España.

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Que hago...coño... - Se dijo en mente España, aquel sujeto lo había escuchado y podía sentir sus pasos más cerca.
Buscó con la mirada algo que lo ayude a defenderse pero no había nada.

Aquel sujeto se acercaba más y al llegar a estar al frente de la puerta, lentamente la abrió.

España estaba detrás de esta esperando no ser descubierto, no podía hacer nada el miedo lo consumía.

El sospechoso al no ver nadie se retiró con la duda de haber escuchado algo.
Hiso mal en venir sabiendo que todavía podian haber personas investigando la casa.

Se retiró y volvió al lugar donde antes estaba, al frente de la gran cama.

Por otro lado España estaba aliviado, Vió como lo volvieron a llamar y nuevamente sacó su celular y colgó. Pudo ver por segunda vez aquel adorno raro, lo vió antes, pero que era?
Lo veía detenidamente tratando de recordarlo... pero nada, maldita sea.

En este momento el extraño estaba sentado al borde de la cama, con una mano frotaba la suave tela que la cubría y con la otra revisaba su celular, parecía que le costara verlo.

España no sabía que hacer, veía tambien la pistola que estaba sobre la mesita de noche que había al lado de la cama. Deberia correr y tomarla? O el hombre lo agarraría antes que él?

Tenía una idea.

Sacó su celular y empezó a grabar, grababa cada uno de los movimientos del instruso, sobre todo aquel adorno, le hizo zoom y todo. Asi podría mostrárselo a alguien más para que lo ayudaran a recordar.

Una cosa era segura. El violador del pequeño Perú se encontraba ahí, no había duda.

- Maldito gilipollas - Susurraba.


"Trrr....Trrr.... Trrr"

N

o....España...

Aquel acto fue rápido, trato de apagar su celular lo más rápido posible y lo logró pero era tarde, solo bastó con una tonada para que el extraño reaccionara y se acercara nuevamente al baño.

Esta vez era peligroso, ya que tenía la arma en mano apuntando a la puerta del baño.

España dejó cuidadosamente su celular en el lavadero el cual aun seguía grabando.

El sujeto abrió de una patada la puerta causando que se abriera de golpe lo que trajo el quejido del español al encontrarse atrás de esta y recibir el fuerte impacto.

No habia nada que decir o pensar en él, estaba muerto.

Entró y apunto a donde vino el quejido, si este era su fín no queria ser visto como cobarde.
Dicho esto España salio de atrás de la puerta lanzándose contra el sujeto. El objetivo en su mente? Quitarle todo lo que le cubría la cara y gritar su nombre al reconocerlo, así la cámara lo grabaria y si con mucha suerte aquel sujeto no se da cuenta de la presencia de esta lo escucharan los otros countrys o el mismo Perú.


Después de esto se escucharon gritos, y dos disparos.



Lo hiso... lo vió.... pero no pudo articular ninguna palabra, pues aquel sujeto lo golpeó en la cabeza y cayó desmayado al suelo.

-No te volverán a ver en mucho tiempo, España.

Dijo el sujeto para sonreir de manera sádica, agarrar el cuerpo del español para desaparecer en el espeso bosque.


Un testigo muy valioso... ha sido secuestrado.















El precio del amor // TODOS × Perú //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora