DEMON BLOOD [KTH] EDITANDO

CAPÍTULO II

Tras caminar por los pasillos llegué a la cafetería esperando encontrar a Jimin, pero no veía por ningún lado una cabellera rubia y con unos cachetes lindos, pero si llegue a ver a un chico con cabello totalmente negro y de ojos como los de bambi por lo que me acerqué.

— Jungkook-ssi ¿has visto a mi hermanito? — digo y lo he sorprendido tras haberlo hablado tras su espalda y haber colocado mis manos en su hombro, me ve y  carraspea un poco para responderme.

— Hola para ti también y si, estaba aquí hace unos minutos, estamos desayunando pero se fue tras recibir una llamada de Yoongi-hyung, deben de estar en el salón de música, ya sabes cómo son — eso si no me gusto, asentí y le di un beso en la mejilla y me puse en marcha — Hey, ¿a donde vas? — me despido de mano y salgo de la cafetería con dirección al salón de música.

Solo espero que no estén haciendo sus cochinadas.

— ¡Park Jimin! — digo abriendo la puerta y jadeo en sorpresa tras ver la escena y me doy la vuelta por protección a mis ojos.

Maldita sea.

Yo y mi bocota.

— ¡Se toca la puerta Elena! — dice nervioso y escucho unos estruendos.

— ¡Estamos en la universidad, un lugar público y es el primer día de clases! — Respondo en defensa con algo tan obvio.

— Al menos hubieras llamado Elena
— dice Yoongi-hyung aliviado.

Claro, te alegras que sea yo.

Cómo si estuviera súper acostumbrada a sus encuentros.

— Como si me hubieran atendido, estaban tan absortos con el otro, pasándose la saliva y la mano pa saber dónde que hubieran preferido simplemente ignorarme — dije de nuevo en defensa con mucha realidad, porque en efecto era verdad — ¿Ya puedo dar la vuelta? — pregunto y escucho un asentimiento y prosigo a hacerlo — Bendito Dios, necesitaré cloro y una buena borrachera si quiero olvidar esto — si, ya estaban decentemente vestidos.

— ¡Park Elena! — Me reprende mi hermano y yo le saco la lengua cruzandome de brazos.

— Nomás deja consiga un novio y te prometo que me darás la razón cuando me encuentres así con él — respondí en broma y su cara lo dijo todo.

No le gusto.

— Bien, ya basta los dos, ¿se puede saber que haces aquí pequeña? — dijo Yoongi sentándose en el sillón del piano.

Vi a Jimin un poco distraído y sonreí por dentro, is Time.

— Por esto querido hyung — sin esperar una respuesta de su parte me balance a espaldas de mi hermano y  le empecé a jalar las greñas y a repartir un poco de golpes en su cabeza y donde más se me ocurría.

— ¡No me vuelvas a apagar la bendita  alarma Park Jimin! — Yoongi-hyung observaba el pequeño espectáculo mientras que Jimin daba vueltas e intentando que parará.

— ¡Te hice un favor mocosa! — exclamó en defensa mientras intentaba bajarme por mi seguridad.

— ¿Favor?, ¡Llegue tarde por tu culpa!, si no fuera por Yoongi-hyung me hubieran puesto un retardo — termino de decir y jadeo de susto cuando de un movimiento a otro caímos los dos al suelo llegando a alarmar a Yoongi.