Capítulo 12

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Despertó sintiendo la luz de la ventana abrirse paso en la habitación, pestañeó aun adormilada, trato de girarse pero un dolor entre sus piernas la limito, sonrió ante lo que una vez fue un sueño, una fantasía, ahora era real, a su lado estaba el chico más guapo del mundo, se habían entregado en esa misma habitación unas horas antes, no evito un gemido de emoción al notar que Naruto la abrazaba, hacer el amor le había parecido algo tan natural, excitante e inevitable.

Se deslizó y salió de la cama, con pesar se dio una ducha, no quería deshacerse de la esencia de su amor, aún estaba adolorida pero feliz, lo había soñado tantas veces que no evito ir a la cocina a prepararle algo especial, como lo había leído y visto en películas, opto por algo rápido pero delicioso, mientras acomodaba el platillo en una charola escucho un ligero golpe en la cocina observando la figura de Naruto en la puerta, no podía cambiar por anda la mirada que le lanzaba, era única, al parecer ya había despertad varios minutos antes, ya que se encontraba recién duchado, vistiendo un pans gris con una playera blanca que le hacían justicia, se le hizo un nudo en el estómago al verlo tan apuesto.

–Buenos días Hinata -susurró Naruto.

–B-buenos días Naruto, he...yo quería sorprenderte.-soltó avergonzada mientras sostenía la charola en su manos, Naruto lo noto, opto por acercarse justo en frente para quitarle la charola de las manos con suma lentitud solo para tomar sus mejillas, acercando sus labios para besarla. Hinata se sintió caer al saborear su lento, dulce y tierno beso sin prisa.

–No tenías que hacer nada, lo mejor hubiera sido que estuvieras a mi lado al despertar, eso supera cualquier cosa.

–¿L-lo dices en serio?.-Naruto asintió mientras acomodaba su cabeza en el cuello de Hinata, oliendo su perfume.

Su calidez era reconfortante, su aroma único, los sonidos que Hinata soltaba llena de excitación cuando él estaba dentro suyo eran inigualables, jamás creyó que su primer experiencia seria así, tan espontanea sin ninguna limitación, había sido tan fenomenal incluso se asombró de la actitud que había tomado no tenía experiencia pero eso no fue impedimento para que se viniera varias veces con ella, apreciaría cada momento e incluso su nombre en sus labios mientras llegaban al clímax.

Ella suspiro con emoción, le agradaba que Naruto estuviera en esa posición, se sentía inmensamente feliz, él se separó de ella un poco para mirarla mientras planeaba decirle algo, pero se quedó sin palabras como si la vergüenza hiciera estragos en él, ella noto su nerviosismo, le pasó sus dedos muy delicadamente en sus mejillas para después tocar sus labios.

–Te amo, nunca me cansare de decírtelo, lo que paso, ha sido lo mejor de mi vida.

–Hinata, yo...tampoco me arrepiento, pero...lo de ayer, fue muy rápido, no...no usamos...-antes de que terminara Hinata coloco sus dedos en sus labios callándolo, tomo sus manos y las entrelazo entre las suyas, acariciándolas como si fueran lo más delicado del mundo.

–No tienes que preocuparte, ya me encargue de eso, créeme, me encantaría ser la madre de tus hijos, pero aun somos jóvenes, tenemos que disfrutar nuestro noviazgo.

Esa declaración lo dejo asombrado, el sentía que de verdad iban muy rápido a pesar de llevar varios meses saliendo. Pero si lo confesaba estaba profundamente enamorado de ella, ni siquiera Shizuka había llegado a ese nivel, y ella se suponía había sido su primer amor, no pudo evitar imaginarse a Hinata abrazando a un bebe.

–Ven desayunemos, debes estar hambriento, porque yo lo estoy.

–Sí, esto se ve delicioso.-desayunaron de los más felices, mientras platicaban Naruto trataba de desviar sus charlas acerca de la intimidad que había compartido el día anterior, pero Hinata estaba realmente motivada a seguir conmemorando ese momento. Al terminar limpiaron la cocina y al último la habitación, los nervios estaban en el aire.

ÍMPETU:  SOLO MÍO (NH)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora