Cap-32 rutina

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Todo estaba pasando como ella lo había planeado, luego de una ardua disputa logró el precio indicado para que Corporación Capsula pasara a ser nuevamente de los Briefs. Era un trabajo agitado, no estaba acostumbrada a esa rutina, pero claro, pronto lo estaría. Después de ordenar todo para que esté listo se dió el privilegio de salir a tomar algo, un café no le vendría nada mal, con una mudanza y el trabajo que implicaba la empresa, no era raro que su cuerpo le pidiera un break.

Salió sonriente de su nuevo despacho, los trabajadores le sonreían y saludaban al pasar, ya la conocían desde antes pues no hace 7 años que el señor briefs decidió vender corporación cápsula. Fue al ascensor que la dirigió hasta el estacionamiento, allí subió a su auto, se colocó el cinturón de seguridad y condujo a una cafetería de la zona, ya estando ahí caminó hasta el mostrador para pedir algo para llevar, tenía tiempo suficiente para comer tranquilamente allí pero prefería ocupar ese tiempo en su departamento pues necesitaba mucho de su tiempo.

Bulma:¡Hola rick! -saludo al anciano que atendía el local- ¿Como está hoy? Veo que tiene muchos clientes -le sonrió-

Rick:hola señorita briefs estoy vivo eso es bueno ¿Usted como está? es hora pico y al igual que usted los demás vienen por algo de comer.

Bulma:estoy bien, y me alegro por usted tambien, solo temo decirle que se equivoca, hoy no podre comer, solo necesito un café cargado para llevar.

Rick:¿Ocupada no es verdad? -le hablo mientras le daba la orden a uno de sus empleados- vi en las noticias que C.C tiene un nuevo dueño ¿Es usted u otro ganó?

Bulma:no diga nada, prefiero mantenerlo en secreto, pero si, gané con un acuerdo bastante beneficioso para la patrulla roja.

Rick:me lo imaginaba -le dio su café- aquí tiene, que tenga un buen comienzo de día.

Bulma:lo mismo digo -le respondió para después marcharse del lugar–

Una vez colocó el café en la abertura para vasos que se encuentra en la parte derecha del auto, se dispuso a conducir en dirección a su nueva residencia, no quedaba muy lejos por lo que en media hora ya se encontraba en su amplio apartamento.

Edna la recibió con su maleta ya lista y con una sonrisa se despidió de su "casi" nuera.

Bulma:¿Esta segura que puede viajar sola?

Edna:si tranquila, no te preocupes tanto por mi, cuídate tú y otra cosa -se acercó mas a ella- yo cuidaré especialmente a tus hijos, se que te preocupan, pero entre tú padre, mi marido, mi hijo y yo podremos con ellos.

Bulma:gracias -le dio en beso de despedida en la mejilla- ¿Quiere que la lleve al aeropuerto?

Edna:no niña, vienes cansada ademas no tienes tiempo, yo decidí irme después, sabia lo que eso implicaba, una vez más, no te preocupes.

Bulma sonrió y edna solo la imitó, luego de ese particular encuentro la azulada se adentró en su nuevo lugar de descanso, contaba con cuatro habitaciones cada uno con su baño, una amplia sala, un living acogedor, y una cocina perfecta valga la redundancia para cocinar, y una mini biblioteca que contaba tambien con un espacio que ella misma se ingenio para hacerlo quedar como oficina.

Bulma:debería de terminar los primeros acuerdos de asociaciones cercanas, necesito urgentemente aliados e ingresos - en ese momento una llamada la sacó de sus proyectos, y sin dudarlo contestó, pues la llamada comenzaba con un +54 lo que indicaba que venia de Argentina-

Bulma:¿Bueno? -preguntó, los llantos se hicieron presentes al instante, y para sorpresa de bulma no solo provenían de trunks, si no tambien de maxi- ¿Niños? ¿Que sucede? Saben, en este momento estoy muy ocupada y no me gustaría hacerles creer que no me importan, el cansancio me esta matando, y saben que la paciencia no es mi virtud si no me encuentro 100% bien.

Lágrimas V&BDonde viven las historias. Descúbrelo ahora