capitulo 5

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Estoy en un estado de shock, Incrédula y desorientada

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Estoy en un estado de shock, Incrédula y desorientada. Pero me recompongo rápidamente.

- Es enserio – le digo con una sonrisa en mis labios, la situación me causa gracia.

- Por qué estas sorprendida – a pesar de mi intento de ocultar mi sorpresa lo noto.

- Pensé que eras de los tipos que no se enamoran – le soy sincera.

- De cualquiera, tú no eres cualquiera Chiara. No te estoy diciendo que respondas a mis sentimientos, solo es para conocernos mejor. Así tú puedes enamorarte.

Me estoy aburriendo de todas sus escenas de celos y reclamos. Estaba que lo dejaba y ahora sale con esto.

- ¿Quieres tener una relación conmigo? – le pregunto.

- Si - responde sin pensarlo.

- Sabes que no puedo tener una relación, mi trabajo es complicado y lo sabes.

Es complicado para él, me ha quedado claro que no le gusta para nada. Las palabras de mi madre llegan a mi mente, de dejarme llevar y disfrutar el momento, con Raymond la paso bien me gusta estar con él, será que me dejo llevar.

- Podemos darnos una oportunidad, podemos ver si las cosas funcionan. - le digo serena, en el momento en que salen esas palabras de mi boca me arrepiento. No quiero ser una perra fría, y negarme.

- Me parece muy bien – dice alegre.

- Podemos tener citas, como dos adolescentes – le digo, burlona.

- No es una mala idea. - lo está pensado.

- ¿Vamos a tener citas?

- citas – dice – claro que tendremos citas, como dos enamorados.

Cuando comenzamos, salimos muchas veces a comer, pero esta vez van con otro propósito. Vamos a tener citas de enamorados, las otras solo eran para calentarme el oído y llevarme a la cama.

- Nuestra primera cita real. – rio a carcajada- ¿Cuándo va a ser? - le pregunto.

- Mañana me voy, para Nueva York. – dice.

- Voy a viajar, mañana. – le informo, para que no comience a especular cosas que no son.

- ¿Trabajo? – pregunta.

- Si, voy a estar en Londres dos semanas, luego voy a estar unos días en la habana, cuba.

- ¿La Habana? - pregunta intrigado.

- Es trabajo, no me voy de vacaciones – le confirmo que es trabajo, no otra cosa. - si quieres me puedes alcanzar en alguno de estos destinos. – lo invito.

- Voy a estar ocupado, tengo unos asuntos que entender.

- De acuerdo – él es un hombre ocupado, soy consciente que él no puede estar siempre de tras de mí. - voy a estar en Nueva York a principio del otro mes.

TENERTE PACIENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora