Segunda Parte CAPITULO 5

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Diego A. W. Alcantara 


.-  -. Soy tu Prometido maldicion, tu jodido PROMETIDO te guste o no y merezco respeto, si querias demostrar que puedes hacer com u vida lo que quieras ya lo hiciste, me dejaste en ridículo ante todo el mundo ¿Qué es lo que quieres Alice? ¿estas buscanto que cancele la boda y todo el mundo quede en la maldita calle? – grita Alexander y rara vez había escuchado a mi hermano alterarse de esa manera con otra persona que no sea yo, entiendo que tenga un plan pero en este momento de seguro ya Amanda vio el articulo y querra matarme – Mira me da igual si Alcantara y tu se acuestan, pero procura que la prensa no los siga pues no pienso seguir siendo el cornudo del siglo y menos que mi nombre se vea involucrado en estos espectáculos los cuales francamente si tu padre estuviera vivo ya habría tenido un infarto al ver su apellido y a su hija envuelta en semejante escándalo – cuelga y suspira

-. ¿Era necesario que utilizaras mi nombre para todo esto? – cuestiono y me mira intrigado

-. En algo debía utilizar la fama que te has ganado estos años – niego

-. Igual creo que has sido un poco cruel con ella y cuando descubra todo te va a odiar

-. Pues ya me odia por ilógico que parezca la única persona en la que confía en este momento eres tú – me señala y luego niega – bueno yo

-. ¿No has pensado que había otra manera de hacer las cosas? – pregunto mirando la foto de nuestra madre

-. Necesito que se enamore de mi Alejandro no del monstro que todos creen que soy

-. No me refiero a eso, sino a nosotros, quizás si nuestros padres no hubieran ocultado que tuvieron gemelos o si luego de la muerte de nuestra madre fueramos aclarado todo tu no tendrías que hacer todo esto y ambos fueramos compartido la carga de nuestro apellido

-. ¿Pero que dices? Sabes perfectamente que si permitimos todo esto fue por Melliza y por aquellas amnazas que recibíamos ¿o lo olvidas? Nuestra madre tenia pesadillas

-. Pero tu has tenido que soportar tando

-. Lo mismo que tu – me corta – mira lo único que te estoy pidiendo es que te mantengas al margen unos días yo me hare cargo si quieres puedes tomarte unos días, Alice posiblemente vendrá hoy y necesito que estes fuera de la empresa

-. ¿Es asi como me quitas mi parte de la herencia? – bromeo y por fin sonríe – vaya esto es una novedad el señor West tiene una sonrisa

-. Basta

-. No se quizás debería ir a la prensa y dar un informe de esto – digo y rueda los ojos – bien ya me voy, supongo que esto me da tiempo para averiguar un asunto que tengo pendiente y tal vez también me busque una esposa

-. Eso si que es una buena broma – se burla – tu y una esposa, creo que primero resucita nuestra madre a que tu te cases

-. Pasare por alto tu ofensa pues quizás puede que te sorprendas – respondo antes de salir de su oficina y aun puedo escuchar su risa

Antes de irme paso por mi oficina y busco algunos planos en los que debo trabajar y mi teléfono el cual como era de esperar tiene llamadas perdidas de Amanda y algunos mensajes, se que debería responderle en este momento pero necesito pensar con claridad que respuesta le puedo dar, una que no joda los planes de mi hermano ni mi relación con ella, aunque entre nosotros la palabra relación no se ajusta pues es inexistente.

Atrapada en tú RedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora