capítulo 7- ¿Eres mi padre?

15 0 0
                                    

*Crystal White en multimedia* (es la que sale al lado de Maggie Lindemann)

Había despertado en mi habitación, lo último que recordaba era haberme desmayado luego de escuchar a mi tío.

Me incorporé y las imágenes llegaron rápidamente a mi cerebro.

¡No puede ser! ¿Jaden era mi padre? ¿Mi madre engañó a mi padre? ¿Qué haría mi padre cuando se enterase? ¿Qué pasaría conmigo? ¿Jaden quiere sus derechos como padre? ¿Por qué a mi me pasa esto?

Eran tantas preguntad que necesitaba responder, estaba matándome todo esto.

-Al fín despiertas, idiota.- Dijo Crystal en tono burlesco.

-No estoy para juego, Cris. Lo siento. ¿Dónde está mi madre?- Pregunté agarrando mi cabeza, esta dolía horriblemente.

Habían pasado muchas cosas en el día, mi pelea con Tiffany, ver a Alex y que por poco se haya peleado con Max, intentar salvar mi culo de que la directora me ponga castigo y llame a mis padres, y ahora me acabo de enterar que mi padre es otro, que he vivido 15 años en una mentira.

-Está hablando con tu ¿Padre?- Preguntó dudosa.

-No digas eso porfavor, aún no puedo asimilarlo.- pedí.

-Lo siento, pero tienes que enfrentar la realidad. Yo estoy aquí para apoyarte.- Sabía que ella era sincera y realmente estaba agradecida por su amistad.- ¿Quieres que llame a tu madre?

-Si.- ella asintió, antes de que se vaya volví a hablar.- Gracias por estar aquí Crystal.

-No hay de qué, idiota. Sabes que te quiero.

Ella salió de la habitación y yo no sabía cuál iba a ser la primer pregunta que le haga a mi madre.

-Quiero una explicación. -Exigí en cuando vi a mi madre entrar.

-Te las daré, pero necesito que te calmes.- Dijo ella con total tranquilidad. ¿Cómo podía estar tan tranquila?.

-¿En serio esperas que me calme?- Estaba furiosa, me habían ocultado a mi verdadero padre por 15 años

De no ser por la maldita curiosidad ni me iba a enterar.

-Quiero una maldita explicación, ahora.- Sabía que en cualquier momento iba a explotar.

-Bajale a tu tono Lucía.

-¿Perdón? Creo que estoy en todo el derecho de enojarme, ¿Crees que es fácil enterarme que mi tío es en realidad mi padre?- Las palabras sólo salían, cargadas de dolor e ira.

-Déjame contarte....

Hace 16 años cuando tu padre y yo teníamos una crisis matrimonial, nos íbamos a separar. Jaden siempre estubo apoyándome, cuando tu padre y yo discutíamos yo me iba a casa de Jaden.

Una noche Jaden y yo compramos bebidas alcohólicas, bebí como si no hubiese un mañana. Estaba confundida ya que las peleas con tu padre eran constantes y Jaden siempre estaba a mi lado, mis sentimientos se confundieron. Aquella noche yo me acosté con él, desperté en su cama, desnuda y sólo recordaba las cosas por fragmentos.

Las cosas entre Jaden y yo se volvieron complicadas. Tu padre y yo nos arreglamos a la semana y con Jaden decidimos olvidar lo que pasó, hasta que me enteré que esa noche quedé embarazada de ti.

Le mentí a tu padre y a todos haciéndoles creer que esa bebé era de Mario, cuando en realidad era de Jaden.

-Lo siento hija, pero no quería que te enteres de esto.- Estaba apenada, pero yo realmente estaba molesta y triste.

Mi madre engañó a mi padre, y de ese engaño nací yo. Soy producto de una noche de pasión en la que mi madre engañó al que creía ser mi padre.

-No tengo palabras, estoy decepcionada de ti. Esto es mucho para mi, tengo una última pregunta. - Tomé aire antes de continuar.- ¿A qué vino Jaden?

-Quiere que sepas que eres su hija, quiere recuperar el tiempo perdido contigo. Te quiere llevar a vivir a otra ciudad.- ¿Qué? Esto realmente iba a terminar conmigo, sabía que la relación de mis padres se iba a ir a la mierda si mi pa.. ya no sé si decirle padre, aunque el fue quién siempre estubo ahí.

-Quiero que pase.

Creo que no era necesario decir algo más, mi madre fue y no tardó mucho en llegar con mi verdadero padre.

-Hola Lucia, supongo que tu madre te contó la historia.- Su vista no se apartaba de la mía, observé sus facciones y caí en cuenta de que tenía cierto parecido a él.

Nuestros grandes ojos verdes, la nariz respingada, la forma de las cejas. Tenía mucho parecido con Jaden y nunca me había dado cuenta, aunque mi padre también tenía los ojos verdes, sin embargo los de mi papá eran pequeños.

Pero no me podía quedar tanto tiempo observando sus rasgos, teníamos que hablar.

-Si, me contó todo. ¿En serio crees que puedes venir de un día a otro a decirme que soy hija de un engaño? ¿Crees que puedes venir a llevarme contigo? ¿A intentar recuperar todo el tiempo que perdiste conmigo? Tengo una vida aquí, el colegio, mis amigos, tengo todo. No puedo simplemente irme.¿Sabes si quiera cómo reaccionará mi padre cuando se entere?- Las lágrimas amenazaban con salir, pero no podía largarme a llorar como una niña.

-Sé que no te puedo obligar, pero dame una oportunidad. Porfavor, Lucía.- Tomo asiento en frente mío y continuó.- Sé que Mario no reaccionará bien, pero he venido a aceptar las consecuencias de mis actos.

-Necesito pensarlo.

-Tu padre llega por la mañana, y yo estaré esperando para hablar con él. -Estaba confiando, su postura determinante lo confirmaba.

-Lo destruirán, no le pueden hacer eso.- No aguanté más, la primera lágrima recorrió mis mejillas.

Sentía pena por mi padre, el estaría devastado y más aún si me iba.

-Lo sé, Lucía dame una oportunidad. Soy tu padre, y sé que te duele todo esto.

-Yo... Está bien, todos merecen un oportunidad para volver a comenzar.- No sabía si estaba haciendo las cosas bien, pero no perdía nada.

Bueno, tal vez pierda al que tomó el papel de padre conmigo.

-Gracias, Mario hizo un gran trabajo en educarte, ahora quiero ser yo quien termine de guiar tus pasos.

Reinando en la mafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora