13. Los protegeré a todos.

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Corrí entre los arboles intentando ser los más sigilosa posible, seguía a esos tres lobos corruptos, mi aullido debió alertarlos, porque ahora iban mucho más rápido que antes, me costaba seguirles el ritmo, pero no los perdería, además, podía sentir a la manada cerca, ellos atendían a mi llamado.

Todo se puso un poco loco cuando una loba gris con manchas negras los interceptó, ella si olía a pino y tierra mojada, era de los nuestros, pensé que estábamos a salvo, pero al verlos cambiar y acercarse con calma, me oculté, quería escuchar lo que decían.

– ¿le dieron el presente a la perra blanca?

– Lo dejamos fuera de la puerta del alfa como pidió mi señora, la chica debe estar perdiendo la cabeza en estos momentos.

– Sentimos un aullido, parecía agobiado, quizás perdió el control, es una loba novata, no sabe con lo que se está enfrentando.

Pisadas, sigilosas pisadas cerca de mí, en segundos, los Hale y Sam estaban ocultos entre los arbustos y tras los árboles, viendo lo mismo que yo, escuchando lo mismo que yo.

"Bien hecho nena, lograste seguir el rastro"

"Hay una infiltrada en la manada"

Desviando mi mirada para ver hacia el frente otra vez.

– Salgan de aquí ahora, que nadie los vea, ya saben como evadir a los rastreadores y centinelas.

– Si jefa, volveremos al anochecer, el futuro alfa está herido, los seguimos hasta la casa que posee en el bosque, se quedarán ahí.

– Es la oportunidad perfecta, Leah quiere a esa puta fuera del juego, le entregaremos su cabeza, luego ella podrá casarse con el alfa, eso nos conviene a todos, así podrán unirse a esta manada y cambiar su estilo de vida.

¿Leah? ¿Hablamos de la misma Leah?

– Es su única oportunidad, oí que se comprometieron.

– ¿Qué ellos qué?

Mordió su pulgar.

– Será esta noche, asegúrense de avisar a la manada, pero no toquen a Jackson, lo necesitamos completo y vulnerable, así, aceptará a mi bella sobrina otra vez.

– Sam hizo muy mal en hacerla volver, todo sería más fácil para ella, para todos si se hubiese quedado en el mundo humano.

– "Mátenlos a todos" – ese era Tyler– "Dejen viva a la mujer, tendrá su castigo esta noche frente a la manada, llamaré a los rastreadores, Leah será condenada por esto"

Sin chistar, salimos de nuestro escondite directo a los forasteros y la traidora, intentaron correr, pero los superábamos en número, yo me fui directamente al cuello de la mujer, mordiendo con la suficiente fuerza para inmovilizarla, pero no para matarla.

– Vaya... la perra blanca es más lista de lo que pensé.

Tosió rasguñando mi hocico, aun así, no la solté.

– Cuidado Almendra – Jackson cambió– ella es la futura alfa de la manada, pronto será mi mujer.

– No cantes victoria, no soy la única que guía a esa manada de inadaptados – señalando a los lobos muertos que soltaban los hermanos Hale con furia– hay más infiltrados, más de nosotros que la harán caer a ella – apreté con un poco más de fuerza quitándole el aire, comenzó a toser– suf...friras el mismo destinos que tus padres perra blanca, verás morir a tus seres queridos, luego morirás tú.

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