8

882 64 30
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


No sé cuánto tiempo pasa, creo que unos cuarenta minutos, pero a mi me parecen horas.

Cuando por fin puedo controlar mis respiraciones y mis ojos no están llorando, separo mi cabeza del pecho de Luke. Su polo de Iron Madden está mojado de mis lagrimas y mis mocos y todo lo que quiero es llegar a casa y hacerme un ovillo en mi cama.

- Hey - me dice Luke cuando me aparto y trato de ponerme de pie.

- Mmmm - hago un ruido y una mueca y me muevo más lejos de él.

Intento ponerme de pie, pero tengo una pierna adormecida y me agarro de la pared.

- ¿Estas bien? - pregunta Luke. Quiero golpearlo de vuelta, he escuchado esa pregunta tantas veces que estoy harta.

- Si.

Me tambaleo hacia adelante, mi cuerpo aún está entumecido por el ataque de ansiedad y debo recobrar mi orientación. Luke se pone de pie casi al instante y se para al lado mío, pero levanto una mano para que no se acerque.

- Estoy bien, solo mareada - él asiente con la cabeza y se balancea en sus talones.

- Toma - me dice y me alcanza mi bolso negro. No me había dado cuenta que lo dejé en el salón y tampoco que él me lo trajo.

- Gracias - murmuro, tomo la tira y lo miro a los ojos -, por todo.

Él asiente con la cabeza y yo me volteo hacia la puerta, salgo del cubículo y me acerco a los lavaderos. Miro mi reflejo y suspiro. Soy un desastre, tengo el pelo desordenado, los ojos hinchados y el maquillaje corrido. Para nada sexy.

Me lavo la cara y las manos y me sueno la nariz, trato de acomodar mi cabello con mis dedos, pero no logro hacer mucho. Vuelvo a ver mi reflejo en el espejo y casi suelto un grito, Luke está parado atrás mío.

- Perdón - murmura, su póker face bien puesta.

- It's ok - murmuro de vuelta y saco un par de toallas de papel para secarme.

Me concentro más de lo debido en secarme las manos y miro fijamente hacia abajo, Luke está parado afuera del cubiculo de discapacitados, no se ha movido y creo que me está mirando.

This is awkward.

Boto las toallas de papel a la basura y me quedo viendo le interior del tacho por un momento. ¿Qué debo decir? ¿Qué se supone que se hace en momentos como este?

Volteo mi rostro hacia él, mis ojos se sienten pesados y aún estoy un poco mareada, como si estuviera en una nebulosa, pero intento darle una sonrisa, él me la devuelve y, por un momento, me nublo aún más. Me ha mostrado sonrisas coquetas y su típica poker face, pero esta sonrisa es obviamente distinta. Abre la boca para hablar y de verdad espero que no me pregunte acerca de lo que acaba de pasar.

run  |  «Luke Hemmings fanfic»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora