Chico Famoso

6| Detalle

‒...Como ya sabéis, la relación de Yoongi con el joven universitario ha dado de que hablar ‒las fotos de Yoongi y Jungkook después de la salida de clases del último se empezaron a reproducir por la pantalla de atrás ‒ aunque poseemos muy pocas fotos después del anuncio no oficial de su noviazgo ‒la chica llevo una de sus manos apartando los mechones que caían en su rostro ‒varios de nuestros chicos se pusieron manos a la obra y lograron encontrar varias fotos donde se les logra ver juntos, donde el novio de AGUST D, aparecía como una simple persona de relleno, pero ahora sabemos que no es así...‒  Taehyung, miro indignado a la chica atreves de la pantalla de su computador portátil.

‒ ¡Se atrevió a decirle a Kookie, relleno! Hay que ver a Kookie para darse cuenta que él no sería relleno, resalta el cualquier lugar ‒miro atento las fotos que pasaban a un costado, y su amigo sí que resaltaba, esos lentes redondos, le hacían ver el rostro más tierno, la chaqueta celeste que le había regalado, estaba seguro de que solo a él le podía ver perfecta.

‒ ¡Oppa se ve perfecto en esa foto! ‒de una de las chicas del cual estaba seguro Taehyung de no conocer, estaba inclinada sobre él, pero al aparecer no era la única.

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Jungkook se ocultó tras un árbol, claro demasiado ilógico, pero esa parecía la mejor opción cuando tenías a tres paparazzi tras de ti, desde el momento de que sales de tu casa.

Saco un gorrito gris de Taehyung, de su bolso, al igual que una tapa bocas negro; camino hasta entrar a la cafetería LY; se había enamorado de ese lugar después de haber probados sus batidos, y su capuchino.

Una mano apreso su brazo, jalándolo hacia atrás, un poco asustado Jeon hizo un poco de fuerza, impulsando su codo hacia atrás, dándole a su captor en el abdomen; pero como alguien se atrevería a secuestrarlo en media cafetería.

‒Calma Jungkook, soy YoonGi ‒ la voz del famoso salió medio estrangulada, el menor lo había dejado sin aire.

‒ Lo siento, hyung, no sabía que era usted, yo... solo me asuste ‒ termino de balbucear Jeon.

‒Te entiendo Kook, solo reaccionaste. ‒El famoso hizo un movimiento de manos restándole importancia al asunto. ‒Vamos a sentarnos.

Yoongi, arrastro al menor hasta una de las mesas frente a un gran ventanal –recomendación de Ho-Seok-.

Cómodos frente a frente; Yoongi sonrió, un poco forzado y divertido por la situación.

‒Hyung no me dijo que estaría aquí‒ una mesera se acercó a ellos, poniéndole especial atención al rostro del menor, que segundos atrás se había quitado la mascarilla.

‒No se supone que lo supieras. Jungkook, ‒pero antes de dejarlo terminar, el teléfono del famoso sonó por unos cortos tres segundos ‒. Bien es hora del show ‒murmuro. Yoongi se levantó de su asiento e inclinándose un poco se acercó a Jungkook hasta su oído y susurro. ‒La prensa está afuera, es momento de actuar.

El mayor tomo la caja blanca de cartón, con varios huecos por todos lados y la coloco sobre la mesa.

—Este es un regalo para ti.

Las manos de Jungkook se deslizaron sobre el lazo rojo que amarraba la caja y lo soltó; abrió la tapa y un pequeño ladrido lo sorprendió, pero eso no evito que su emoción subiera.

Un cachorro, dentro de esta había un cachorro, color negro, exceptuando las puntas de su orejas y sus patitas.

‒ ¡Qué lindo! ‒la calidez en su pecho era normal.

Las manos del menor se metieron dentro de la caja, atrapando al animalito de cuatro patas. El famoso sonrió, había visto, tantos de esos animales, los conejos familiares perdidos de las ratas, pero nunca se atrevería a decir eso en lo siguiente en voz alta: ‒ ese chico era como un conejo, lindo, tierno, con una sonrisa de conejo, sus ojos marrones inigualables... pero que rayos pasaba con él, vamos Yoongi reacciona; tú no eres así.

Por su cuerpo le recorrió un escalofrió y tembló de manera exagerada.

‒ ¿Yoongi Hyung le sucede algo? ‒pregunto Jungkook bajando la caja en el suelo y acomodando el pequeño cachorro entre sus brazo como si de un bebe se tratase.

Era él o estaba viendo a un tierno conejo con un lindo cachorro entre sus pequeñas y delicadas patas.

‒ Creo que estoy alucinando ‒murmuro el famoso pero fue lo suficientemente alto para que Jungkook lo escuchara.

El menor se inclinó hacia el mayor y con el dorso de su mani tomo la temperatura del famoso.

‒Hyung está enfermo ‒el menor abrió su chaqueta y coloco al perrito a dentro y la cerro, el pequeño canino saco la cabeza divertido en la parte donde el cierre terminaba; a la altura del pecho del chico con sonrisa de conejo; la mano del chico tomo la del famoso y lo saco a rastras de la cafetería.

221019