8

1.5K 144 7
                                    

8

Entrenamiento

No pensé que dormir bajo el mismo techo que una familia de vampiros fuera a suceder en algún momento de mi vida y, mucho menos, que dormiría tan bien

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No pensé que dormir bajo el mismo techo que una familia de vampiros fuera a suceder en algún momento de mi vida y, mucho menos, que dormiría tan bien. Pero así había sido.

Después de la pequeña reunión, Jacob, Quil y Embry se fueron a La Reserva a hablar con Sam. A pesar de que Jacob me insistió en irme con ellos, no lo acepté. Necesitaba más tiempo para pensar en qué les diría a los miembros del consejo, en cómo enfrentaría a Paul (y al resto de la manada) y, además, no estaba para nada preparada para hablar con Jacob a solas, de lo que sea que quería decirme.

La mañana en la casa Cullen pasó rápido, porque la reunión con la manada sería temprano, así que me puse la ropa que dejó Alice sobre la cama (un conjunto especial para entrenamiento deportivo, aunque dudo mucho que lo vaya a usar realmente para eso), comí en la cocina, lo más rápido que pude, el desayuno preparó Esme para mí y me subí a la espalda de Emmett para llegar todos juntos al punto de reunión, aunque Edward era el único que no estaba entre nosotros porque había ido a recoger a Bella; ella quería estar presente.

— Podemos ir calentando en lo que llegan— dice Jasper, mirándonos a todos. Se detiene en mí—. ¿Estás interesada?

— Ella no entrenará con nosotros— advierte Emmett—. Sabes perfectamente que su fuerza está en ser lobo.

Jasper sonríe. Por supuesto que lo sabe.

— No necesito entrenar de manera física— le digo a Jasper—, con sólo verlos me será suficiente para acabar con ellos.

La sonrisa de Jasper se desvanece. Tengo razón, obviamente, pero no parecía gustarle que yo lo supiera.

— Sabía que eres arrogante— murmura Rosalie con la intención de que un humano promedio no escuche, casi como si fuera el siseo de una serpiente, pero no contaba con que yo fuera más que humano.

— Y no me avergüenzo de ello— mi respuesta la hace mirarme con furia pero todos los presentes sabemos que se lo ha ganado.

— Déjala en paz, Rosalie— le advierte Emmett—. Prometiste comportarte con ella, ¿recuerdas? No quiero que mis chicas se peleen.

No sé qué pensar de aquello. ¿En serio dijo mis chicas? ¿Qué demonios se supone que eso significa?

El sonido del Jeep acercándose nos avisa que Edward y Bella han llegado. Cuando el Jeep se detiene, los dos bajan, y se toman de las manos. Aparto la mirada de ellos cuando en el bosque, cerca de nuestra posición, se oye el sonido de patas pisando, aproximándose.

— Están aquí— aviso a los Cullen. De inmediato, se ponen en posición. Carlisle se queda a un lado de Esme. Jasper y Alice se aproximan y, además, le hacen un lugar a una tensa Rosalie. Emmett camina a mí, me rodea la cintura con su brazo derecho pero yo me pongo un poco al frente de él, a modo de protección. Es instintivo.

SolsticioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora