✦Five.

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Sus brazos se apoyaban despreocupados contra la mesa mientras hablaba sobre su vida en su país, no quiso decir cual. Harmony demasiado concentrada en la historia, Amelie distraída mirando a la barra.

"¿Te gusta aquí?", pregunta Beau.

"Sí", responde Calum con una sonrisa "La gente se ve agradable".

Se estiró apoyando su codo en el respaldo de la silla de Luke, quien se tensó y quería correr lejos. La situación era extraña, Calum actuaba extraño y nadie parecía notarlo. Así como nadie notaba la mirada celosa del ojiverde sirviendo helado.

No sabía quien era ese chico con el que estaban, solo sabía que lo quería lejos de Luke. Su cercanía le molestaba y la forma en la que se inclinaba hasta el rubio hacía hervir su sangre.

"¿Uno de fresa?"

Asintió, no podía descuidar su trabajo. Pero alguien estaba coqueteando frente a sus ojos con su novio y lo peor de todo es que nadie en esa mesa lo nota ¿están todos ciegos? No, están todos fascinados con sus historias y sus encantadores sojos cafés.

Ashton pareció conocerlo de toda la vida una vez que entraron en confianza y Beau se unió a ellos apenas pusieron un pie en la cafetería. Todos amaron su acento neutro y halagaron su piel morena.

"Michael", la voz de Amelie llamándolo desde la mesa lo hizo reaccionar.

"¿Necesitan algo?"

Se acercó y apoyó la palma de su mano en el respaldo de la silla de Luke, procurando lucir natural.

"¿Tienes un momento? Podrías tomarte un descanso y hablar un momento con nosotros", dice Amelie batiendo sus pestañas "Calum es genial".

El moreno rio bajo y todos asintieron, bueno, Luke tenía su mirada perdida en su bebida sobre la mesa. No se dio cuenta de lo que pasaba hasta que Michael arrastró una silla a su lado. Debido al poco espacio su pierna tocaba la del ojiverde y se sintió en paz cuando lo tuvo cerca.

"Amelie dijo que eres nuevo aquí también", habló Calum mirando a Michael una vez que estuvieron todos cómodos.

"Llegué hace ocho meses", responde.

"No es tan nuevo".

Todos ríen sobre el comentario de Ashton, Michael era considerado uno más del grupo desde que fue a aquella fiesta en casa de Amelie. Y fue una noche importante para él.

Luke mueve su pierna golpeando la de Michael, este lo mira sonriendo por unos segundos y luego vuelven la atención al relato de Ashton y aquella vecina que adora ir a su casa.

"Sus postres son buenos", dice "Pero no quiero salir con ella".

"Deberías darle una oportunidad", comenta Calum jugando con su vaso vacío, "Puede que resulte".

Ashton negó, no una vez, negó tres veces sacudiendo su cabeza y finalmente, "No", respondió.

"¿Tienes novia, Calum?", pregunta Harmony.

El moreno negó, solo una vez, sin exagerar como Ashton. Solo negó y se removió incómodo en su silla.

"Nos separamos cuando le dije que me iría" su tono fue extraño, sonó casi como una pregunta pero lo dejaron pasar.

Luke lo miró, estaba rompiendo una servilleta mientras hablaba, sin contacto visual con sus amigos y estaba nervioso. Todos actuaban raro y nadie estaba preocupado por eso. Y era extraño.

Luke se sentía extraño, Michael se sentía extraño a su lado. Quería salir corriendo y esconderse, no es así como quería pasar su tarde, pero no tenía mucho que hacer. Peor era llegar a su casa, donde su padre estaría esperándolo para hablar sobre la universidad y sus planes a futuro.

"¿Luke?".

Parpadeó unos segundos, todos en la mesa estaban mirándolo. Estaba acostumbrado a la atención pero no la necesitaba cuando estaban aprendiendo sobre su nuevo amigo.

"¿Te sientes bien?".

Sintió la mano de Michael en su espalda y se estremeció. Su cuerpo sintió un alivio extraño y asintió, sin hablar, su boca estaba seca y no sabía que decir.

"Necesito ir al baño, lo siento".

Se levantó con cuidado, sentía sus piernas débiles y su pecho se apretaba con cada paso que daba hasta su destino. Sentía las lágrimas al borde de sus ojos y no sabía qué hacer para detenerlas.

No sabía por qué ese sentimiento lo invadió. Sentía que se ahogaba y no tenía salvación.

Sus manos temblaron cuando las apoyó sobre el lavabo y las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas, estalló en llanto apenas vio su reflejo en aquel espejo sucio.

Y encontró la razón de su llanto.

Tarde esa noche, luego de haber estudiado para su examen de ciencias, tomó su bicicleta y en su mochila metió una bolsa con galletas que sobraron de la reunión de su madre y sus amigas.

Recorrió las calles vacías, los faroles iluminaban con luz suave cuando se aproximó a la calle que conoce perfectamente. La conoce riendo, llorando, corriendo y caminando de la mano de Michael, la conoce en la oscuridad de la noche, porque la luz de día no está permitida para ellos.

Golpeó la ventana dos veces, hasta que un chico confundido se acercó a abrirla.

"Pensé que nos veríamos mañana", susurró luego de bostezar.

"Quería verte ahora", responde el rubio del otro lado apoyando cuidadosamente su bicicleta sobre la pared, "Ven".

Michael salió por la ventana, siguiendo a Luke por el patio de la casa, quien se recostó sobre el césped con la bolsa de galletas sobre su estómago. Y Michael hizo lo mismo.

Se recostó lentamente al lado de Luke, sus brazos juntos y el ojiazul inmediatamente buscó su mano para enlazarlas.

Nuevamente las lágrimas comenzaron a caer. Allí viendo las estrellas, sosteniendo la mano de su amor en la oscuridad. Sintiéndose pequeño y débil, pero a la vez fuerte y gigante, porque estaba con Michael.

"¿Te han dicho algo en casa?", pregunta Michael en un susurro.

"Soy yo", responde "No puedo".

El corazón de Michael comenzó a latir rápido, intentó levantarse pero Luke apretó su mano y volvió a su posición, esta vez apoyó su mejilla en el hombro del menor, viendo como sus lágrimas caían y sus pestañas se empapaban con lágrimas.

"Me estoy ahogando", susurró "Me estoy ahogando en todo lo que siento por ti y no sé qué hacer para detenerlo. Y duele tener que actuar así. Duele cuando tengo que fingir frente a las personas", se detuvo para tomar aire "Mi cuerpo quema cuando estamos tan cerca y no puedo hacer nada, solo fingir que no existes para apagar mis sentimientos por un momento".

El silencio los rodeó cuando Luke terminó de hablar, pasaron unos segundos y sintió los labios de Michael presionando la piel de su mejilla, sobre sus lágrimas. Luke soltó su mano y se volteó para abrazarlo.

"Me siento así también", responde Michael, "Pero estaremos bien si nos mantenemos juntos".

"Quiero estar así por siempre", susurró ahogándose en el aroma de Michael. Sus brazos rodeaban con firmeza su torso y Michael lo mantenía cerca.

"Aplastaste las galletas", dijo Michael causando cosquillas en el cuello del menor, quien rio, "Nuestra libertad está cerca, Luke. Debes ser paciente".

Calum va a ser importante, solo eso voy a decir adióssss♡

✦hidden behind his eyes✦mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora