[Actualización lenta]
- ¡Deja de pretender que todo esto está bien!
- Dejaré de hacerlo cuando tú te des cuenta de que lo que siento por ti, lo que sientes por mí, está absolutamente bien.
Twilight fanfic
Segunda portada: Febrero 2022
Tercer portad...
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¿Estoy muerta?
No estoy segura, no cuando puedo sentir mi cuerpo moverse y la necesidad de abrir los ojos para poder ver lo que hay a mi alrededor, así que lo hago y me doy cuenta que aún sigo en la playa y sigue siendo de noche pero por alguna razón parece aún más iluminada de lo que recuerdo.
Intento ponerme de pie pero fallo en el intento por lo que me quedo de nuevo recostada en la arena.
— ¿Tahla? ¿Cómo te sientes?
Ese es Paul. Lo escucho perfectamente dentro de mi cabeza... Espera, ¿dije dentro de mi cabeza? Sí, lo hice. De hecho, si lo analizo mejor, su voz sonó algo brusca como si me ¿gruñera?
— Me siento algo mareada y... ¿quién está gruñendo mientras hablo?
— Tú.
Abro de par en par mis ojos y esta vez sí logro enderezarme para ver de nuevo al enorme lobo gris. Está sentado, como si fuera un perro y tiene una expresión de diversión en el rostro, incluso parece sonreír.
— Paul, necesito que me salves de este animal o sino me devorará...
— En realidad, no como humanos.
Vuelvo a escuchar la voz de Paul pero con la respuesta que podría haberme dado el lobo por lo que intento retroceder arrastrándome pero mis movimientos son aún más torpes que cuando intenté huir por lo que dirijo mi vista a mis piernas pero en su lugar me encuentro unas patas enormes y peludas, tal y como las de un lobo.
Doy un enorme grito que en realidad suena como un aullido, demasiado potente...
¿Qué diablos está pasando?
¡Oh no! ¡Maldición! Las leyendas son reales y yo me acabo de convertir en un maldito lobo mutante que está destinado a ser un animal por el resto de su vida.
¡Mil veces maldito Taha Aki!
¡Y también mil veces malditos los estúpidos Fríos!
Ahora estoy condenada a oler a perro mojado, a no casarme por miedo a comerme a mi propia familia... ¿¡Por qué me tienen que pasar estas cosas a mí!?
— ¿Tahla?
Frente a mí ahora hay un enorme lobo negro, demasiado hermoso, que resulta ser Sam, el chico que siempre vi como líder y de seguro debe ser porque es el alfa. Se ve en su manera de caminar, con las orejas bien derechas y con el hocico muy levantado, en señal de superioridad. Además su ronca voz dan ganas de no desobedecer jamás.
— Hola Sam... Creo que estoy en problemas.
— No lo estás, Tahla. Esto es completamente normal porque eres un espíritu guerrero, como nuestros ancestros y debes estar orgullosa de ello— Sam parece querer convencerme, al mismo tiempo que suena como un padre cuando descubre que su hijo es el mejor de la clase—. Ahora perteneces a mi manada así que tendrás en mí un guía en todo lo que necesites.