El evangelio de la destrucción

25. fuego

Tenía unos ocho años y por huir de su padre corrió hacia el desierto. Corrió hasta que sus piernas no respondieron más. Quedó perdida entre las dunas y cayo la noche,al ir sólo con pijama pronto experimento el terrible frío del desierto lo que sumado a la deshidratación la hizo desfallecer. Una figura oscura apareció ante ella.No  supo de donde salio. Cargaba una guadaña apoyada en su hombro y tenía unos ojos ámbar que se robaron su atención. Era un individuo extraño que se veía algo triste,ella lo estaba también,
lloraba y ni siquiera comprendía que iba a morir. Miró al sujeto y le sonrió amablemente

-Hola-le dijo con una voz casi sin fuerza.

-Hola-respondió él con una voz grave. La observó un momento, después sólo se luego se alejo.

Evangeline escuchó la voz de su padre en la distancia. Pensó que deliraba,pero se equivocó.

Abrió los ojos y el rostro de aquel individuo era tan nítido como las manos que llevó a su rostro. No había duda alguna,era el mismo sujeto que subió a la diligencia y por alguna razón el nombre "Bills" llego a su cabeza.

-¿Tuvo una pesadilla?-le preguntó Whiss.

Ella lo miró un instante,como pensando en que responder.

-Tu hermana Cus me pidió que te dijera que la llamaras-le dijo.

Whiss levantó una ceja,pero no cuestionó aquello.Se pasó la noche en vela con un oscuro presentimiento y recordando su charla con Bills. Se levantó y salió a su casa junto a su esposa y su sobrina. En el pueblo habían sólo tres teléfonos. Uno estaba en la alcaldía,el segundo en casa del alcalde y el tercero en la casa de Daishinkan,desde allí Whiss llamo a Cus,pero nadie respondió. Lo intentó dos veces y luego llamó a Korn,allí respondió un hombre que habló con él brevemente, logrando que Whiss azotara el auricular contra la caja del teléfono al terminar.

-¿Qué sucede?-le preguntó Evangeline.

-Korn esta...

Lo encontraron sentado en la sala de su casa.Lo pensaron muerto,pero sólo esta dormido. Sin embargo,no despertaba. El hombre con el que habló no le supo explicar bien,mas le dijo que estaba en el hospital. Whiss fue a informar a su padre y Evangeline se quedó en la sala con Anís en los brazos. Le murmuraba una canción cuando Sour apareció delante de ella. La miro serio,pero sin ese resentimiento con el que solía hacerlo.  

-Hola-le dijo él y caminó hasta llegar ante ella y le extendió los brazos pidiendo a su hija.

No podía negarsela de modo que se levanto para ponerla en los brazos con cuidado.

-¿Cómo se llama?-le preguntó Sour.

-La llame Anis...

-La bautizaste-comento mientras miraba a su hija-Es tuya entonces...Cuidala bien-le dijo y se la devolvió.

Detrás de Evangeline estaba Jerez o eso vio Sour. Ya no se asustaba con su presencia.La noche anterior habló con ella y lo había perdonado,mas le pidió un favor. La niña estaba con Evangeline y era mejor así para él,eso le dijo Jerez y el acepto,pues no sentía apego alguno a su hija. La muchacha lo vio subir la escalera murmurando y con la mirada lejana. No estaba segura si lo que le dijo Sour era real o solo producto de su estado,pero no tuvo tiempo de meditarlo pues de la habitación de Daishinkan salio el sonido de la ruptura de algún espejo o florero y un instante después Whiss dejo ese cuarto bastante molesto y cubriéndose el costado de la cabeza con un pañuelo pintado de rojo. No le dijo palabra alguna y tomándola del brazo la saco de ahí para dirigirse a la taberna. Daishinkan los miró alejarse por la seca calle a travéz de la ventana cubierta de polvo. Llamo a Shin y le dijo que les dijera a los muchachos que procedieran rápido.   

