocurrencias me era difícil dejar de verla.

Bueno hasta que escuche que tocaron la puerta de mi habitación.

Me levante y abrí Martha venía con un gran charola, mi estómago hizo de nuevo ese ruido, Alison volvió a reír pero ahora levemente, Martha solo sonrió.

—Me traes un vaso de jugo.

Alison se dirige a Martha, la veo rodar los ojos pero asiente. Sale de nuevo.

—Me imaginaba a tu servidumbre amable.

—Lo es...

Me miro con burla — Mendes por supuesto que no, dejarme adivinar ¿Se mete contigo?

Niego repetidas veces— No, no claro que no.

—Pero ella lo quisiera ¿no?— me encojo de hombros sin interés.
Y es que en realidad no me interesa.

—No me importa, tal parece que a ti si.

—Nah, ella no me importa pero pues... tu con todas.

—Quisieras ser una de esas chicas no?— en cuanto escucho eso se puso seria.

—De verdad crees eso?— asentí.— y que si es así? — me levanté rápido de la cama, ella  se mordió el labio como retandome.

—No serías capaz— me acerco a ella.

—Tienes razón, no lo haría — me empuja y solo doy un paso pequeño.

De nuevo la puerta, esta estaba abierta, Martha veía nuestra posición, estaba sería.

Me sorprendí al ver  a Alison de nuevo tan cerca de mi. Viendo a Martha con superioridad.

—Algo más? — Martha pregunta "amable"

—No, puedes retirarte y darnos privacidad. — hablo Alison por mi.

—Estaré abajo por si me necesitan.

Asentimos, ella se retiro.

—Mi comida esta fría — hizo un intento de puchero.

—Quieres que bajemos?

—La puedo comer así — comenzamos a comer, en silencio y la verdad era que  lo prefería así.

No podía evitarlo no quitaba mi vista de ella, Alison me miro raro.

—Que te traes?— ella pregunta.

—Nada, no hay nada.

—Si gustas puedes tomarme una foto.

—Para que querría yo una foto tuya?

—No se, así dura más, y cuando no este yo, la puedes ver.

—No te veía...

—Haré de cuenta que te creo.

—No eres tan importante, no para tener un retrato tuyo — soltó una carcajada.

Sin que lo esperará, ella se subió a mi regazo, su rostro demasiado cerca del mío.

—No te enseñaron que mentir es malo?

—No, yo no miento.

—Y sigues mintiendo Mendes — sus ojos viajaban a mis labios, inevitablemente Lamí mi labio inferior.

Se acerco lentamente, me sentí nuevamente nervioso, sigo sin saber por que.

Sus labios rozaron los mios, yo me encargue de unirlos completamente, sus abría en mis hombros, jugando con los cabellos de mi nuca, mis manos en su cintura, trazando lineas.

Por primera vez, no es un beso como los que nos hemos dado, en este no intenta darle celos a alguien, no nos utilizamos.

Se separa, su respiración es irregular, sus labios están rojos e hinchados, imagino que los mios están igual.

Ve su celular, rueda sus ojos.—Me llevas a casa? Es decir no tienes ningún problema con hacerlo?

—No, no es problema  vamos te llevó.

—Excelente gracias.—se baja de mi, me levanto dejando mi habitación desordenada.

Salimos, enciendo el auto para llevarla, enciende el estéreo no entendía la letra era musica en español.

Era movida, tenía buen ritmo algún día le preguntare.

Sentía su mirada, ella me cantaba cuando la volteaba a ver.

Reí cuando se trabó en la letra.

—No te rías

—No me estoy riendo, bueno si pero no de ti.

—Haber si tu puedes hacerlo mejor que yo.

—Yo no se, de ese idioma.

—Y eso es peor, mientras te ríes de mi, tu no sabes.

—Algún día lo sabré.

—Mientras tanto no.

Llegamos a su destino, se queda unos segundos hasta que reacciona.

—Bien... Hasta luego Mendes.

Se despide y desaparece de mis vista, me pregunto por que no simplemente deje que se viniera como pudiera? Por que accedo a ella así de fácil?.

Cosas que nunca sabré, pero tampoco es como que me importe.

Llego a casa y veo a mi hermana jugar con Martha, esta última me sonríe dejando a un lado a mi hermana.

—Joven quieres que te prepare algo?

—¡Yo si!— mi hermana se adelanta a hablar.

—Solo haz lo de mi hermana estoy lleno.

La veo asentir e irse a la cocina junto Aaliyah. Las dejo solas pues estoy agotado.

Escucho risas don femeninas y deduzco que don Aaliyah y Martha eran las únicas que estaban.

Le volví a restar importancia, no quería saber nada relacionado a  Martha.

Me quedo viendo mis redes sociales, tenía tiempo sin estar en ellas.

Aparte no tenia otra cosa que hacer, mi celular avisa que tiene uno por ciento corro al cargador, muy tarde se apago.

Maldigo, en mi mente no es bueno que mi hermana pequeña me escuche diciendo tonterías.

Sin mas que hacer conecto los videojuegos.

Escucho a mis padres abajo, lo que significa que la ayudante se ah ido. Quitos los articulares y bajo sin hacer ruido.

En efecto mis padres están en la sala de estar, viendo un programa de televisión junto con Aaliyah.

Me uní a ellos, no tenía cosas por hacer, así que que mas daba?

Se dan las once de la noche y es cuando mamá, dice que es hora de dormir, por que tan temprano?  A esta hora nadie duerme, bueno no lo jóvenes.

Resignado subo, cargando a Aaliyah ya que ella se quedo dormida a eso de las nueve y pasadas.

La dejo en su habitación, me debato en si quedarme o irme de ahí.

Decido dormir hoy con mi hermanas compensar que no estuve en la tarde con ella.

Me acomodo, y ella me abraza como si fuese su oso de peluche.

Me gustaba esa sensación de estar con ella.

Quede completamente dormido.

For You S.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora