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Humano

Maratón 1/?

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Maratón 1/?

— Hey, despierta.

Siento que alguien me mueve y reniego en sueños.

— Tahla, despierta.

Abro los ojos ante la insistencia de quién ha interrumpido mi sueño; me encuentro con Leah, aún recostada en la cama de hospital que el doctor Cullen tiene en una habitación especial dentro de su casa. Me enderezo, sintiendo cómo truena mi espalda por haber dormido en una muy mala posición. Suelto un largo y pausado gemido por la combinación entre el dolor y el alivio de estar completamente erguida, aún sentada, en la silla.

Miro a mi hermana, un poco avergonzada por mi estado, y un poco sonrojada (de seguro) por la resaca.

— ¿Cómo estás?— le pregunto, estirando mis brazos por encima de mi cabeza, logrando otro tronido de huesos.

— No creí que fuera posible emborracharme— admite Leah a algo que yo ya había pensado—, que el alcohol pudiera afectarme del modo en que lo hizo pero, dado que consumí más que un humano promedio, incluso más de lo que un metamorfo puede, eso hizo que se me subieran las copas. El doctor Cullen dice que estaré bien y que, incluso, podría no tener resaca, al menos no como debería después de todo lo que bebí.

— Me alegro que no haya pasado a mayores, al menos no hasta que mamá nos mate por no haber llegado a dormir y, además, toda la manada por haber pasado la noche en casa de vampiros.

— Lo siento— dice, apenada—. Pero no pasará nada, en serio. Alice le llamó a mamá y le dijo que estábamos con ella, Bella y Rosalie en una pijamada.

— ¿Crees que mamá se tragó esa historia?

— No lo sé— admite, demasiado afligida; luego se recompone para agregar—. Y no me importa lo que diga la manada, en especial Sam.

— ¡Sí!— le menciono, coincidiendo en ese punto—. Ni lo que piense Jacob, ¡incluso Paul!

— Quizá piensen que pasaste la noche con Emmett— dice pícara, extrañamente emocionada, pero aquello se desvanece en cuanto nota cómo me hace sentir aquello—. ¿Qué pasa? ¿Dije algo malo?

— No, no es nada— miento lo mejor que puedo.

— No es que seas una muy mal mentirosa— dice Leah, sarcástica—, pero eres muy mala mentirosa— vuelvo a suspirar—. ¿Pasó algo con Emmett?

— Ese es el problema, que no pasó nada— ella me mira sin entender, así que sé que debo explicarle—. Damon insinuó que Rosalie y yo somos chicas de Emmett.

— ¿Como poli amor?

— Sí— hago un movimiento con mi mano, intentando alejar esa palabra de nuestra conversación—. El punto es que, con eso, Rosalie dijo que yo nunca he sido, ni seré, chica de Emmett.

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