Dos hijos muertos con todo el pueblo al que gobernaban,uno en coma y Cus no daba señales de vida. Podía mentir al pueblo entero y a Whiss,pero no así mismo. Daishinkan sabia que Bills era real y quien era,como también que todos esos acontecimientos eran obra suya. La pregunta que se hacia era ¿Por qué? ¿Qué hizo a la personificación de la muerte salir a caminar por esas tierras? ¿Por qué se llevaba a sus hijos? ¿Por qué no se llevo a Sour y korn? Sour siempre fue distinto. Descubrir que amaba a Whiss lo saco de quicio y casi lo mata en el escarmiento que le dio,pero fuera de su amor pecaminoso era obediente al extremo. Predicaba el dogma tal como él a diferencia de Korn. Ese si era un problema,apenas se quedo solo en su pueblo cambió todo su discurso por uno más liberal basado en respeto a las ideas de cada individuo mientras no fueran perjudiciales para este, como para los demás y otras cosas que se alejaban del sus métodos,pero era su hijo y su estado le preocupaba,así mismo le dolía la muerte de Vados y Campari. Le dolían si y no encontraba consuelo o alguien que comprendiera sus razones,sus métodos.

Encontró pueblos devastados. Encontró crímenes y abusos,a los desesperados clamando auxilio,orden, piedad;les dio un enemigo común y les asustó  con lo que ningún ser puede derrotar;funciono. Mas todo tenía un precio y lo único que lo hubiera recompensado,se lo negó así mismo a través de su discurso,pero es que hay que ser consecuentes. Evangeline,se veía más hermosa y más dócil con ese bebe en brazos,la quería cerca porqué para eso se la dio a Whiss y,sin embargo,no la tenía.

Whiss era otro problemático,
siempre fue el menos interesado en aprender sus ideas y su sistema. Él prefería andar por ahí perdiendo el tiempo en sus absurdos gustos. Llevarlo a ser lo que ahora era le costo bastante, sobretodo porqué era capaz de discutir a su nivel,era hábil diplomático y más listo de lo que parecía. Whiss no era facil de manejar por eso debió ser más severo con él y aun tenía que serlo.      

Evangeline subió a ver Bulma,no eran amigas,pero quedarse abajo con la pequeña Anis no le era adecuado. El corte en el costado de la cabeza de Whiss era superficial así que él se quedo  abajo bebiendo un Whisky seco porqué no había hielo.

-Esa maldita máquina se descompuso otra vez-le dijo Vegeta con fastidio.

Whiss se sonrió divertido por la expresión del tabernero y en ese instante un grupo de gente paso corriendo por la calle. "Incendio" escucho el hijo de Daishinkan y de inmediato tuvo un presentimiento. Sin prisa se dirigió a su casa,pero ya a la distancia sabia que era la suya  la que se estaba quemando. Las llamas se alzaban como pilares al cielo. Era inútil salvarla, había que concentrarse en que las otras no se quemarán.

-Algo extremista,pero astuto lo admito querido padre-musito Whiss justo cuando Evangeline lo alcanzaba.

Le pidió a la niña para que ella descansara y luego le pregunto:

-No estaba ahí ¿verdad?

-No,lo puse en un lugar seguro-le dijo Evangeline.

Whiss le tomó la mano para acercarla a él mientras recordaba las palabras de Bills:

"¿Quieres hacer un trato conmigo,Whiss?"

Por los caminos iba Piccolo lentamente,meditando en sus asuntos cuando de frente a él vio acercarse un sujeto con un ataúd a cuestas. Detuvo su andar,pues de inmediato supo quien era.

-Buenas tardes Bills-le dijo Piccolo mientras este pasaba por su lado.

Él lo miro sin interés,se acomodo el ataúd sobre la espalda y continuo su camino,
pero antes de hacerlo le dijo.

-No hay nadie vivo en "Agua santa"...