Capitulo XVI:

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Dentro de un angosto y oscuro lugar repleto de tapetes de gimnasia enrollados, pelotas de voleyball y balones de football así como todo tipo de suministros para la clase de gimnasia, Star se encontraba atrapada. Temiendo que ya todos en la escuela se hayan retirado a sus hogares  y que nadie hubiera notado su ausencia. Para su suerte no se encontraba allí sola, su mejor amigo y compañero estaba con ella y eso ya era algo bastante considerable para tranquilizar su situación.

-¿Crees que nos quedaremos aquí hasta mañana?- pregunto la chica rubia sintiendo la tensión en sus hombros.

-No tienes nada de que preocuparte, el guardia de seguridad siempre hace su ronda antes de cerrar por completo la escuela. En cunado venga por aquí haremos mucho ruido para que nos deje salir de aquí.

- Aun no puedo creer como fue que nos quedamos atrapados.

-Nadie podría haber imaginado que el pomo de la puerta estaba roto por dentro. Solo fue un pequeño accidente.

- Estoy empezando a sentirme mal entre tanta oscuridad- dijo Star mientras se abrazaba los hombros.

- De no ser por esa estúpida regla nueva de tener que dejar nuestros teléfonos  en los casilleros ya habríamos llamado a alguien- menciono el muchacho mientras sacudía uno de los tapetes y lo colocaba en el suelo para sentarse sobre el y recargar su espalda sobre el resto que estaban enrollados y recargados contra la pared.

-¿Como puedes estar tan calmado?- pregunto la chica al tomar asiento junto a el.

-Seria mucho peor si no estuvieras aquí- respondió el muchacho mientras llevaba sus manos detrás de su cabeza. Star se acerco a el y se sentó a su lado para tratar de tranquilizarse un poco. Sin embargo no podía hacerlo, la situación de por si ya era mala pero a eso se debía agregar que los últimos tres días su compañero había estado bastante decaído. Pensó en preguntarle que pasaba desde el momento en que noto como su animo decaía, pero  decidió no hacerlo, debía darle tiempo suficiente para que pensara las cosas y cuando finalmente si sintiera preparado el se lo contaría, o al menos eso era lo que pensaba la pequeña rubia. El silencio había empezado a tornarse incomodo así que ella empezó a  buscar algún tema de conversación para mejorar el ambiente.

- Jackie no ha venido a la escuela aunque son los primeros días ¿No crees que es raro?- pregunto Star en un desesperado intento por mejorar la situación, pero inmediatamente se dio cuenta que acababa de empeorar las cosas con ese tema.- D-digo ¿Crees que este enferme o...

-Debe ser culpa mía-interrumpió el muchacho.

-¿Que?. No, ¿porque crees que lo es?.

-La noche de la fiesta, la lastime. No se como, no tengo idea de que fue lo que hice. Pero estoy seguro que la lastime. Como siempre acabo lastimando a todos. Es mi culpa que aun no haya venido a la escuela- respondió el chico con los ojos cerrados. En su voz se notaba la culpabilidad que guardaba  dentro de su ser en ese mismo momento. Star se enderezo y coloco su mano sobre el hombro de su amigo para tratar de consolarlo.

- No te culpes si en realidad no tienes un motivo Marco. Te conozco bien y se que nunca harías daño a alguien tan importante para ti de manera cociente.- empezó a hablar Star- Cuéntame que sucedió para que pueda ayudarte.

El chico la miro agradecido y decidió contarle que había pasado para así desahogarse un poco. Le conto desde el instante en que Janna les castigo encerrándolos en el armario. Al principio el chico se sentía bastante nervioso, no solo porque estaba junto a Jackie, si no también porque el sitio era demasiado estrecho y tomando en cuenta que el armario estaba casi repleto de cambios de ropa el se encontraba a una distancia demasiado reducida de su amiga.

Mi Amado Secreto (Starco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora