IV

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El día de la boda llegó, León no escatimó dinero e hizo la boda sońada para Valentina. Invitó a los amigos de ella y algunos amigos de él. Lucho dijo que no tenía amistades por lo que no hubo invitados de su parte.

La ceremonia civil se llevó a cabo en los juzgados y León había reservado para la recepción el restaurante Los Ranchos,  un restaurante de élite pero que el se podía dar el lujo de costear.

El banquete era comida tradicional nicaragüense, la verdad los chefs se habían lucido. La comida estaba deliciosa. Un grupo musical amenizaba el ambiente y algunos ya comenzaban a bailar. León buscó a Valentina para decirle,

- Hija, creo que ya se pueden ir, yo me quedo atendiendo a los invitados. Imagino que Lucho debe estar desesperado por llevarte - y con picardía le cerró un ojo. Valentina no pudo evitar sonreír ante la ocurrencia de su padre.

Buscó a los alrededores y en una mesa vio sentado a Lucho devorando un tremendo plato de comida. Valentina se acercó y le dijo,

- Lucho, creo que ya podemos irnos!

Lucho abrió sus ojos y le recalcó,

- Estás loca??? Mira este lomo de costilla, las tajadas,  el queso frito, la ensalada criolla!!! No, Valentina yo no me voy de este lugar sin haber terminado este banquete.

Valentina se decepcionó esperaba que después de esperar tanto estaría loco por hacerla suya, pero a Lucho solo le interesaba comer en ese momento.

Ella definitivamente no tenía hambre, se acercó su amiga Renata y comenzaron a hablar de todo un poco.

En un momento sintió que una mano la jalaba, era León que la hacía a un lado para decirle algo.

- Valentina, que pasa? Estaba viendo a  Lucho, ese hombre se está dando una hartada!!! Al paso que va la primera noche contigo la pasará durmiendo. No entiendo a este tipo, el día de mi boda con tu madre no comí! Estuve en la recepción a lo sumo un par de horas, yo tenía en mente otras cosas y puedo decirte que tú mamá fue feliz. Casi no comimos por tres dias. Después si, tres dias después comimos y dormimos.

Valentina fue donde Luchó,

- Oye Lucho! Nos vamos?

Lucho levantó su copa,

- Que??? Mira este vino! De la mejor calidad! Lo estoy disfrutando.

Valentina se entretuvo con sus amistades y luego nuevamente abordó a Lucho,

- Ahora si?

- No, Valentina!! Vamos a partir esa torta, vamos!!!

Agarró un cuchillo y se sirvió un buen trozo de cake.

Un par de horas después cuando ya se había embutido de todo, le dijo a Valentina,

- Ahora sí, Valentina, vámonos! - la tomó de la mano y la jaló hacia el parqueo. Subieron a su vehículo del año y emprendieron su viaje. Valentina estaba emocionada no sabía hacia donde se dirigían pero tenía muchas expectativas.

Al verlos partir León que había visto como se hartaba le dijo a su amigo Camilo.

- Ese animal va a explotar sobre mi hija hoy! Pobre de mi Valentina !!

Aprendí a Amar (Juliantina) TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora