Los Dioses del Cristal. © |YoonMin, TaeKook, NamJin|

⁀➷O2: Cueva de Cristales.

-Vamos Nam, no tengas miedo. Nada malo sucederá, por eso vamos los tres, ¿No?. -el castaño intento ignorar los parloteos de su primo menor, no quería meterse en problemas otra vez por culpa de las tonterías de su par de amigos. Siguió leyendo su libro con gran interés- ¡Por favor, Nam! -gruño un poco por el movimiento brusco que el menor de los tres le daba. No lo comprendía, ¿Cuál era la insistencia de meterse en problemas?. NamJoon miro de soslayo a su mejor amigo, aquel misterioso chico de piel pálida y cabellos rubios dando un tono castaño opaco, tenía los ojos cerrados disfrutando de la brisa de la tarde, parecía importarle poco el berrinche del más pequeño de los tres.

Suspiro, el día era bonito, era primavera, podían salir y visitar algún sitio turístico del pequeño pueblo en el que vivían, ir a comer un helado, salir con alguien y pasarla bien. Pero no, estaban sentados debajo del árbol de la pequeña colina que estaba en la casa de NamJoon, haciendo nada.

-Ya basta Tae. -regaño el castaño ya cansado de los quejidos del menor.

-Pero Nam, estoy aburrido. -pataleo con un puchero en los labios, cruzado de brazos el menor refunfuño molesto- El día está tan bonito, nosotros podríamos estar buscando aventuras pero no, estamos acá, sentados debajo del roble de tu casa sin hacer nada, ¡Ah, que molesto!.

-Ya cállate TaeHyung. -NamJoon y el menor llevaron su atención al mayor de los tres, el pálido rubio los miro con esa expresión de fastidio que siempre tenía- No me dejas dormir como se debe, te quejas y te quejas.

-Pero...

-Ya mejor olvídalo, ¿Por qué estás haciendo berrinche? -pregunto el mayor rascándose el cuello, TaeHyung le sonrió mostrándose repentinamente imperactivo.

-YoonGi, no le des cuerda, no va a callarse ahora y yo quiero leer.

-¡Allá! -grito el pelinegro señalando hacia el frente del gran bosque y montaña que estaba a unos metros de ellos. NamJoon trago pesado al mirar hacia ese lugar, YoonGi prefirió ahorrarse algún comentario.

-¿Allá que, TaeHyung?.

-Nunca hemos explorado esa montaña. Deberíamos hacerlo.

-No. -respondio el castaño.

-¿Por qué no?. -pregunto decepcionado.

-Porque está prohibido, y lo sabes. Si mis padres o mis abuelos se enteran que tan solo me atreví a pensar en cruzar hacia esa zona, me castigarán horrible. Y a ti también.

-¡Nam, pero ellos no están, no se van a enterar!.

-No TaeHyung, no insistas más.

-Eres un amargado, primo.

-Yo voy. -interrumpio YoonGi, el castaño le miró consternado mientras que TaeHyung agradecía que estuviera de su lado.- Anda Nam, solo iremos y daremos la vuelta.

-No, van a regañarme mis viejos por no obedecer sus órdenes.

-Si se llegan a enterar diles que fue mi idea, no van a decir nada. -le guiño un ojo, NamJoon frunció el ceño aún indeciso, no quería problemas, pero también sabía que ese par cuando se proponía algo, no había nada que los detuviera o los hiciera cambiar de opinión.

-Esta bien, pero solo le daremos la vuelta para salir del extremo de la carretera. Nada más.

-¡Excelente! -festejo el menor.

-Por mi no hay problema. -menciono YoonGi.

Solo la vuelta, solo le darían la vuelta, no irían más haya...

O ese fue el plan.

[Los Dioses del Cristal]

-Tae, no te adelantes joder. -reclamo NamJoon de mal humor, apenas llevaban media hora de caminata y ya se habían perdido, algo que no tomaron en cuenta fue que esa montaña sería muy extensa para cruzarse en minutos, además de estar rodeada de grandes árboles que no dejaban ver casi nada de la luz del sol, el camino apenas y se lograba ver, el lugar era tenebroso.- No debí jamás hacerles caso. -reprocho el castaño.