Primera impresión

3K 301 55
                                    


-Bastardo- pensó Mo mientras intentaba caminar, el largo pasillo se ondulaba de derecha a izquierda de forma intensa, se recargo en la pared y se concentró. El piso bajo sus pies vibro un poco, el vórtice al que extrañamente había caído pareció detenerse.

-Bastardo... mal amigo- hipo para después aspirar aire. No recordaba mucho de lo sucedido, pero el muy idiota de JianYi lo había dejado plantado, eso sí podía recordarlo.
Tenía el corazón roto y el rubio le había prometido acompañarlo a desahogar sus penas en el pequeño bar del centro.

-traicionero- pensó y comenzó a caminar sosteniéndose de la pared. Justo después de estar sentado en la barra por más de veinte minutos como un estúpido, su supuesto amigo rubio le había mandado un mensaje de texto pidiéndole cambiar el día de la reunión. Todo por el tal Xixi.

-me las vas a pagar- gruñó y siguió con su caminar torpe. Estuvo a punto de tropezarse, pero se sostuvo.  GuanShan había leído el mensaje de Yi y casi lloro, miro a su alrededor y en lugar de marcharse se bebió unos 10 shots de tequila. La soledad de su alma se apaciguo, no mucho, pero algo. La mirada de SheLi mientras le decía que no podía reciprocar sus sentimientos le perforaba el alma, luego la tristeza desapareció y una furia inmensa hacia su amigo JianYi le siguió.

¿cómo es qué él si podía conseguir a su hombre?

Y así era como había llegado hasta ese pasillo movible, mientras intentaba llegar a la puerta del departamento de JianYi

-traicionero Yi- pero se las pagaría le haría un escándalo de aquellos. Una sonrisa malévola se formó en su rostro, su amigo aún no le presentaba a su supuesto pretendiente Xi del que hablaba maravillas y estaba super enamorado. De verdad que Yi era un mal amigo, él era un libro abierto en aquella amistad y el rubio no se había dignado en presentarle al “amor de su vida”.

Por fin llego a la puerta, apretó el timbre tres veces seguidas, miro el reloj eran escasamente las 11 de la noche y él estaba hasta la atrás de alcohol, triste y decepcionante quizás pero no le importo. Cuando el rubio le abriera le haría la mejor escena de celos y arruinaría su noche... ¡ha!

La puerta se abrió y Shan se lanzó a los brazos de “JianYi”.

-te extrañe- murmuro contra el pecho de Yi, ¿desde cuándo Yi eran tan alto? Ignoró el pensamiento lo tomo de la nuca y le dio un beso rápido en los labios. Sonrió y después se vomito.

-te encuentras bien- Mo recupero la conciencia mientras terminaba de vomitar por tercera vez, el inodoro era negro y parecía caro. Tosió.

-¿jianyi?-

-puerta equivocada- le dijo el chico a su lado mientras le limpiaba el mentón con una pequeña toalla. Mo se sentó sobre las losetas frías. Un pelinegro guapo y muy alto lo miraba con consternación.

-¿puerta equivocada?- en ese momento el mareo de la borrachera lo abandono por un momento, el chico tenía la camiseta negra manchada de vomito.

-¿crees que este sea el momento oportuno para llamar a la policía?- le dijo calmadamente.

-¡no lo es!- grito Mo, se levantó y se mareo logro mantener el equilibrio – lo lamento...- camino buscando la salida. Lo cual no le resulto tan difícil ya que el departamento tenía el mismo diseño del de su amigo rubio.

-tú sabes- siguió hablando – por haber entrado a tu casa, el vómito- tragó saliva y bilis, AMARGO. -y por... el beso- lo último lo murmuro.

Tomo el picaporte de la puerta y antes de que el chico le dijera algo más Shan salió en tres pasos llego a la puerta de Yi se cercioro que esta vez fuera la correcta y toco desesperadamente.

Sólo un par de palabras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora