Hoy; me despierto de temprano. Él cántico sonoro de las aves en los árboles a mi alrededor, me despierta muy gratamente. Mi noche ha sido muy larga, no concibí el sueño sino de madrugada. Eso provocó que adquiriera un fuerte dolor de cabeza.
Me coloco mi bata y me dirijo a la ducha, paso 20 minutos bajo la regadera, luchando porque en mi mente aparezcan las palabras indicadas para escribir la nota de hoy en el periódico; la cuál se tratará sobre la "Sobrepoblación del país".
Me preparo un café y abro el único portal que me comunica hacia el mundo y mi mundo; La computadora. Reviso mis redes sociales unos minitos antes de entrar de lleno a mi trabajo. Facebook me muestra unos cuantos amigos, muchos memes y unas cuantas noticias. Instagram nada nuevo. Fotos, seguidores. Personas queriendo saber de mi. Pero la cuenta que más le presto atención es a Twitter; reviso la cuenta de él un par de veces y no hay nada nuevo, única el que twiteeo hace dos días. Muy pocas veces se ausenta demasiado y lo extraño. Siempre está al pendiente de su trabajo, el senado, el Capitolio, el presidente, cosas relacionadas con la política, cosas que le parecen maravillosas. Le dejo un tweet deseándole los "Buenos días". ¡Estúpida! ¿Acaso crees que está al pendiente de ti también?
Con melancolía cierro las cuentas, y me pongo de lleno a trabajar. Abro mi hoja de trabajo e intento pensar sobre el tema que escribiré. La sobrepoblación.
A penas toco el teclado y ya llaman a mi puerta. ¿Quién podría importarme tan temprano? ¿Acaso para eso me mudé aquí?
Me pongo de pie, y enseguida camino hacia la puerta. Mi sorpresa. Mi padre.
-¿Papá?_Actúo con sorpresa.
-Necesito hablar contigo. _Anuncia con autoridad.
-¿Cómo llegaste hasta aquí?
-Eso es lo de menos. _Evade.
El ingresa a la casa. Yo, aún sigo soprendida de como ha llegado hasta aquí. No he dicho mi dirección a nadio, a nadie. Excepto a los de mi trabajo. Interesante como mi padre llegó hasta mi trabajo.
-¿Pasa algo?_Pregunto un tanto molesta e incómoda. Puesto que la relación con mi Padre nunca ha sido buena.
-Eso mismo te pregunto yo a ti. _Me observa fijamente.
-¿Disculpa?_Me cruzo de brazos y frunzo el entrecejo.
-Sobre la vida que llevas. Tienes 25 años y vives así, en solitario.
-Y hay algún problema con eso? _Sigo con molestia.
-Mira a donde haz llegado.
-Vienes a criticar mi forma de vida?
-Deja de esquivarme con más preguntas.
-Si haz venido solo a eso... _-Le señalo la puerta. _-Puedes irte
-Solo vengo a pedirte.. _ baja la guardia. _-Que regreses a casa.
-Estás loco.
-Tú madre está preocupada. Haz Estado bebiendo y lo único que te importa es ese chico de la televisión que para nada es real.
-Vivo sola y eso me da derecho de hacer lo que se le pegue la gana. Incluso eso.
-Regresa, ahí tienes una familia.
-¿Familia? Todo el día discusiones. Mi hermano me golpeaba cada que podía. Era todo, menos una familia. _Alego.
-Ya no es igual.
-¡Te puedo asegurar que es exactamente igual!
-No puedes seguir viviendo aquí. Así.
-Vivo mucho mejor que con ustedes. _Le anuncio. _-Ahora si no te importa. Tengo trabajo que hacer.
Suspira cabizbajo y solo me observa con tristeza y se marcha.
Mi rostro sin expresión, contiene tristeza ¿A dónde me conduce todo esto? ¿Estaré actuando mal? Pues yo solo escucho a mi corazón.
Intento despejar mi mente para mantener la concentración en el tema. Ya no quiero atrasarme más.
Pero.. ¿Por qué todos me cuestionan sobre la manera en la que amo? ¿Es errónea? ¡Solo soy una mujer enamorada de un chico! No es nada inusual. Todos amamos alguna vez. ¿Será tan dificil de aceptar? Es cierto. Mi alma no es igual a la suya. Su alma es fantástica, brilla con luz propia, actúa para si mismo. Mientras que yo, sólo soy una bombilla de luciérnaga que vuelva en el fondo y se apaga cada de vez un poco más.
¿No es normal? ¿Amar de una manera extraordinaria? ¿Habrá algo malo en decir que es un actor? No pido que lo acepten, solamente que me dejen amarlo; aún sin esperarlo a cambio aunque mi alma espectadora de la suya, lo aclame.
Como cada que pienso en el sombrío amor, me llena de nostalgia y temor, me lanzo a la decepción, y la ira sobre mí misma de no poder hacer nada. No está en mis manos hacer que esté con él. Lo siento en mi pecho, vive en mi, no puedo negarme a sentie esto tan maravilloso, lo vivo en mi carne, lo siento en mi ser. Un amor genuino, apasionado, sincero que sueña en alcanzarlo tarde o temprano hacia el otro lado del mar. Pero mi corazón seguirá aguardando muchas primaveras por él, incontables inviernos, inciertos otoños. La tristeza me conduce de nuevo hasta mi piano, y me desahogo en sus piezas sonantes y melodiosas. ¡Mi amado! ¡Mi único amado! ¿Será prohibido el amarte insaciablemente? ¿A caso mi corazón no es lo suficiente privilegiado para sentir algo por tú majestuosa existencia? Pero nada podrá impedir si así lo fuera. Nada ni nadie. Eres mi melodía, la que suena ahora, campanillas y teclas de piano llorando por tu ausencia insípida. No quiero a nadie, nadie me entiende. Nunca podrán hacerlo. Nadie conoce el maravilloso mundo de amar a alguien como él. Único en su existencia, adorable en su personalidad. ¡Santo cielo! ¡Escucha mis oraciones! ¡Me ahogo en despecho y desesperación. Sólo él, y que nadie más sepa. ¡Qué nadie sepa! El mundo sólo quiere alejarme de mi amor hacia él. ¡Qué nadie sepa a quien se debe la primavera en mi corazón y el invierno en mis ojos! ¡Qué nadie sepa quien es él; quien inspira tan hermosas melodías!
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6/21.Espero les. Guste.
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Nocturne. (Chris Evans) |Editando|
PovídkyMientras escucho éstas melodías, a mi mente vieje la imagen de aquel hombre cuyo corazón mío pertenece. Siempre tan presente; siempre tan suya. Las claras notas fijan sus ojos en mi mente, ojos azules, azules como el cielo, clarecientes como el mar...