✦hidden behind his eyes✦muke

✦Thirty four.

Se recostó lentamente en su cama y cerró los ojos, dejando caer un par se lágrimas de sus ojos, tomó un respiro profundo y soltó el aire con tranquilidad, no podía seguir llorando, debía ser fuerte aunque doliera y no solo lo físico. Los hematomas alrededor de su torso y piernas lo torturaban cada vez que caminaba o hacia algún movimiento brusco, pero nada se comportaba al dolor que sintió en su corazón cuando vio a Luke en el suelo mientras ellos lo golpeaban, aún podía sentir sus quejidos de dolor y su llanto, también sentía el miedo recorrer su cuerpo cuando todo pasó, en como pensó que lo perdería cuando Calum llamaba a su hermana y ella recetó medicamentos para el dolor, por suerte no fue grave, era solo su cuero asimilando lo que pasó.

Pero aún así estaba asustado. No sabía de qué eran capaces aquellos cobardes que los golpearon, que lastimaron al amor de su vida, la razón por la que decidió comenzar de nuevo apenas vio su sonrisa cuando llegó a ese pueblo aburrido en medio de la nada. Y ellos no se lo iban a arrebatar, no iban a quitarle la felicidad a su ángel de ojos azules tan preciosos como el mar.

Así con el dolor en su cuerpo, se levantó y arrastró sus pies fuera de su habitación. Aún era temprano, el sol se iría en un par de horas, así que se montó en su bicicleta y se dirigió al conocido vecindario, pero pasó de largo la casa donde el dueño de los los azules probablemente se encontraba dormido en su habitación. Llegó a la casa del jardín bonito.

Caminó con algo de dificultad sobre la entrada de piedra, arrasando su bicicleta junto a él.

"¡Ashton!" Gritó mientras golpeaba la puerta, quizás se estaba arriesgando, no pensó en que Beau pudiera estar dentro de la casa, después de todo seguía siendo amigo de Ashton.

Pero no fue así cuando la puerta principal se abrió y dejó ver al rizado completamente confundo arreglando su típica chaqueta de cuero negra. Al parecer llegó a tiempo, estaba por salir.

"¿Michael?" Frunció el ceño al ver su rostro, la evidente mueca de dolor. "¿Qué te pasó?"

Se acercó a Michael, pero retrocedió inmediatamente. "No te voy a contagiar nada, Ashton." Habló casi riendo al ver la indecisión del rizado, quien se debatía si dejarlo entrar o no.

Se sintió algo avergonzado luego del comentario de Michael. Así que abrió más la puerta y lo dejó entrar, los dolores no eran tantos mientras estuvo con Luke ya que estaba más preocupado de él y su dolor pasó a segundo plano, pero desde que se tuvieron que separar esa mañana notó el malestar en sus golpes.

El sofá era cómodo, así que se sentó sin problemas. Ashton lo miraba desde el otro extremo de la sala de estar.

"¿Por qué?" Simplemente preguntó. "¿Por qué nos hicieron esto? Nos hemos mantenido alejados de ustedes, tal y como querías, primero le contaste a todo el mundo y ahora nos lastiman ¿no tienen lo suficiente al vernos sufrir por escondernos? Una cosa son los insultos, pueden decirme lo que quieran, pero a Luke, por favor, déjenlo en paz. Si alguna vez lo quisiste y fue tu amigo, déjalo, Ashton."

Ashton lo miraba, vio como a medida que hablaba sus ojos se fueron llenando de lágrimas. No entendía muchas cosas, quizás jamás podría entender lo que Luke y Michael tienen, pero pudo sentir la desesperación en él.

"No le creo a Calum que tu no estabas involucrado en lo de anoche. Fueron cinco personas."

"Yo no estaba." Dijo sentándose en el sillón contrario al de Michael. "Jamás le haría daño así a quiénes fueron mis amigos. Pero no pude hacer mucho para evitarlo, no puedo controlar a Beau, no es un niño."

Michael rio, el peso de su voz hizo eco en los oídos de Ashton, removiendo su estómago. Se sentía enfermo, el malestar se hizo presente en su estómago y la culpa lo golpeó.