¿Disculpa?

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POV's Jinyoung

Solo dos dias... solo dos malditos días, dos días en que he cargado el peso de la culpa, no he comido prácticamente nada, no tengo ánimos ni para hacer lo que más me gusta que es el fútbol. Estoy ¿Deprimido? Cosa rara en mi, yo siempre he sido muy energético, y que yo mismo me de cuenta que estoy mal, es algo serio.

No lo aguanto más, necesito disculpas con ese alfa, por más que me haya mentido o no, la explicación me la dió mi madre de la difícil vida de los rico me me hizo pensar que a lo mejor, Jaebum haya dicho la verdad y después se arrepintió de lo que dijo... O eso es lo que mi ¿Corazón? Quiere creer.

A veces los malos no son tan malos...

Voy al aula de Mark, necesito hablar con el, me ayudara a disculparme con Jaebum indirectamente, claro está. El aroma de Mark me llega a mí suave y dulce, como dije el Omega perfecto. Rápidamente me acerco.

—¡Mark! – Le llamo, tengo días sin hablar con èl, desde el partido, creo.

—Oh, Jinyoung, tiempo sin verte ¿Y eso que veniste?

—Necesito un favor... ¿podrías darme el número de Jaebum? – abre su boca para responder, pero me adelantó. —No, no, mejor no. - Después de enfadaría por haberle llamado. —Mejor dime dónde se estaciona si auto.

Mark me mira raro, y como no, perezco más desesperado que de costumbre... Intento calmarme.

—Claro, normalmente lo deja en en Estacionamiento de ciencias naturales...–

—Oh, en el estacionamiento de ciencias claro...

—Si Jinyoung, ¿Pero que sucede con Jaebum? –No me hagas preguntas, yo tampoco lo se –

—¡Gracias Mark Hyung! – estaba por irme – oh, una cosa más... No le digas a Jaebum por esto, ni le vayas a dar mi número. Por favor.

—Emh, claro... - lo veo indeciso. -

—Prometelo por el meñique. – muestro mi dedo y mark lo toma con el suyo. –

—Esta bien. nos ve... – no logro escucharlo por qué salgo corriendo. Debí hacer esto rápido. –

Identificó el carro de Jaebum, me acerco y dejo enganchada mi nota de disculpas en el limpiaparabrisas, le doy un golpecito suave al capo.

—Lo siento por ensuciarse con mis manos y cuerpo. – me alejo rápido, puede venir en cualquier momento. –

POV's JB

Está semana la puedo describir como de locos. Después de haber besado a Jinyoung a la fuerza nuevamente y que este me golpeara por segunda vez, chocarme con el al día siguiente y luego encontrarme lo en ese parque a punto de ser atropellado. Mi instinto se hizo presente, nunca lo había sentido tan fuerte, ni cuando intentaba proteger a Mark, solo no lo pensé, verlo en peligro me pudo, lo tacleé para sacarlo de la calle y dejarlo a salvó en la acera, mientras con una mano sostenía la cadena del perro que llegó a mi segundos antes.

Posteriormente pasear al perro en cuestión y que este nos juntarse peligrosamente con su correa, su aroma me marea, lo podía tomar allí mismo, pero debía controlarme.  Haber salido a comer junto a su familia como si fuéramos una pareja, saber su apodo, y la pelea en la calle. Me siento sofocado, fueron muchas cosas en muy poco tiempo.

Pasar dos días sin verle ni el pelo ni sentir su aroma, como si la tierra lo hubiese tragado, me sentía exasperado, mi humor normalmente es malo, pero ahora multiplicado por mil, le cause miedo a dos niñas de secundaria con solo mirarlas. Mark trataba de descubrir que me pasaba, pero ni yo mismo lo sabía.

Llegó a mi carro y un aroma demasiado particular estaba circulando en el aire, era el, miró a todos lados pero no lo encuentro, extrañamente entristesido, devuelvo la mirada al vehículo y veo una nota en el vidrio. Rápidamente la tomo y es de allí donde se desprende el olor a caramelo que podría decir que es de mis favoritos.

"El otro día te dije cosas hirientes, y aúnque sea verdad o mentira lo que me dijiste, sé que debo disculparme, no soporto sentirme mal por eso. Sé que me dirás estúpido, pero alto, deja de hacerlo. ¡Tu también me debes una disculpa!

PD: siento ensuciar tu apunto con mis manos, pero necesitaba disculparme.

-Jinyoung.

Leer esta nota trajo una sonrisa a mi rostro, es tan inocente que me da ternura. Me subo al auto, dejo la hija en el asiento de al lado y voy a casa. Espero no encontrarme con mi hermano, me siento alegre y el no lo arruinara.

Logro entrar sin verlo y subí rápido a mi habitación, me cambio por ropa las cómoda y me acuesto, leo y releo esa carta, no puedo parar. Necesito buscarlo, todo este tiempo con el o sin el, me ha causado gran impresión, es tan diferente, un Omega incomparable, no como los demás que he conocido que solo se fijan en el dinero y actúan excesivamente sumisos, el no es nada sumiso difícil de callarlo...Creo que el....

No Soy Un Omega Donde viven las historias. Descúbrelo ahora