Te aguantas o te callas

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Mira a su alrededor, buscando opciones para hacer la estancia en ese desolado lugar un poco más agradable, necesitaba fuego para secar su ropa y poder capear el calante frío producido por la humedad. Volvió a mirar hacia la orilla de playa y solo habían tierra, rocas y un cuerpo sin vida.
-Atravesado por un tronco- el rostro de Bulma se puso azulado del asco y rechazo, pero lo que pasó por su mente era por lejos lo más cuerdo que podría hacer en una instancia así.
Saco de su caja de herramientas, un destornillador y una llave inglesa, vacío la caja dejándola solo con esas dos herramientas y camino hacia el cuerpo. Tenía que ver la forma de sacar ese tronco del cuerpo. Usó el destornillador como un cincel y con la llave inglesa comenzó a golpearlo sacando poco a poco trozos de madera del tronco metiendolos en la caja de herramientas, hizo dos viajes hasta sacar suficiente madera para dos fogatas, en su segundo viaje, vio el arma que había usado y la llevó consigo también.
-Esto debe ser suficiente- camino satisfecha por lo que había logrado. Al llegar al tseudo campamento vio que Vegeta no estaba.
Asustada tiro las cosas y miro a su alrededor hasta que ve por el otro lado de la enorme roca una mano con guante blanco asomarse, respiró hondo y decidida a no flaquear nuevamente y camino hacia Vegeta.
-Esta vez no me vencerá el miedo- pensó mientras veía a Vegeta a la distancia tratando mantenerse de pie con dificultad.
-No te acerques si no quieres morir- con mucho esfuerzo Vegeta trataba mantenerse de pie, estaba en pesima condiciones, pálido como papel, herido y con su pierna visiblemente hinchada.
-El que morirá eres tu si sigues en ese estado- intento acercarse pero Vegeta levanto su mano intentando hacer una bola de energía. Salió de su mano una leve luz que solo permaneció visible por un par de segundos para luego desaparecer.
-Maldicion... - bajó su mano, no tenía energía, no había fuerza, y su cuerpo estaba al limite del colapso. Sabía que podría recuperarse pero sin las capsula de sanación de Frezzer sería mucho más lento. Recordó que habían dos y que una ya la había destruido con sus propias manos.
Su expresión facial delató su molestia por su estado.
-Al parecer tienes aún algo de sentido común-. Bulma puso sus manos en su cintura, con una postura altanera y soberbia.
-No estas en condiciones de amenazar a nadie así- imitó la misma mirada que puso Vegeta al burlarse de ella.
-callate...- Vegeta se dejó caer resignado, que peor podría pasar. Necesitaba recuperarse aunque fuera por unas horas para poder volver a su misión. Solo tendría que aguantar lo suficiente para recuperar fuerzas e irse, y obviamente matarla.
Bulma se acerca para ayudarlo, pero la negativa de Vegeta era mayor.
-No me toques, no te acerques a mi- dice ofuscado por la situación, poniéndose de pie a duras penas.
-Ja ¿Qué no te toque? ¿A caso llegaste hasta acá por arte de magia?, yo te traje de la orilla de la playa hasta acá, imbecil mal agradecido, pero bien, si el señor no quiere que una "debilucha mujer" lo toque, ve tu como te las arreglas, yo iré a hacer fuego, te lo digo solo por si no quieres morir de hipotermia-.

Saco los trozos de madera, abrió la capsula de artículos de limpieza, encontrando aerosol lubricante, paños para engrasar, jabón industrial para engranes, aceite y cinta adhesiva.
Tomó el aerosol, al ser inflamable sería mucho más sencillo hacer fuego, pero necesitaba algo para la combustión. Recogió el arma, la miró con detención pues si servía pero si disparaba con la misma fuerza que antes haría explotar todo a su alrededor y no obtendría fuego. La observó con detención buscando la forma de abrirla.
Por otro lado Vegeta seguía de pie, sin poder apoyar su pie izquierdo. Sintió como habían ruidos, y escuchaba como murmuraba la chica. La curiosidad pudo más que cualquier cosa y apoyándose en la roca avanzó como pudo hasta llegar frente a Bulma.
Tenía el montículo de madera para la fogata lista, y seguía luchando por abrir el arma, no notó la presencia de Vegeta frente a ella, estaba enfrascada en resolver su idea.

El se detiene a mirarla con atención, a sus ojos parecía muy segura de lo que hacia, e incluso paceria ser bastante inteligente al ver a la chica absorta en lo suyo.
En ese momento recordó las palabras del hijo de Kakarotto.
-"Si no fuera por ella no estaríamos acá"- claro, ella no era una mujer fuerte, su ki era tan bajo que ni se percibía, pero tenía otra habilidad, que muchos carecen, era muy inteligente.
-Si muy inteligente, como para creer que Zarbon era un guapo héroe- dijo para si mientras la observaba.
-Quizás necesito un descanso- sonrió para si mientras seguía mirando a Bulma.

Antes de conocernosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora