CAPITULO 7

1.5K 143 2
                                    

Amanda Contreras

Mi madre me mira esperando a que de una respuesta afirmativa, sabe tan bien como yo que por mi embarazo y la salud de mi padre es lo correcto. Si digo no y luego mi padre sufre otro infarto por la impresión, seria mi culpa pero si me caso con Diego ¿Que me asegura que llegare a ser feliz?

-. Hija ya entendí que no deseas nada mas con Marcos y te aseguro que no te presionare mas - se apresura a decir al ver que no le respondo y suspiro derrotada tratando como puedo de forzar una sonrisa 

-. Si me quiero casar con el, es solo que no creo que sea el momento para hablar del tema - asiente 

-. Bien, si es tu deseo asi sera, tu madre me ha dicho que te has estado sintiendo mal - la miro alarmada 

-. Por cosas de mujeres - aclara mi madre y asiento mas tranquila 

-. Ve a casa entonces ya luego hablaremos - ordena y aunque me gustaría negarme es lo mejor así no me estará preguntando todo el rato sobre Diego y yo. Le doy un beso en su mejilla y al separarme de el me sonríe con dulzura - cuidado - dice y puedo notar que no solo se refiere al camino de vuelta a mi piso sino también a mi relación, fuerzo la mejor sonrisa que puedo y me despido de ambos.

***

Aunque trate de convencer a Diego que podía irme sola hasta mi piso en un taxi y que el se llevará mi auto ya que el suyo había quedado en el estacionamiento del restaurant donde estábamos al recibir la llamada de mi madre, pero Diego no es nada fácil tratar de que cambie de parecer y ya que no estoy de animos para discutir con él, solo lo dejo estar y que haga lo que le plazca.

El silencio que hay entre nosotros de camino a mi piso es incomodo puedo notar lo tenso que se encuentra, quizás ya pensó bien las cosas y sabe que casarnos no es buena idea ya que estaría perdiendo su libertad de poder estar con cuánta mujer quiera y aunque yo también se que casarnos es un error la verdad algo dentro de mí me hace sentir triste. Sin poder evitarlo una lágrima se escapa de mis ojos y Gino mi rostro hacia la ventana para que el no lo noté, siento que coloca su mano en mi aún plano vientre y me tenso, pero aún así no lo miro, no quiero que me pregunte que sucede porque ni yo misma lo sé.

Siento un hormiguero justo donde tiene su mano y todo mi ser se altera, el da pequeñas caricias y yo trato de concentrarme en cualquier otra cosa y no en su tacto, cuando entra al estacionamiento de mi edificio siento como si me quedara sin aire, quiero salir del auto en cuanto se detiene pero estoy paralizada, puedo sentir su mirada sobre mi.

-. Si lo deseas puedes llevarte mi auto - murmuró y mi voz en débil

-. No, ya he pedido que traigan mi auto - responde y asiento - vamos a subir - retira su mano y siento un vacío, niego tratando de alejar ese pensamiento y me retiro el cinturón.

En el ascensor en ambiente es aún más tenso, el espacio cerrado y su perfume está por volverme loca, mi respiración es acelerada y por primera vez siento que el tiempo pasa demasiado lento, necesito llegar a mi piso y así poder tener una distancia más grande de él. Se que tiene su mirada puesta en mi pero yo evitó como puedo mirarlo, cuando por fin llegamos salgo lo más rápido que puedo del elevador, abro la puerta para entrar  y antes de poder dar un paso más al interior de mi piso Diego me toma del brazo y me hace girar, al mirar sus ojos noto el deseo, hace que de un paso hacia atrás y el termina de entrar cerrando la puerta tras él. Una parte de mi quiere separarse de el pero su mirada me tiene atrapada y me ha hecho perder la fuerza de voluntad que necesito para hacerlo, me lleva contra la pared y se pega a mi pero no me besa solo me mira y mi corazón se acelera, se que el lo puede sentir así como yo el suyo junto a su respiración acelerada, cierro mis ojos y disfruto de su cercanía, del calor que emana

Atrapada en tú RedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora