Malentendido (2)

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Nota: pues no quedó tsn genial pero bueno aquí esta la parte dos

Después de un vaso de vino sus sentidos no estaban al cien por ciento veía un poco nublado y estaba más feliz y más entusiasmado que antes con aquella idea de los calzoncillos de látex. Pero en su mente usar la prenda había resultado más sencillo de lo que ahora estaba experimentando. Giró la prenda y miro la etiqueta, la talla estaba correcta. Se rasco la cabeza.
-no creo que sea la talla correcta-le grito el pelirrojo desde el otro lado de la puerta del baño.

-claro que lo es… - respondió investigando la caja la giro y una botella rosa cayó al piso. La recogió y la miró con atención, sin pensarlo mucho lo abrió y al sentir el líquido aceitoso recordó que una vez sin consentimiento de su madre había usado uno de sus anillos el cual era demasiado pequeño para él y le apretó tanto que no pudo quitarlo de nuevo. No hasta que su madre le unto un aceite que hizo que el maldito anillo se resbalara fácilmente.

¡Bingo!

Su mente conecto los espacios vacíos se puso el líquido en las piernas y de un jalón el calzón de látex negro subió en un dos por tres.

-¡Mo lo he conseguido!- grito Jianyi.

MoGuanShan seguía pensando que la idea de calzoncillos de látex sólo servía para seducir si ya estabas en una relación con tu pareja. Por qué pues, uno no podía llegar con la persona que te gustaba y solamente desnudarse ¿o sí? Bueno si, si eras rubio, tarado y muy impulsivo.

La tela entre sus dedos estaba resbalosa. Cerró los ojos, quizás era porque había bebido alcohol y no estaba en sus cinco sentidos o quizás era la prenda sexy que tenía entre sus manos, pero comenzó a pensar en HeTian. ¿Y si él lo viera así? ¿qué pasaría?

Negó con la cabeza sería una verdadera vergüenza que eso sucediera.

Pero había sucedido.

El sonido que hizo la puerta al romperse lo saco de su leve ebriedad, era tarde el sol se ponía y la luz naranja entraba por su ventana, cuando sus ojos se encontraron con los de Hetian, JianYi aún estaba arrodillado frente a él con sus manos sobre sus caderas y el maldito lubricante seguía apestando el lugar y escurriendo por sus piernas.

-¿sorpresa?-  Mo miro de reojo al rubio después de que pronunciara esas estúpidas palabras.

-¿qué sucede aquí?- la voz de Xi se le antojo más seria que nunca, sus ojos se encontraron de nuevo con los de HeTian. Mejor hablar y terminar con este horrendo malentendido. Pero justo en el momento que iba a comenzar a explicar toda aquella escena el rubio se levantó y sin soltar su cintura, le plantó un beso en la mejilla y agregó.

-Mo y yo nos estamos divirtiendo –

-¡que demonios! – grito el pelirrojo.
-cállate… - murmuró el rubio - leí en una revista que el sexo gay prende a las personas- y Shan casi se vómito. Si sobrevivía a esto quemaría todas esas estúpidas revistas que leía su amigo.

-No es lo que parece. Miren nosotros… - intento explicar el pelirrojo.

-¡Usamos esto porque queremos gustarles!- gritó el rubio haciendo un puchero.

Y Mo se quedó de piedra.

-¿cómo? – dijeron todos mirando al rubio.

-Xixi me gustas mucho y… - Mo miro de reojo su amigo el cual parecía estar a punto de llorar

-No llores-dijo preocupado y con cuidado le tocó el hombro.

-¡Jianyi!- la voz fuerte y grave de Zhang Xi resonó en la estancia – ven, vístete tenemos que hablar-

-¿Estas enojado?-

-no-

-¿Te gustó?- dijo Jianyi señalando su ropa interior, Xi se sonrojo.

-Solo date prisa-

El rubio sonrió se puso el pantalón y la camisa rápidamente. El chico de ojos azules le extendió la mano, el rubio la tomó y salieron de la habitación.

-“Que desagradable”- pensó el pelirrojo, luego recordó su puerta.

-¡Ey tarados! ¿quién va a pagar mi puerta?... Bastardos- gruñó mientras intentaba acomodar su puerta.

-así que ¿planeabas seducirme? – Mo sobresaltó. La puerta se acomodó sobre sus goznes destrozados haciendo un ruido raro, se giró y se encontró frente a frente con HeTian, el pelinegro tenía las manos dentro de sus bolsillos y lo miraba con esa sonrisa de falsa modestia que lo caracterizaba.

Recordó que seguía usando los calzoncillos negros, se aclaró la garganta y desvió la mirada.

-no seas idiota, solo ayudaba a Yi- el pelinegro se sentó en la cama y agregó.

-pues creo que te ves bien-

MoGuanShan miro a su amigo y se arrepintió de hacerlo Hetian escaneo cada centímetro de sus piernas desnudas hasta su apretado calzón de látex.

-déjate de bromas He-idiota-Tian y lárgate necesito quitarme esto-

-pues ¿qué esperas?- se recostó sobre la cama sin dejar de verlo.

Mo se quedó inmóvil, recordó que hace poco se había preguntado qué pasaría si Hetian lograba verlo en aquel atuendo. Y la respuesta era: nada, no pasaría nada sólo seguiría comportándose como un imbécil. Era bueno que conservará su playera amarilla sobre todo ese caos. Miro de nuevo a Hetian, no podía creer que ese idiota fuera el actor estrella porno de sus sueños nocturnos.

-¡bien!- le grito el pelirrojo irritado- me gustas ¿está bien? Pero no planeaba ir a seducirte con esta cosa-

HeTian se sentó en la cama y lo miro sorprendido, el pelirrojo parecía asustado, sin embargo, seguía de mal humor.

-ahora que ya lo sabes, largo de aquí - dijo frustado, sentía que las mejillas le ardían, pero no de enojo si no de vergüenza, el tarado de Hetian ahora tendría una excusa más para molestarlo.
GuanShan sobresalto cuando las manos del pelinegro se posaron en su cintura.

-solo quiero que sepas que con o sin esto- sus dedos recorrieron la cinturilla de la prenda – tú también me gustas-

Mo sintió que su corazón palpitaba alocadamente, las mejillas se le tiñeron de un horrible color rojizo. Hetian lo soltó y sin decir más se encamino hacia la puerta.

-¡maldito bastardo!- le grito, Hetian se giró - eres un desgraciado después de decir toda esa cursilería ¿te vas?-

-bueno es lo querías...- GuanShan lo miro consternado-

-¿quieres que me vaya?- Mo se enojó se acercó y golpeo a Hetian luego lo jalo del cuello de su camisa y le planto un beso.

Hetian sonrió contra los suaves labios de Mo. Profundizo el beso y sus manos se resbalaron deliciosamente por la tela de látex y el aroma a fresas se intensifico.

Sólo un par de palabras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora